*one shots(zosan y más)*

En el centro

By:Enziroth

"Sin persecución. Nada. Durante un mes ", prometió Zoro. Joder, estaba tan cerca que Sanji parecía estar considerándolo.

Sanji cerró los ojos, respiró hondo unas cuantas veces y luego los abrió de nuevo. La sombría determinación en la dureza de su rostro le dijo a Zoro todo lo que necesitaba saber incluso antes de que el hombre hablara. "Bien. Pero yo-"

Zoro lo levantó antes de que pudiera terminar la frase y lo llevó al centro de la habitación. Tiró su abrigo al suelo y dejó caer a Sanji encima de él, luego se arrodilló y se puso a trabajar.

"Al menos dame un minuto, maldito bruto", le espetó Sanji, pero se recostó, dejando que Zoro lo inmovilizara bajo su peso. "Como estaba diciendo , lo haré, joder, pero no quiero ver a ninguno de ustedes, bastardos, persiguiéndome. Nada de seguirme, nada de perseguirme, diablos, ni siquiera mires mi cartel de buscado, ¿entiendes?

"Mhm", ofreció Zoro, metiendo sus manos debajo de la camisa de vestir de Sanji y deslizándola hacia arriba. La carne de debajo estaba pálida, lo cual era jodidamente perfecto, porque eso significaba que luciría mucho mejor cuando la dejara marcada y enrojecida.

Primero fue por el cuello, trabajando la piel de Sanji entre sus labios y succionando con fuerza. Escuchó al hombre silbarle, pero no le importó. Mordió sólo para oírlo silbar más fuerte mientras separaba los muslos de Sanji y se frotaba contra el espacio entre ellos.

Joder , Sanji también estaba duro, el calor se filtraba a través de esos pantalones negros. Podía llamar a Zoro todos los nombres del mundo, podía decirle que era un imbécil, un bruto tonto y un estúpido musculoso todo lo que quisiera, pero su cuerpo lo delataba cada vez.

Zoro dejó algunas marcas más contra el cuello del hombre antes de que la presión en su pene se volviera demasiado y se viera obligado a alejarse. Sanji tenía que ser la cosa más sexy que alguna vez había tenido en sus manos, así que ir despacio simplemente no era una opción cuando se moría por entrar en él.

Se sentó, arrastrando a Sanji por los hombros y guiándolo para que se sentara a horcajadas sobre sus muslos. Deslizó sus manos por la espalda de Sanji, apreciando el músculo allí, antes de decidirse a tocar su trasero. La carne se sentía bien contra sus palmas, incluso a través de la fina tela de sus pantalones; Zoro se estaba acercando sólo por sentirlo despierto. Apretó, escuchó la brusca inhalación de Sanji y sonrió.

Zoro podía sentir a los demás apiñándose a su alrededor, Sanji giraba la cabeza para vigilarlos pero sin ofrecer ninguna queja. Alguien se agachó y pasó la camiseta de Sanji por sus brazos y cabeza, y cuando eso no encontró resistencia, todos se acercaron. Los dedos se deslizaron por su cabello y las manos se dirigieron a sus brazos y pecho, todos aprovechando lo que quisieran. podría alcanzar.

Entre todos ellos, no pasó mucho tiempo antes de que una polla llegara a la boca de Sanji. Al principio cerró los labios y se inclinó hacia atrás, pero unas manos desde atrás lo empujaron hacia adelante nuevamente. Zoro reconoció vagamente a Law a su lado, sus dedos tatuados se extendieron para agarrar bien el cabello de Sanji para que el hombre pudiera ser instado a tomar su polla. La cabeza presionó contra la mejilla de Sanji, dejando una mancha húmeda, y de mala gana la abrió para permitirle entrar.

Zoro se tomó un momento para apreciar la vista, disfrutando la forma en que el grueso eje obligó a la mandíbula de Sanji a estirarse alrededor de él. Su propia polla palpitó en respuesta, y tiró del borde de los pantalones de Sanji hacia abajo para poder tocar la piel real.

Al bajarle los pantalones, liberó la polla del hombre, que se levantó con un sonrojado alivio contra su estómago. Zoro le dio unos cuantos golpes, hundiendo su pulgar en la punta para ver qué tan sensible estaba allí. Sanji se sacudió en su regazo y se atragantó, Law se echó hacia atrás para darle espacio para respirar, y por la mirada entrecerrada que se dirigió hacia él, Zoro pensó que había encontrado un punto débil.