Añoranzas cumplidas

71 19 35
                                    


Han pasado cinco meses desde que Levi se marchó, fue complicado decirle adiós en el mismo lugar donde nos conocimos, no me permitió acompañarlo al aeropuerto para que el dolor no fuera aún peor. Mis días se han transformado en unos tan lentos y aburridos que hasta mi abuela creo que lo ha notado, me hace mención de que mi mirada no tiene el mismo brillo de antes, a lo que le contesto que no se preocupe, que son ideas suyas, pero a quién trato de engañar, extraño demasiado a ese pequeño y malhumorado italiano.

No significa que Levi no me halla llamado por teléfono y que no me halla contado del maravilloso éxito que está teniendo con sus pinturas, sobre todo con su obra principal que no me quizo mostrar, por decirme que lo haria como sorpresa al volver. No es tampoco que no me diga que me ama y extraña, es solo que su distancia física es torturante y siempre la mente comienza a formularte ideas de que en algún momento te llamará para pedirte que olvides todo, porque necesita retomar su vida sin ningún tipo de vínculo emocional.

Tratando de sacar todo aquello que mi interior guarda, respiro profundamente y acaricio el anillo que Levi me dió como prueba de su amor, entiendo que es algo material pero me aferró a que este me de un poco de la paz y tranquilidad que necesito, dándome la esperanza de que él volverá.

-Hange querida, necesito tu ayuda, podrias venir un momento...

- Claro abuela -al acercarme lentamente observé a un hombre alto y de cabello rubio junto
a ella- dime abuelita en que te puedo ayudar?

-Este joven caballero necesita ayuda con una tarjeta para su esposa, me explica que desea escribirle unas palabras pidiéndole disculpas, porque tuvo que trabajar en el día de su aniversario de bodas, es asi o me explique mal, señor?

- Para nada señora, lo ha hecho perfectamente.

Al escuchar al hombre hablar tan educadamente no pude evitar mirarlo, unas cejas gruesas enmarcaban su su rostro calmado, con unos ojos azules como el cielo y su expresión de amabilidad que me invadió tan profundamente, que me hizo sonreirle como prueba de que lo ayudaria en su dilema personal.

-Digame señor, que le gustaria que escriba en su tarjeta?

- Bueno señorita para empezar deseo presentarme, mi nombre es Erwin Smith, la razón por la cual pido su ayuda es debido a mi falta de facilidad para expresar mis sentimientos en forma escrita, diria que es nula. Y debido a que trabajo en relaciones públicas, mi jefe me ha pedido como favor personal que me encargué de un evento muy importante para él, asi que tuvimos que viajar mi esposa y yo improvisadamente en nuestro aniversario, lo que provocó un cierto enfado en mi esposa Marie.

-Señor Smith, no se preocupe por eso, mi nieta tiene una gran habilidad para escribir cosas hermosas, mientras yo prepararé su ramo de gerberas.

- Un ramo de gerberas, abuela?

-Si querida, no te preocupes, el señor Smith me ha especificado como debe ser.

-Señorita, podriamos iniciar con la dedicatoria por favor?
Entregándome una tarjeta del tamaño de una hoja carta doblada a la mitad, con el dibujo de unas flores y los bordes en color dorado.

-Claro señor Smith, pero primero podria por favor contestarme una curiosidad sobre su pedido?

- Encantado señorita.

-Porqué eligió un ramo de geberas en vez de uno de rosas o girasoles?

- Para serle sincero antes de venir hacia este país, estaba trabajando en la promoción de una exposición de arte para mi jefe, misma que me permitió el privilegio de entablar una conversación muy intima con él, sobre una de las obras que más cautivo mi atención.

Le pregunte que significaba, relatándome que entre sus trazos y colores se narraba como una historia de amor surge hacia una joven que lleva entre sus manos un ramo de gerberas y como esta cautivo su corazón desde la primera vez que la vió.

Amor entre Pinceles y Flores.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora