𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝒄𝒖𝒂𝒓𝒕𝒐.

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—¿Dónde está el autobús? —preguntó Malcolm algo curioso. Detrás de él, Bon sostenía una linterna para que pudiera revisar más cómodamente el motor de un auto.

—Ya no trabajo llevando niños, ahora llevo a una banda. Esa gente me paga mucho mejor por guardar sus instrumentos y desarmar la batería.

—Ah, entiendo. —ahora le hacía sentido por qué había aparecido por la tarde y no durante la mañana. —Yo estoy intentando formar una banda.

—¿Qué instrumento tocas? ¿O acaso cantas? —no conocía esa parte del omega, aunque si lo pensaba bien, conocía muy poco de él.

—Toco la guitarra, Angus también. Hoy vamos a reunirnos con un tipo que toca la batería.

—Les deseo suerte entonces.

—Gracias. ¿Podrías acercarte un poco más? —sintió la entrepierna del otro alfa pegarse a su trasero. Tragó en seco, no quería pensar que lo hacía a propósito. Además no podía pedirle ayuda a Dave, pues este estaba ocupado con una moto. —Aún nos falta conseguir un bajista y un vocalista. —le sacó charla para evitar volver el ambiente incómodo por los pequeños movimientos que él mismo hacia.

—Bueno, a mí me gusta cantar. Tal vez no soy el mejor, pero sí soy responsable con los ensayos. —Malcolm soltó una pequeña risa nasal. Bon también rio un poco. —Hablo en serio, llegaría puntual a todos lados.

—Te tendré en cuenta entonces. Tienes un bonito acento, así que supongo que con algo de práctica podrías cantar bien. —le gustaba oír a otras personas que tuvieran su misma tonada. Que Bon también fuera escocés era algo que le agradaba de él.

Ambos oyeron pasos detrás de ellos, junto con una pequeña tos ronca que buscaba capturar la atención de los dos presentes.

—Ah, buenos días. —habló Bon a la vez que se despegaba del más bajo. No conocía a la mujer que tenía en frente.

A diferencia suya, Malcolm si sabía quién era. —Hola, amor —se puso algo nervioso, la mujer seguramente lo había visto siendo apretado contra el auto por Bon.

—Así que este es ese tal Ronald, ¿Eh? —cuestionó la alfa cruzándose de brazos. A sus ojos, su pareja estaba engañandolo.

—Sí, un gusto. —el de rulos extendió su mano para saludar correctamente. Sospechaba que aquella chica era la novia de la que tanto hablaba Malcolm. Linda aceptó el apretón poniendo una cantidad innecesaria de fuerza.

—Te esperaré en el auto. Supongo que quieres despedirte correctamente de tu amigo. —hizo especial énfasis sobre esa última palabra. Se dio la media vuelta para marcharse hacia su propio vehículo con el que llevaría a su pareja para encontrarse con el baterista.

—Nos vemos luego. —gritó Scott. —Creo que le caí bien.

—Sí, seguro...

Algunos pocos minutos después, Malcolm ya estaba en el auto de su novia. Su Pontiac lo había dejado estacionado en el edificio para no tener que gastar tanto combustible, Linda sólo lo dejaría con su hermano en el bar y él luego volvería en transporte público hacia su casa con Angus.

—Bebé, en serio nada de lo que viste te da motivos para que te enojarte.

—¿Estás hablando en serio, Malcolm? Ví como te apoyaba el paquete y tú parecias muy feliz por eso.

—N-No es así, él solo me estaba ayudando.

—¿Está bien si alguien más te toca pero no quieres que lo haga yo?

—No es verdad, amor, escúchame. —se quedó sentado dentro en su lugar cuando estancionaron, no quería bajarse sin aclarar las cosas antes.

—Has hablado varias veces de ese tipo, te visita todos los días y te trata bonito. Pero no dejas que yo te trate lindo a ti. ¿Qué se supone que le ocurre a nuestra relación?

𝑳𝒊𝒗𝒆 𝑾𝒊𝒓𝒆 ~ 𝑩𝒐𝒏 𝑺𝒄𝒐𝒕𝒕 𝒙 𝑴𝒂𝒍𝒄𝒐𝒍𝒎 𝒀𝒐𝒖𝒏𝒈.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora