Maldito

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Casi ha pasado un año desde el día en el que atrevidamente me enterraste la daga de tu traición y créeme que la herida que me causaste sigue igual de fresca como en el momento en el que se te ocurrió clavarla en la parte más sensible de mi alma, esperando que en ese momento de esta empezara brotar la sangre con la que planeabas ahogarme.

Desgraciado, maldigo el día en el que se me vino a la mente el pensar que por la eternidad juntos podíamos estar.Recuerdas tanto que teníamos que decirnos, "Juntos como hermanos, contra el mundo y hasta el final de los tiempos." Jamás pensé en el día que esas palabras solo se tornarían en dos oraciones sin sentido, unidas por una coma. Hijos de diferente padre unidos por azares de la vida y por el destino, mismo que se encargaría de alejarnos cuales polos semejantes de dos imanes.

Ha pasado mucho y a la vez tan poco tiempo, y en parte ahora te culpo por la falta de confianza que tu mal obrar me ha provocado, no puedo ser capaz de confiar y querer a su totalidad a una nueva persona, como lo solía ser desde un principio, aunque no puedo decir que estoy del todo mal, pues tu última lección para mi ser fue jamás poner a alguien por en cima de ti, sin importar todo el cariño y estima que le tengas a aquel a quien llamas hermano.

Pero de que me sirve esa lección si no puedo lograr mantener mi cuerpo al margen de la cordura, constantemente confundo conceptos de amor y odio, así como lo es con la amistad, me acostumbre a comportarme como la mujer o como el perro que siempre estaba esperando a tu regreso sin esperar nada a cambio, soy la burla de mi propia persona, me comporto como una dama para ocultar la desdicha de mi alma.

Así como tú, ha llegado alguien nuevo a mi vida, pero tu recuerdo permanece y dudo mucho que algún día pueda volver a mostrar mi ser como realmente es, con él o con alguien más, es cierto que del tema hemos hablado, pero mis demonios de inseguridad siempre velan para deshacer todo aquello por lo que lucho y valoro en esta miserable pero apasionante vida, aunque ahora no me sirvió de nada esta nueva amistad, pues ahora él terminó haciendo lo mismo que tú, sólo que no tuvo las suficientes agallas para decirme que no le importaba más y simplemente las palabras desaparecierón...

Nuestros errores los tengo presentes día a día, y constantemente estoy en la batalla para poder actuar como un hombre normal, pero siendo honestos, normal es una palabra muy insípida y cliché esta vez, así que interprétalo a tu placer y gusto.Tengo miedo de comportarme de la misma forma que lo hacía contigo y perderme en infinito abismo del deseo por segunda vez, no quiero tener a alguien similar a ti, al menos una vez más desearía querer a alguien de la forma en la que te quise, no como el erróneo mensaje de amor tergiversado, si no como la forma de cariño incondicional más bella que he experimentado en toda mi existencia.

Maldito y querido seas, no te lo puedo negar, solo añoro una mañana poder despertar y esperar a no tener que pensar más en todo el dolor y pesar, como el que ahora mismo me encadena a un cuerpo de alma ausente.

"No conoces el dolor que sufrí al revivir el ciclo de los errores que cometí y los que estuve por obrar."

Nota encontrada en una cama vacía de un hospital con una rosa blanca al lado.

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⏰ Última actualización: Jun 28, 2015 ⏰

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