El dispositivo móvil estaba vibrando de nuevo, Taylor no quería pensar en un montón de tonterías, así que mejor lo colocó nuevamente en donde estaba y se regresó a su lado de la cama, su mente ahora iba a estar hecha un mar de preocupaciones, ¿Qué es lo que estaba pasando?, iban tres llamadas y parece que no se iba a dar por vencida la persona que le marcaba con tanta insistencia, porque la cuarta llamada estaba entrando, ¿Por qué no se despertaba con eso?, ella necesitaba saber con urgencia que es lo que pasa, <<Tranquila, Taylor>> se dijo a sí misma para calmarse, si algo grave estaba pasando, lo que sea, estaba segura de que su esposo se lo iba a contar, ¿No?, le ha demostrado ser plenamente sincero, la situación no se podía poner tensa ahora que estaban casados, ella debía pensar con la cabeza fría, así que dio unos respiros profundos y se puso la sábana en la cara, odiaba tener ese tipo de pensamientos intrusivos, ya eran parte de ella, al parecer, necesitaba trabajar en eso.
Los minutos para ella estaban siendo los más largos de la vida, ¿Cómo es que Travis podía dormir como si nada? <<Taylor, ya, por el amor de Dios, deja de pensar locuras todo está bien>>
El celular dejó de sonar, por lo que Kelce, no se percató para nada, Taylor cerró los ojos tratando de volver a dormir, aunque sea un rato, de todos modos, en lo que despertaba su esposo, pasarían algunas horas, los bebés ya se estaban moviendo, habían despertado, por lo que su plan de volver a dormir se cancelaba.
—Hola bebés— les dio un beso. —Papi está en un gran trance de sueño, al parecer— frunció el ceño.
Charles se empezó a mover más, volteándose, quedando de lado de su papá, así que, al sentir su brazo, empezó a chuparle el codo.
Taylor estaba riendo. —Charlie—
—¿Qué pasa? — Travis despertó al sentir mojado el brazo.
—Parece que se ha equivocado de lugar— rio.
Kelce rio. —Mi codo no es lo que buscas— lo tomó en brazos.
—Probablemente ya tenga hambre— ella ya se estaba acomodando a Evie y posteriormente, Travis le ayudó colocándole a Charles.
Mientras los estaba amamantando, Travis decidió que se levantaría para darse un baño, Taylor no podía con la intriga, ¿En que maldito momento iba a ver su celular?, <<Eso te pasa por curiosa>> se peleaba consigo misma, observando como su enorme hombre tomaba algunas cosas para poder entrar a ducharse, Kelce, al parecer, se dio cuenta de que ella estaba con esa cara que siempre ponía cada que pensaba algo, la conocía bien, y seguramente estaba teniendo un debate mental ahora mismo.
—Tay— se le quedó mirando.
—¿Sí? — ella trató de no verlo, porque sabía que en cuanto lo mirara a los ojos ella se iba a delatar sola.
—Tay— dejó las cosas que iba a llevar al baño en la cama y se acercó a ella. —¿Qué sucede? —
La rubia no sabía que decir, la atrapó, era una excelente cantante, pero pésima actriz, se iba a ver obligada a soltar la sopa, no tenía de otra, preparándose para quedar como una chismosa, por andar viendo cosas que no tendría, aunque, técnicamente, solo vio las llamadas, no husmeó su celular, ella no sería capaz de eso.
—Taylor— volvió a llamarla, sin duda, estaba perdida dentro de sus pensamientos y le costaba salir de ese sitio tan oscuro a veces.
—Trav, lo siento— por fin pudo decir.
—¿Qué sucede? — estaba confundido.
—Ay, mierda, me vas a odiar, pero me lo merezco...— acariciaba la cabeza de sus bebés mientras estaban comiendo. —Me levanté, tu celular estaba vibrando mucho y lo tomé para ver quien era...—
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Eres mi juego final
FanfictionTaylor y Travis, después de un año de relación, se han convertido en padres de sus mellizos Evie y Charles, encontrándose con nuevos retos ante una paternidad bastante sorpresiva pero muy deseada, ¿Qué es lo que le depara a la famosa cantante y el j...