PESADILLA | Poppy playtime

Capítulo 1

— Okay...empecemos desde el inició CatNap. Necesito que te levantes. — El hombre de grandes anteojos le ordenó a la Criatura Sonriente que permanecía quieta en una esquina del cuarto. - Si no lo haces, estos chicos de aquí te obligarán.

El Dr. Soya se quedó esperando cualquier reacción de la criatura, más está seguía en la misma posición. Se suponía que las pruebas debía seguirse por órdenes de su superior pero con la poca cooperación que estaba teniendo el felino estos días se le dificulta el completar el registro de cada semana.

Debía tenerlo listo como para reincorporarlo en la inauguración de la Guardería Playcare. El estrés se lo estaba comiendo vivo y digamos que la paciencia no le alcanzaba como para preocuparse por experimentos que no seguía sus órdenes. Por lo que ordenó con un asentamiento de cabeza al guardia el dispara una descargar de electricidad.

Un grito de agonía se escuchó, mostrando la desesperante reacción de CatNap que por dolor se estampó contra el cristal como un vano intento de quitar el terrible malestar que le provocó el disparo. Desde su boca una espesa cantidad de gas rojo expulsó hasta cubrirse por completo.

Ante la acción el hombre anotó en los documentos todo lo visto, mostrando antes los ojos de la criatura su indiferencia.

— Si no quieres otra descargar, te recomiendo cooperación.

Aunque el felino intento recuperarse de lo sucedido, no podía por tener la sensación de ardor en su cuerpo, que permaneció en sus cuatros extremidades extendidas en el polvoriento suelo.

Desde su grande boca salió un leve jadeo al igual que el humo rojo que lo caracterizaba. No quiso sentarse o el ni siquiera moverse aunque las circunstancias no estaba a su favor al sentirse amenazado por el guardia que lo apuntaba nuevamente como un indicio que dispararía si no hacía lo que el Dr. Soya ordenaba.

Al final pudo permanecer levantando con ligeros temblores.

— ¡Vez! Solo necesitaba un poco de motivación. — Aplaudo con falsa emoción. CatNap como respuesta gruño con molestia tras su acción pero el hombre solo lo ignoró. — No necesitas ser tan arrisco. Hoy en un gran día para empezar con una nueva prueba.

— No quiero. — Una voz gruesa como distorsiona se escuchó.

Se nego rápidamente el 1088, como reflejo solo se alejo del cristal. El científico sonrió negando con su cabeza.

— Calma no es lo que tú piensas. — Le respondió al enorme felino que lo observaba con esa cuencas que reflejaba la oscuridad más con esa aterradora sonrisa que lo asemejaba a lo que llegaría ser. — Por hoy solo requiero de tu concentración. Posiblemente conocerás a las demás Criaturas Sonrientes, osea, DogDay, PickyPiggy, Bobby Bearhung y bla, bla, bla.

CatNap asintió como respuesta.

— ¡Perfecto! Hoy los conocerás a fondo ¿No estás emocionado?

— No

La negación del Felino le vino como un balde de agua fría al Dr. Soya que esperaba al menos un poco que su Criatura Sonriente dejara ese síntoma que por los meses le ha estando dando problemas. Si no podía hacer que CatNap tomara la iniciativa que el necesitaba, tendría que recurrir a la fuerza por doblegarlo.

— Esa fue una respuesta muy equivocada gatito. Encargarse de él. — Con un chasquido de dedos, los hombres que lo acompañaba captaron lo ordenado, colocarse las máscaras de gas, como cargador las armas. Mientras la puerta de cristal era abierta.

Sus instintos se activaron para el experimento que no dudo en atacar a quien estuviera en enfrente, por lo dentro de su celda ocurrió una sangrienta pelea que CatNap intentaba manejar a dura penas. Sangre y muerte fueron los únicos testigos dentro de la celda.

Todo siendo observado por el Dr. Soya que disfrutaba de tal espectáculo.