Capítulo 10

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—Llora de placer y no de tristeza...

Las frías manos de Felix acariciaban mis piernas desnudas mientras yo enterraba mis uñas en su espalda y él se enterraba en mí, la habitación estaba llena  de gemidos, aquí no era necesario controlarnos, no era necesario ahogarlos con la almohada,...

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Las frías manos de Felix acariciaban mis piernas desnudas mientras yo enterraba mis uñas en su espalda y él se enterraba en mí, la habitación estaba llena  de gemidos, aquí no era necesario controlarnos, no era necesario ahogarlos con la almohada, aquí no hay vecinos los cuales se puedan quejar de que no los dejo dormir, joder estoy siendo follado en el infierno y por el mismo diablo y aun así estoy pensando en si mis gemidos dejaran dormir a mis vecinos.

—Mierda Hwang, el calor del orgasmo te está haciendo delirar— Me regañe yo mismo pues al parecer también  estoy al borde de la locura.

Tener al diablo follandome  se siente tan deliciosamente loco, nadie creería que el hijo de un sacerdote se folla y es follado por el diablo, si mi padre se lograra enterar que el diablo me persigue y me convertira en su príncipe es capaz de bañarme en agua bendita y ponerme en ayuno por 40 días para alejar a los dominios de mí, justo como lo hizo cuando me hice mi primer tatuaje.

—Más rápido Lix, por favor— Pedí con demasiada necesitad, tenía al diablo en medio de mis piernas dandome la mejor follada que tendré en toda mi jodida vida, oh mierda jamás olvidaré que he perdido mi virginidad en el maldito infierno y mejor aún...

La he perdido con el rey del infierno, con el que se hace llamar lucero de la mañana, la estrella más brillante y linda del amanecer.

—Aaaahhhmmm, Felix, ahí por favor— Pedí cuando sentí que toco esa parte dulce que me hace sentir que toda la gravedad de la tierra desparece y floto sobre nubes de algodón.

—¿Te gusta?— Me susurro al oído y maldita sea me corrí con solo escuchar esa voz tan profunda y minutos después el se corrió dentro de mí.

—Me encanta— Le respondí con mi respiración agitada, esta era la tercera vez en la noche que lo hacíamos y siento que aún quiero más pero mi cuerpo está agotado y siento que mis párpados están apunto de cerrarse.

—Duerme mi príncipe, mañana te daré un recorrido por el lugar— Beso mis labios una vez más antes de salir de mi interior y caí en los brazos de morfeo.

El cantar y aletear de un cuervo me despertó de mi placentero sueño, la habitación estaba  oscura solo podía observar un poco de claridad en la ventana que estaba frente a mí,  me levante cubriendo mi cuerpo desnudo con la sabana, me acerque a la ...

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El cantar y aletear de un cuervo me despertó de mi placentero sueño, la habitación estaba  oscura solo podía observar un poco de claridad en la ventana que estaba frente a mí,  me levante cubriendo mi cuerpo desnudo con la sabana, me acerque a la ventana y virgen de los infiernos, aquel lugar era tan sombrío y rojizo a la vez, a lo lejos podía observar el río de lava con el cual quedé hipnotizado y asustado al ver personas gritando de dolor metidos en esa lava, no se que cosa hicieron en vida pero definitivamente yo no quiero estar ahí.

"La sangre de cristo tiene poder" comencé a orar y  derrepente el cuervo que me despertó apareció de la nada en la venta aleteando y gritando como loco.

—¡Ah Mierda!, maldito cuervo— Grite asustado cuando caí al piso sobre mi trasero y el cuervo seguía revoloteando como si quisiera entrar a la habitación.

—¿Estás bien?— Felix apareció de la nada en la habitación y entonces volví a gritar.

—¿Que les pasa? ¿Me quieren matar de un infarto?— Me queje y el soltó una carcajada y se acercó a besar mis labios.

—Veo que conociste a Jeongin— Dijo abriendo la ventana como por obra de magia y entonces aquel cuervo entró y se convirtió en un humano o eso parecía.

—¿Jeongin?— Cuestione

—Es el demonio de la lujuria— Me respondió

—Es tan lindo ¿Puedo besarlo?— Preguntó el deminio acercándose demasiado a mí  rostro,  su nariz rozo con la mía, apreté mis labios hacía adentro de mi boca para que no los pudiera tocar.

—Basta Jeongin ¿Quieres morir?— Felix amenazó y el demonio se separo rápidamente de mí.

—Solo era broma, tranquilo mi señor, todos sabemos que nadie toca lo que es suyo y además me acaban de invocar para tener una noche de pasión— Dijo el demonio, se convirtió en cuervo nuevamente y salió por el mismo lugar por donde entró.

—¿Por qué dejaste que se acercara tanto? Mierda casí me besa— Me queje enojado, me levante del piso y me volví a la cama, me cubrí de pies a cabeza y sentí el peso del diablo sobre mí, él empezo a picar mi cuerpo con una de sus dedos hasta que me quité la sabana y entonces sus labios hambrientos  atacaron  los míos.

—Wow eso fue caliente— Hablé cuando sus labios se separaron de mi boca y me permitió respirar.

—El desayuno está listo amor— Me senté en  la cama y Felix extendió su mano para que me levantara por completo, la tomé y luego me llevó a la ducha, abrió el grifo y el agua tibia cayó en nuestros cuerpos, el estaba vestido pero yo estaba en completa desnudez y para ser sincero pensé que en el infierno no había agua y todo era lava ardiente, llamas y demonios que atormentan a las almas.

Jinlix: Cuando El Diablo Se EnamoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora