WASHROOM. (Haobin)

Washroom

Hao estaba terminando de poner su ropa sucia en la lavadora cuando saltó al sentir unas manos agarrar repentinamente sus hombros.

"Jesús, Hanbin, me diste un susto de muerte", dijo Hao, dándole un puñetazo en el brazo. "Ni siquiera te oí entrar".

Hanbin se rió. "Lo haces demasiado fácil, hyung. Siempre eres tan miedoso". Dijo mientras tocaba juguetonamente su costado.

Luego se dirigió a la secadora para comenzar a quitarse la ropa limpia.

Hao miró por encima de su hombro para asegurarse de que la puerta del cuarto de lavado estuviera cerrada antes de pasar sus manos alrededor de la cintura de Hanbin y besar su cuello.

"Hao-hyung, ¿estás loco? ¿Qué pasa si alguien entra?", dijo Hanbin, mirando preocupado hacia la puerta.

Hao lo ignoró y continuó plantando besos en su cuello.

Habían pasado algunas semanas desde que se mudaron a compartir casa con todos sus amigos, lo que también marcó el comienzo de la relación de Hanbin y Hao.

Aunque todavía tenían que contárselo a los demás integrantes de la casa.

"No te preocupes Bin-ah, la puerta está cerrada".

"Sí, pero podría abrirse en cualquier momento" dijo, liberándose del agarre de Hao.

Hanbin fue mucho más cauteloso y precavido acerca de que sus amigos se enteraran de su amorío, especialmente después de que el mismo haya dicho verbalmente que 'nada pasaría entre ellos dos'.

Pero pasó.

Justo en la primer noche de convivencia, y las siguientes también.

Habían hablado de ello muchas veces antes y sus últimas conversaciones se repetían en su cabeza.

"Tendremos que decírselo en algún momento, Hanbin".

"Lo sé, lo sé. Démosle a esto un poco más de tiempo".

Hao comenzó a dudar si él siquería quería contárselo a los demás chicos.

Hao hizo un puchero cuando Hanbin comenzó a alejarse de él, a punto de agarrar un cesto de ropa sucia. "¿Qué, entonces no me vas a devolver el beso?"

Hanbin se rió entre dientes y se giró para darle a Hao un beso rápido en la frente.

"Ahí está, ¿estás feliz?"

"¿Me veo feliz?" Dijo Hao, claramente frunciendo el ceño.

Hanbin se rió y se dio vuelta nuevamente para empezar a doblar su ropa en la canasta.

"Ya, Hanbin-ah. Si te hubieras movido un poquito más abajo, mis labios están justo aquí". Dijo provocativamente. "¿Fue demasiado bajo para ti? ¿Eh? Realmente sería tan difícil-"

Hao fue interrumpido cuando Hanbin abruptamente se giró y lo empujó contra la pared, chocando sus labios. A pesar de que la acción fue intensa, las manos de Hanbin fueron suaves mientras sostenían el rostro de Hao, su pulgar frotando su mejilla mientras se besaban.

Hao se aferró al dobladillo de la camiseta de Hanbin mientras dejaba que Hanbin profundizara lentamente el beso. No importa cuántas veces hubieran hecho esto, a Hao todavía le daban mariposas. Había estado con muchos hombres antes, pero nunca nadie le había hecho sentir así; como si estuviera verdaderamente enamorado.

Hanbin se separó brevemente, permitiéndoles respirar.

"¿Ahora estás satisfecho?" Dijo, sonriendo.

"Oh, cállate y bésame", dijo Hao, atrayéndolo hacia él de nuevo.

Hao movió sus manos a su cabello mientras Hanbin comenzaba a bajar por la mandíbula y el cuello de Hao.

Este momento es perfecto. Hao pensó para sí mismo.

Pero entonces, oyeron que la puerta se abría.

"Sí, entonces le dije a Taerae-hyung que se podía meter todo el puño en la boca si realmente lo intentaba- QUÉ MIERDA", gritó Gyuvin mientras entraba a la habitación.

Ricky estaba parado en la puerta, ambos boquiabiertos.

Hao y Hanbin se congelaron por un segundo antes de desenredarse rápidamente lo más rápido que pudieron. El rostro de Hao ardía de vergüenza mientras Hanbin luchaba por encontrar una explicación.

"Mira, es-esto no es lo que parece. Nos-nosotros... nosotros sólo estábamos, em, sólo estábamos-"

"¡No quiero saber!" Dijo Ricky, alejándose.

"LO SABÍA", gritó Gunwook, acercándose por detrás. "Kim Gyuvin, me debes 20 dólares!"

"Maldita sea", dijo Gyuvin, ahora volviéndose hacia sus humillados hyungs, quienes ahora estaban parados al menos a 2 pies de distancia entre sí, luciendo como niños de escuela que fueron sorprendidos haciendo algo malo. "Hicimos una apuesta sobre si ustedes estaban realmente en algo o no. Sabía que no debería haberlo tomado. Además, ¿qué pasa con ustedes dos y el cuarto de lavado?

"No puedo creer que esto esté sucediendo", dijo Hanbin, ocultando su rostro detrás de sus manos.

Ricky alcanzó la puerta del lavadero. "Los dejaré continuar. De todos modos, realmente no necesitaba lavar la ropa", dijo, comenzando a cerrar la puerta. Pero antes de que pudiera cerrarla por completo, Gyuvin volvió a asomar la cabeza.

"Oye, Hao-hyung, ¿puedes pasarme el cloro? Creo que lo necesito para mis ojos ahora".

Hao le arrojó su zapatilla justo cuando Ricky cerró la puerta nuevamente y pudieron escucharlos reír mientras Gyuvin gritaba "¡Yujin-ah! ¡Matthew-hyung! ¡Taerae-hyung! ¡¡Nunca van a creer lo que acaba de pasar!!"

"No te equivoques, todo esto es culpa tuya", le dijo Hao a Hanbin después de asegurarse de que todos se habían ido.

"¡¿Mi culpa?! Tú eres quien siguió provocándome".

Se miraron fijamente por un segundo antes de estallar en carcajadas.

"Bueno, al menos ahora lo saben", dijo Hao, secándose una lágrima del ojo. "Nunca olvidaré la expresión del rostro de Ricky".

"Oh, dios, nunca nos dejarán olvidar esto", dijo Hanbin, apoyando su frente en el hombro de Hao. "Me alegro de que Yujin no estuviera con ellos".

Hao se rió.

"¿Ves? ¿No es un alivio ahora que los demás lo saben?

"Siendo honesto, realmente no- Ay!" Dijo Hanbin mientras Hao volvía a golpearle el brazo. "Cielos, ¿soy tu novio o tu saco de boxeo?"

"Ambos", dijo Hao, ahora besando brevemente a Hanbin en los labios. "Sin embargo, aún así deberíamos tener una conversación real con ellos. Y ahora no podemos retrasarlo".

Hanbin suspiró. "Si, tienes razón."

"Siempre tengo razón", resopló Hao, haciendo reír a Hanbin.

"Tienes suerte de ser lindo. Y que te amo". Dijo Hanbin, volviendo a su cesto de ropa sucia. "Ahora, sal de aquí, realmente tengo que terminar de lavar la ropa".