ENGAÑO ©

10|SOLO ES SEXO

♠️ CAPÍTULO X ♠️

Kylie Leithold

Ha sido una semana larga, los maestros han dejado un montón de asignaciones para este fin de semana en las que tendré que reunirme con Jens.

Los días han pasado volando, he continuando practicando tanto con Jens cómo con Nicholas y el último aún me mira cómo si quisiera estrangularme, no he querido acercarme más de lo necesario y no ha habido roces, bueno lo que sigue después de ellos.

El timbre de mi piso suena y me apresuro en ir a abrir la puerta, ha de ser Sam. El baile de beneficencia de mí madre se ha adelantado de improviso y me ha llamado ayer por la tarde para que asista. Le he comentado la idea a Sam y está emocionada por la invitación. Salgo envuelta en un albornoz y el maquillaje solo de un lado.

Abro la puerta y una radiante Sam entra en el piso.

― Serás zorra, cuando me dijiste que no tenías ropa de gala que irías casual me esperaba de todos menos esto ― le digo en cuanto entra. Modela coqueta para que la vea y mis ojos brillan de la emoción con lo que veo.

Se ha puesto un vestido de tela Patchwork de noche en color negro con dobladillo escalonado. Se ha dejado su pelo con ondas sueltas y pendientes pequeños. Tacones no tan altos y un bolso con brillantinas. Su maquillaje es ligero, pero el negro alrededor de sus ojos le da esa actitud de mujer segura e intimidante.

― He hecho lo mejor que pude.

― No podías haber estado más guapa.

― Gracias, iré a asaltar uno de tus vinos mientras te cambias ― dice acercándose a la cocina.

― Bien, ya regreso no me tardo.

Regreso a mí habitación y luego de ponerme una ropa interior sexi a juego con el vestido. Busco mi vestido. Es un Zara en tela de seda de un hombro con abertura y una igual en el muslo. Peino mi cabello en la parte delantera dejándole totalmente lacio en mi espalda. Termino con mi maquillaje y una vez lista, tomo mi bolso, llaves y teléfono.

Me encuentro a Sam en cuanto salgo y está me eleva el ego con la mirada de gusto que le da a mi vestimenta.

― Estás perrísima ― adula y yo le nalgueo el trasero cuando le paso por su lado.

Sonríe negando divertida con la cabeza.

― Venga tú igual ― me sirvo un poco de vino mientras esperamos a que vengan a recogernos.

Mi madre ha sugerido que no conduzca tantas horas para ir al evento y a mandando a su chofer personal a buscarnos.

Andrés:
Estoy abajo.

Mi teléfono se ilumina con la llegada del mensaje y terminándome la copa le muestro el teléfono a Sam ella asiente termina con su copa y juntas empezamos a bajar las escaleras. Una vez estamos delante del piso de Nicholas las puertas se abren y un Jens relajado y divertido sale de la estancia seguido de Nicholas. El primero se detiene en seco cuando nos vez formando una gran O con sus labios.

― ¿Es que hay una fiesta de gala y no se me ha invitado? ― dice Jens, pero sus ojos se detienen en Sam. Nicholas no me mira y en vez de eso.

― No me hagas perder el tiempo ahora, Jens ― gruñe pasándome por el lado. Su olor emana de él cruzando cada una de mis barreras y relajó la respiración cuando abre la puerta del garaje perdiéndose cuando se sube al coche.

― Me gustaría quedarme un poco más, pero Nicholas tiene pelea y ya va perdiendo dinero, están guapísimas de hecho ― dice apurado perdiéndose por el mismo camino que su amigo.