Aún te recuerdo

17

EXTRA 1

(historia que sigue el final donde wei wuxian regresa)

la sonrisa de wei ying alegra mis días lluviosos y tristes.

Miro aquel ser que dormía plácidamente en su cama, no quería despertar de este sueño. Aun no creía que fuera real, tan real que hasta tenían un hijo.

La aceptación de Jin Guangyao por parte de Wei Ying, y viceversa, había ayudado a suavizar muchas de las asperezas que antes caracterizaban sus interacciones, creando un ambiente donde incluso los hijos de Lan Zhan podían crecer aprendiendo sobre la importancia de la unidad y la comprensión mutua.

A todos les preocupaba pero lo supieron manejar correctamente.

En un día particularmente claro y soleado, Wei Ying y Jin Guangyao habían planeado una salida al lago cercano, una actividad que prometía diversión y relajación para su familia. Lan Zhan, a pesar de su naturaleza reservada, había aceptado la invitación, viéndola como una oportunidad para que sus hijos disfrutaran y aprendieran de las diversas influencias que Wei Ying y Jin Guangyao podrían ofrecer.

Ambos eran diferente en comportamiento, el wei siempre tan alegre y entusiasta que llegaba a dar enojos a lan qiren quien casi se muere por las bromas del wei.

una sonrisa rodeaba los labios del jin quien de solo pensar en la ultima vez que lan qiren vio al wei cazando peces y casi se desmaya al ver una escena sangrienta ya que el wei tenia antojos de comer pescado fresco.

solo le estaba cortando para la parrilla pero para la qiren eso era una atrocidad a la vida.

"muy divertido" el jin se caracteriza por ser reservado y de buen comportamiento, el regreso del wei fue muy divertido mas ahora que ambos eran esposos de el lan.

Los preparativos para el día en el lago fueron meticulosos, con Wei Ying asegurándose de llevar suficientes bocadillos y juegos para mantener a los niños entretenidos, mientras que Jin Guangyao se ocupaba de los detalles logísticos, como el transporte y la seguridad, asegurando que el área estuviera libre de bestias salvajes o cualquier otro peligro potencial. Lan Zhan, por su parte, preparó una selección de música suave para calmar a los niños durante el viaje y ayudar a crear una atmósfera pacífica.

Al llegar al lago, los niños se dispersaron rápidamente, su risa y gritos de alegría llenando el aire mientras exploraban el entorno. Wei Ying y Jin Guangyao se unieron a ellos, participando en juegos y enseñándoles a pescar.

"papa mira atrape un pececito "

"que hermoso ... quieres comerlo?"

"¿como cuando el tio wei mato al pececito del tio qiren?" 

algo... parecido jejejejje niños 

papi no atrapo nada... wuuwuu - la pequeña miraba con ojitos adorables al jin quien no pudo resistirse y la abrazo suavemente.

papa te ayudara a pescar.

por mientras Lan Zhan observaba desde una distancia cómoda, su habitual serenidad contrastando con la energía vibrante del grupo.

En un momento de pausa, Wei Ying se acercó a Lan Zhan, una sonrisa brillante en su rostro. "Mira lo bien que se llevan todos," comentó, su voz llena de calidez. "Es como si, por un día, pudiéramos dejar de lado todas nuestras diferencias y simplemente disfrutar de ser una familia."

Lan Zhan asintió, su mirada suave y afectuosa. "Mm, es importante para ellos aprender sobre la amistad y la armonía desde una edad temprana. Y no hay mejores maestros que nosotros."

Jin Guangyao se unió a ellos, su expresión una de acuerdo y satisfacción. "Es cierto."

Todos tenían diferencias pero debían saber llevarlas bien.

A medida que el día avanzaba, la atmósfera de camaradería y alegría solo se intensificaba. Los niños, cansados pero felices, finalmente se acurrucaron junto a sus padres, escuchando historias de aventuras pasadas y sueños de un futuro pacífico. Wei Ying, Jin Guangyao y Lan Zhan compartieron miradas de entendimiento y gratitud, conscientes de la belleza del momento que habían creado juntos, un testimonio de que las diferencias podían superarse en nombre de la familia y la amistad.

En un tranquilo atardecer, después de un día lleno de risas y juegos junto al lago, Wei Ying y Jin Guangyao encontraron un momento para ellos, apartados del bullicio de los niños y de Lan Zhan, quien se había tomado un momento para meditar cerca del agua. Se sentaron sobre la suave hierba, mirando cómo el sol comenzaba su descenso, tiñendo el cielo de tonos cálidos.

La conversación fluyó naturalmente hacia temas más serios, un contraste con la ligereza del día. Wei Ying, siempre el más impulsivo de los dos, decidió abordar un tema que le había pesado durante mucho tiempo: la cultivación demoníaca.

"¿Sabes, Jin Guangyao? He estado pensando mucho sobre la cultivación demoníaca últimamente," comenzó Wei Ying, mirando hacia el horizonte. "La gente tiende a verla como algo inherentemente malo, pero creo que, como muchas cosas, depende de cómo se use."

Jin Guangyao, conocido por su capacidad para entender los matices de situaciones complejas, asintió. "Es un punto interesante. La historia está llena de ejemplos donde las herramientas o métodos, en manos correctas, pueden ser usados para bien. Supongo que lo mismo podría aplicarse a la cultivación demoníaca."

Wei Ying se animó con la respuesta. "Exacto. Es como cualquier forma de poder o conocimiento. En las manos equivocadas, puede causar mucho daño. Pero también tiene el potencial de hacer el bien, de proteger a aquellos que no pueden protegerse a sí mismos."

"Hay un dicho en mi familia," compartió Jin Guangyao, "que el poder en sí mismo no es bueno ni malo. Todo depende de las intenciones de quien lo ejerce. Si aplicamos ese mismo razonamiento a la cultivación demoníaca..."

"Entonces no es la práctica en sí lo que debería juzgarse, sino las acciones de la persona que la utiliza," concluyó Wei Ying, terminando la oración de Jin Guangyao.

Hubo un momento de silencio entre ellos, ambos reflexionando sobre la profundidad de su conversación. Era raro encontrar a alguien que entendiera los matices de sus pensamientos y luchas internas, especialmente en un tema tan controvertido como la cultivación demoníaca.

Jin Guangyao miró a Wei Ying, su expresión seria pero comprensiva. "Wei Ying, creo que tu enfoque y tu corazón están en el lugar correcto. La clave será demostrar que tus intenciones son puras y que los resultados de tus acciones pueden ser positivos."

Wei Ying asintió, sintiéndose aliviado y entendido. "Gracias, Jin Guangyao. Eso significa mucho viniendo de ti. Sé que el camino no será fácil, especialmente con tantos prejuicios y malentendidos rodeando la cultivación demoníaca. Pero creo que con tiempo y paciencia, puedo cambiar la perspectiva de la gente."

"Y contarás con mi apoyo," afirmó Jin Guangyao, ofreciendo a Wei Ying una sonrisa tranquilizadora. "Después de todo, cambiar percepciones y abrir mentes es una tarea que requiere aliados."

La conversación entre Wei Ying y Jin Guangyao sobre la cultivación demoníaca y las percepciones de la misma destacó no solo la complejidad del tema sino también la importancia del entendimiento y la empatía en el abordaje de prácticas malentendidas. Mientras el sol se ponía completamente, dejando tras de sí un cielo estrellado, ambos hombres se sintieron agradecidos por la oportunidad de compartir sus pensamientos.

momentos después ~

Todos se prepararon para regresar a casa.