Eres mi juego final

Pequeño error PARTE 2

—Tranquila— tomó aire. —Estoy bien—

—¿Segura?, Dios mío, Taylor, estoy teniendo un deja vu muy raro ahora mismo— dijo recordando el año pasado cuando la vio enferma, tratando de dar lo mejor de sí para acabar los conciertos de esa semana.

—¡Ni pensarlo!, no, yo no estoy esperando otro bebé, no ahora, lo juro, es solo que... A veces pasan pequeños errores, nada grave, lo he solucionado—

—¿Estás segura Tay? — Sabrina entre cerró los ojos.

—Completamente, he tomado todas las precauciones necesarias—

—Sabes que, la única precaución cien por ciento efectiva es la abstinencia, ¿Cierto? —

—¡No me digas eso! — se tapó la cara. —Imposible, yo no estoy embarazada, acabo de ser mamá y nos hemos estado cuidando—

—¿Con qué? — Sabrina parecía una pequeña mamá, cruzando los brazos mientras interrogaba a la rubia.

—¿Realmente estamos hablando de esto?, ¿Le estoy hablando de mi vida sexual a mi amiga de veinticinco años? —

—Qué importa que tenga diez años menos que tú, yo sé muchas cosas también, Taylor—

—Estoy segura de que sí— dijo riendo. —Pero no voy a entrar en detalles, soy un adulto responsable y voy a cuidar de tu inocencia—

—¡Taylor! —

—Ok, ok, con preservativos—

—Bueno, eso no suena mal, es bastante responsable de parte de ambos el utilizarlos, ¿Qué es lo que niegas entonces? —

—Tuvimos un pequeño inconveniente ayer, con eso, pero ya lo arreglé, y con esa pastilla, ya solo estoy advirtiendo que todo va a salir mal, nunca le caen bien a mi cuerpo—

—En el de nadie, Taylor, son un montón de hormonas, deberías tener más cuidado—

—Lo tengo, solamente fue un error, es todo—

—Un error que puede volverse un bebé—

—¡No! — dijo espantada.

—Soy tu amiga y tengo que hacerte ver las cosas—

—Por Dios, parece que estoy hablando con una abuela—

—¡Taylor! — ambas rieron.

—Sabrina, te amo, pero no me hables más de esto, te prometo que no pasa absolutamente nada, que estoy muy bien y lo que futuramente va a pasar es que esta pastilla hará su efecto en un par de días y me voy a sentir terrible por sus efectos, eso será todo—

—Ok, te creo, tendré fe entonces— rio. —Voy a rezar por ti, porque si tuviste dos bebés, podrían ser tres a la siguiente— bromeó.

—Dios mío, ¡No!, no, no, yo no pienso parir de nuevo, fue lo más doloroso de la vida, no— negaba con las manos. —En este año, eso no pasará y ni en los próximos tres, o cuatro, o cinco o nunca— confesó.

—¿Ya no quieres tener más hijos? —

—Hmmm, no sé... no quiero pensar en eso ahora—

—Está bien—

Carpenter comprendió que ese era un tema delicado y no iba a hondar más en ello, no era de su incumbencia de todos modos, era decisión de ella y de Travis, se quedaron charlando un rato y posteriormente se retiró a su cuarto de hotel, dejándola sola con los niños, ya que los padres de Taylor habían ido por la cena, Austin y su novia, se fueron a pasear un rato por el lugar.