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Una muerte tras otra...

Se encontraban cadáveres de personas que legalmente se consideraban "malas" o  "pecadores".

Pero... ¿Que o quien es lo que hacía semejantes atrocidades?...

Aproximadamente, hace 11 años...

Era un niño como cualquier otro, sin darme cuenta, que ya me habían diagnosticado con varios trastornos psicológicos, como lo eran el TDAH, TEA (transtornos espectro autista Asperger), neuropatía periférica, trastorno de personalidad.

Al igual que era más propenso de tener cierto ataque de ansiedad en algunas situaciones, teniendo mucho nerviosismo y ciertos tics.

Mi padre al igual que mi hermano, cambiaron su comportamiento desde que se enteraron de todo, se volvieron agresivos y violentos conmigo y mi madre, mi padre y mi hermano no querían tener a uno de la familia como un "especialito" o un "marica que no se sabe defender", aunque no eran tan graves mis transtornos, podían empeorar cuando entre en la pubertad o en la adultez, mi padre y mi hermano se sintieron demasiado decepcionados.

Se formaban peleas a diario por todo, literal, por cualquier mínima cosa, cada día eran más violentos, llegaban a un punto... Que pasaron de ser insultos y amenazas, a ser golpes los cuales llegaban a que dejarán moretones en mi cuerpo y en el de mi madre... Por miedo a que mi padre o mi hermano hicieran algo, no dijimos nada, ni a un psicólogo, ni a los policías, como dije, por miedo a que mi padre nos hiciera algo más aparte de golpearnos.

(Por suerte, no era alcohólico, solamente fumaba demasiado)

Por parte de mi hermano, siempre estaba a la defensiva de mi padre, siempre lo defendía a el de cualquier cosa, cada vez que se formaba una pelea, me hechaba la culpa a todo, el era el que más me golpeaba.

Genere cierto trauma o rencor hacia ellos dos.

Aunque ya tenía algunos amigos de clase,  dos de ellas eran especiales para mí, Dana, una chica de mi misma edad, de piel Morena, cabello rizado, y delgada, la quería mucho, ya que con ella me sentía seguro y bien, me defendía de todo, como si fuera... Mi hermana.

Éramos demasiado apegados.
Junto a otra chica, Lyna, era una chica común, piel blanca, cabello largo y negro, con ojos oscuros, al igual que Dana me defendía de todo y me aconsejaba de todo.

Mi hermano, se había ido al ejército colombiano aproximadamente cuando tenía 16 años, mi padre, el seguía fumando demasiado,
A mediados de año, ya había tenido alrededor de 12 años de edad, como era de esperar, mis padres habían empezado a pelearse, insultandose y amenazandose de uno al otro, yo por mi parte, estaba encerrado en la habitación de mi madre tratando de no oírlos pelear.

Pasaban algunos minutos, lo que parecía ser que ya estaba algo tranquilo, aunque seguían los insultos y demás, se estaba convirtiendo en un silencio, me estaba tranquilizando un poco más al pensar que por fin se estaban callando.

No pasó mucho tiempo, alrededor de 30 minutos, escuche como una botella se rompía en mil pedazos seguido al grito de mi madre.

Me pare rápidamente de la cama saliendo de la habitación, me quedé parado en el pasillo para saber de donde venía el fuerte golpe.

Me dirijo a la cocina, y veo como mi padre... Estaba ahorcando a mi mamá, quedé impactado ante la situación, con los ojos abiertos de par en par, hasta lágrimas estaban saliendo de mis ojos...

-¿mamá?...-

Mis padres me voltearon a ver al mismo tiempo... La cabeza de mi madre, completamente ensangrentada, mi padre se había callado al escucharme.

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⏰ Última actualización: Mar 14 ⏰

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El juez de la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora