I need you, asshole [Mona x Scaramouche] | Val

24 | Dos caras

     • Mona pov's •

VI. Sentimientos compartidos.

     — Amy, ¿Puedes salir de-

     — No, no quiero. Me voy a quedar aquí para siempre — respondió la rubia, todavía con la cabeza escondida dentro de su ropa —. Soy una tonta.

     — Vamos, tampoco es que Kazuha se haya molestado — atinó a decir Scaramouche—. Él mismo te dijo que tenía que irse porque le habían llamado de la editorial para una entrevista rápida.

     — ... Aún así...

     Ante la negativa de mi amiga no me quedó más opción que soltar un profundo suspiro, extender la mano hacia la bandeja de mi novio y robarle unas cuantas papas fritas; por algún motivo, cuando Amy se pone en modo "emo" la ansiedad invade mi cuerpo y necesito comer para lidiar con la psique de mi inestable compañera.
    
     — Oye, te dije que pidieras tus propias papas fritas-

     — Ay, no es momento para que te quejes por eso, llorón — le saqué la lengua, y luego le dí un sorbo a su bebida.

     — ¡Hey! ¡Basta! — me arrebató el vaso de las manos, y después de devolverme el gesto, se cambió de lado de la mesa y se sentó al lado de la rubia, alejando su comida todo lo posible de mí —. De verdad Mona. No hay ni un mísero ápice de respeto en ese cuerpo.

     — De cualquier forma, sal de ahí — dije, ignorando al chico y centrándome en Amy —. Tarde o temprano vas a tener que afrontar el hecho de que besaste a Kazuha, y entre más pronto lo hagas, más rápido podrás entender el porqué lo hiciste.

     Ella asintió y tras un momento de expectación, sacó tímidamente su cabeza de su fortaleza de ropa y luego se sentó correctamente la silla, ordenando sin ánimos el desastre que se había hecho en el pelo.

     — Bien, empecemos por lo básico. ¿Por qué lo besaste?

     — No tengo razones ni explicaciones para ello... — habló, con la mirada baja —. Se supone que estábamos hablando de las novelas y de la nada empezamos a actuar una escena de uno de los libros, y... No sé, sentí que estaba bien hacerlo.

     — ¿Nada más? ¿No sentiste nada mientras bailaban?

     — Solo estaba pensando en la novela... — sus mejillas ardieron —. Y en que Kazuha me dijo que si hacía cosplay de Fischl sería como si una princesa estuviera imitando a otra...

     — Hmmm... Bueno, es entendible. En apariencia eres prácticamente idéntica a Fischl — habló el pelinegro; bastó con una mirada de mi parte para que él se apresurara a explicar su comentario —. Digo, sin contar la forma y el color del pelo, el collar y los aretes de cruz son dos de las cosas que más destacan de Fischl. Varias veces me lo han comentado en los dibujos que subo a redes sociales.

     — Sea como sea, eso no es lo importante — me crucé de brazos —. Centremos nuestra atención en las palabras de Kazuha. Literalmente le dijo princesa a Amy.

     — ¿Tanto importa? Quiero decir, Kazuha no es el tipo de persona que se contenga a la hora de endulzar sus palabras.

     — Hombre tenías que ser.

     — ¿Ah?

     — ¿Nunca te has dado cuenta de que a ella la trata distinto? Cada vez que le veo cerca de Amy, tiene una mirada perdida en la cara y no deja de sonreírle — expliqué, mirando a mi novio —. El tono de su voz, las palabras que usa al hablar, sus gestos, todo en él se vuelve más dócil cuando está con Amy, y creo que hasta tú te diste cuenta de la sonrisa que puso después de ese beso.