Tenerte tan cerca francamente me llena de emoción, me hace estremecer, esa sonrisa me hace adicta a ti, apenas soy capaz de reconocer que tu eres y siempre has sido mi mayor debilidad.
La calidez, la sorpresa, y la intriga me invadieron al mismo tiempo, cerré mis ojos con fuerza y suspire lentamente antes de voltear.
-¿Damian?
-¡hola hermanita!
Abrace a mi hermano como nunca antes, el sentimiento de felicidad y alivio llego al mismo tiempo que el de la tristeza.
-llegaste temprano.
-ya queria verte... - dijo sonriendo pero viendo directamente a Danna, como cautivado por su sonrisa.
-ella es Danna, mi mejor amiga, Danna el es mi hermano Damian.
Ellos se saludaron con amplias sonrisas mutuas y con un brillo en sus miradas, casi como si hubiese ocurrido "un flechazo", como eso que en las peliculas y cuentos llaman "amor a primera vista".
Danna tenia que seguir trabajando y yo tomaria el resto de la noche para estar con mi hermano asi que, nos despedimos de Danna, y salimos del lugar.
Llegamos a un lugar cercano llamado "Cafe Un Deux Trois" y ordenamos algo de beber.
-gracias por venir, me hace mucho bien que estes aqui.
-no podia dejarte sola en este momento, ademas ya nos hace falta un buen rato de hermanos, sabes que te adoro.
-y yo a ti baby.
Damian era un chico dulce, a pesar de ser un hombre apuesto, solo habia tenido 2 relaciones serias en su vida en las que habia durado mucho tiempo, y aunque las chicas que le rodeaban siempre lo hacian con intenciones de tener algo sentimental con él, él era amable pero muy selectivo en cuanto al tema, yo estaba mas que orgullosa de él por eso, y por todo lo bueno que habia logrado en su vida, tanto personal como laboral.
Estaba nerviosa por el tema de Joe, asi que trate de evadirlo un poco hablando con mi hermano sobre Danna.
-Sabes? Es una increible amiga, es linda, tierna, muy buena persona y no tiene novio...
-es muy hermosa, ¿no te importaria que me acerque?
-claro que no, al contrario, te conozco, se como eres, y la conozco a ella, harian una linda pareja.
-eso me agrada, gracias "Al".
-sabes que te adoro...
Sonreímos
-y entonces... ¿Joe?
-no se... estoy... confundida...
-cuéntame.
-Sabes bien que he estado enamorada de él durante años, verlo de nuevo... me ha dejado completamente en shock, no esperaba volver a verlo y mucho menos...
La pausa fue larga, y Damian estaba expectante.
-¿mucho menos que...?
-Que todo lo que he sentido por él pareciera haber resurgido dentro de mi. No encuentro palabras para describir todo lo que siento en este momento. Todo es demasiado confuso.
-¿lo amas?
-no lo se, ¿porque deberia amar a alguien durante tantos años si nunca fuimos realmente... nada?
-quizas porque ese sentimiento es el que acompaña a las personas cuando saben que alguien es "el amor de su vida"
El silencio volvio apoderarse de mi, envolviendome y llevandome a lo mas profundo de mi ser, ahi donde guardaba mis mas oscuros secretos.
¿Y si...? No, no puede ser, no, él no.
-tranquila Al, si la vida les esta dando otra oportunidad, es por algo. No tengas miedo a descubrir por qué.
- ¿y si me equivoco? ¿Y si me dejo llevar por lo que siento, y...?
-¿y si... decides que él es tu felicidad?
-tengo miedo Damian, no quiero perder mi futuro por algo incierto.
-Dejame preguntarte una cosa, y piensa muy bien la respuesta ¿que pasaria si te casas con Harry y descubres con el tiempo que tu cuerpo, tu mente, tu corazón y tu vida siguen anhelando a Joe, vivirias en paz con ello, serias feliz?
-yo... creo que no, no podria vivir así.
-Entonces es mejor que descubras realmente que hay entre tu y Joe antes de que las cosas avancen con Harry y te cases amando a alguien más.
-No se si puedo con todo esto Dam, siento que es demasiado para mi, me mata la intriga, pero mas no saber que hacer.
-Al, tu tienes el control de todo, es tu decisión, no tengas miedo.
-gracias por estar conmigo cariño.
-para eso somos hermanos preciosa.
La pregunta de Damian me habia dejado pensativa, con una respuesta, pero con muchas preguntas más.
Nuestra conversación siguió adelante, hablando sobre todas las cosas que no nos habiamos contado los ultimos meses desde la ultima vez que nos vimos, en el cumpleaños de papá. Por un momento, mi hermano que hablaba y sonreía sin parar, detuvo su charla en seco mirando fijamente detras de mí.
Joe permanecia a distancia de nuestra mesa como esperando poder acercarse.
-¿le has dicho donde estabamos?
-no, lo juro, no lo haria...
-lo siento, necesitaba verte Alice... -la voz de Joe invadio todos mis sentidos, y de pronto me paralice.
Damian tampoco sabia que decir, pero volteo a verme enseguida para intentar decifrar mi mirada, yo estaba simplemente en blanco.
-Hola Damian, lamento interrumpir, pero de verdad necesito hablar con Alice.
Le hice una seña a mi hermano con la cabeza para indicarle que todo estaba bien, que podía retirarse.
-Al, si necesitas algo llámame, estaré cerca. Un gusto verte Joe, cuídala por favor.
Damian se retiro del lugar, y Joe tomó asiento.
-No deberias estar aqui, lo sabes.
-Necesitamos hablar.
-No Joe, si no he contestado tus mensajes es por una razón.
-Y ¿cuál es?
-No deberias buscarme, estoy comprometida con Harry, y tú... tienes a Cath.
-Dejaria a Cath sin problema por ti.
-¿por mi...?
-Este no es el lugar adecuado para hablar de nuestros asuntos Al, ¿te parece si salimos de aqui...?
¿Privacidad, si estamos a solas, no se cuanto podre contener mi deseo? Y si nos quedamos aqui alguien puede vernos juntos, y todo podria complicarse catastroficamente.
-Esta bien, pero yo salgo primero, no pueden vernos salir juntos.
-De acuerdo.
-Te veo en mi departamento.
Me levanto de inmediato sin esperar mas respuesta, y me dirijo a la salida, viendo de reojo como Joe llama a un mesero para pagar la cuenta.
Salgo del lugar, y mi corazón no deja de latir rápidamente, en mi mente resuena...
Mierda, ¿que acabo de hacer?
Las palabras de mi hermano Damian me invanden de pronto.
"Quizas porque ese sentimiento es el que acompaña a las personas cuando saben que alguien es el amor de su vida..."
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Siempre tú
RomanceHan pasado muchos años desde que Joe y Alice se vieron por última vez creyendo que la vida jamás volvería a reunirlos, callando quizás para siempre lo que nunca fue, y que de alguna manera siempre permaneció en ellos. Mejores amigos, presos de un am...