Matrimonio sin sentimientos. (TERMINADA) ✔️

CAPITULO 33: Miedos.

CAPITULO 33: Miedos.

ALEXANDER HARRISON.

Apago mi teléfono viendo una última vez la foto que tengo como fondo de pantalla, es la misma que Linda tomó.

Ingreso a mi casa listo para darme un rápida dicha y ponerme ropa deportiva, porque si, el día de hoy iba a ser muy arriesgado.

— Buenas tardes, joven Alexander.—saluda Martha y otras de las señoras del aseo de la casa.

— Buenas tardes, Martha. ¿Crees que podrían hacer una rápidas chocotejas? Quiero llevárselos a Linda, y ya no tengo casi nada de tiempo.

— No se preocupe, mi niño. Las tendrá listas. —asiento dándole las gracias.

Hace unos minutos le mandé un mensaje a Li para decirle que a qué hora podía ir por ella, porque muy bien sé que está con los estudios en la universidad.

Tampoco quiero que se distraiga de sus responsabilidades.

Termino de salir de la ducha y me seco rápidamente el cuerpo, me pongo ropa deportiva negra y una mochila con varios alimentos, será un día muy cansado.

Mejor amiga: Ya te agregué.

Alzo las cejas al ver un mensaje de Linda por WhatsApp, normalmente le escribo por Instagram.

Yo: Ya te habías demorado.

Mejor amiga: Si si, solo te escribía para decirte que si quieres salir conmigo ahora tendrás que quedarte conmigo toda la noche haciendo todo lo que me acaban de dejar.

Que ofertón, si quieres toda la vida, mi reina.

Yo: Por mi no hay problema. Además, estás estudiando lo mismo que yo, será fácil.

Mejor amiga: Okay, solo te digo que me pongo muy de mal humor en las noches.

Yo: Sabré controlarte, bestia.

Escribo el mensaje mientras voy entrando a la cocina en dónde se encuentra Martha guardando las chocotejas.

Mejor amiga: Te espero, bella.

Rio mientras niego con la cabeza, le envío un gif siendo yo quién envío el último mensaje.

— Que le vaya muy bien, mi niño.—dejo un beso en su frente y salgo casi casi corriendo de la casa para ir hacia mi carro y empezar a conducir.

(…)

— Pensé que ya no llegarías.— es lo primero que dice al verme.

Maldito tráfico, por el me he demorado en llegar hacia mi reina.

— Mucho tráfico.— agacho mi rostro hacia el suyo para dejar un beso en su mejilla a modo de saludo.

— Lo suponía, ¿Nos vamos?—veo que ella también tiene ropa deportiva, así que pienso que quizás ya se hace una idea de lo que sucederá.

— Vamos.—le hago una seña para que pase por delante mío y le abro la puerta del copiloto, le ayudo a ponerme el cinturón de seguridad aunque ella se niegue.

— Antes de las doce.—dice con una sonrisa mi suegra.

— Sana y salvita regresará, hasta luego.—nos despedimos y cuando me estoy abrochando el cinturón veo a Li poner música.

Suena una en inglés la cual desconozco.

La escucho tararear y sin querer yo le sigo en la melodía de la canción, hasta me parecía ser una romántica, de esas que tanto me gustan.