Kim Minji odia las cosas del amor, y sobre todo, las novias. Su madre desea que tenga una pareja para que así sea feliz y deje de ser tan amargada, así que decide "alquilar" a una chica con una preciosa sonrisa, Kang Haerin, para que sea la novia de...
Los labios de Haerin eran suaves, tiernos y al parecer, muy, muy sensibles.
Porque cuando Minji mordió su labio inferior, de la garganta de la muchacha se oyó un gemido agudo y excitado.
Notó entonces que estaba sobre el cuerpo de Haerin, en medio del patio de la universidad, con su rodilla entremedio de los muslos de la menor, y sin saber muy bien el por qué se presionó contra ella.
—¡Basta, que asco, ugh, dejen de besarse!
Haerin rompió el beso, empujándola, con el rostro ruborizado y los ojos nublados por...
¿Placer? ¿Deseo?
¿Disgusto?
La que había hablado fue Hyein, todavía en medio de Danielle y Hanni, que las contemplaban con verdadero interés.
Mimji limpió su boca con su muñeca, confundida consigo misma por haber actuado de esa forma cuando no solía reaccionar así.
No es como si Haerin hubiera sido su primer beso. Pero de todas formas, Minji tampoco besaba a todo el mundo. Los besos eran... eran demasiado íntimos. Reservados sólo para personas que realmente quisiera, no para...
No para una novia falsa, que estaba ahí sólo por dinero y la dejaba quedarse para complacer a su mamá.
Pero Haerin era...
—No seas mala, chick —regañó Hanni cariñosamente—, tú igual me besas como loca.
—¿De verdad? —preguntó Dani, poniendo una expresión de interés—. Me gustaría verla.
Todas miraron hacia Danielle, que observaba de forma grosera a Hanni. La vietnamita puso una expresión de rabia mientras las mejillas de Hyein se ruborizaban.
—¡Eres horrible, tonta robanovias! —protestó Hanni tomando el brazo de Hyein.
—A Hyeinnie le encanta que me ponga así —replicó Danielle sin dejar de sonreír.
Hanni abrió la boca para responder.
—¡Sí! ¡Pelea de gatas! —gritó Haerin cambiando su expresión a la de siempre.
Tanto Hanni como Danielle la miraron de manera incrédula.
Minji ignoraba a Haerin, sintiéndose todavía confundida consigo por haber actuado de esa forma, por no haber pensado en sus acciones, por haber besado tan intensa y desesperadamente a su falsa novia cuando jamás habían hablado de eso.
No es como si Haerin fuera desagradable, todo lo contrario, la chica era dulce, tierna y graciosa la mayor parte del tiempo, y a Minji le gustaba eso. Contra su voluntad, se estaba sintiendo más cómoda de lo que correspondía, pero lo que más le chocaba era que a veces no le importaba para nada.
—¡No soy una gata! —se quejó Hanni poniéndose de pie—. ¡Me voy, chick!
—¿Ah? —Hyein la miró, encogiéndose de hombros—. Está bien.
El rostro de Hanni se puso rojo por la molestia.
—¡Vete al diablo, Lee Hyein, y ándate con esta imbécil! —gritó antes de girarse para irse a pasos enormes.
—Pero qué...
—Eres la peor novia del mundo, Hyeinnie —dijo Haerin riéndose mientras Danielle tomaba a Hyein del hombro para llamar su atención.
A Minji no le importaba seguir besando a Haerin. Es más, ese pequeño tiempo juntas, lo había disfrutado un montón.
Así que cuando se pusieron de pie para irse a clases, tomó a Haerin de la mano para llamar su atención, en tanto Danielle como Hyein se adelantaban.
—Oye, Ha-
—No vuelvas a besarme —le interrumpió de forma seria—. Al menos, no sin mi consentimiento.
Minji sintió su corazón apretarse, pero se limitó a asentir, como si las palabras no le hubieran dolido.
Aunque por dentro estuviera muriéndose de a poco.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
