One Confession (KaiSoo)

1. La Confesión

Bueno, bueno !!!

Espero que les guste este Fluff !!

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No tengo nada más que decir a si que lean !!

"Vamos Do KyungSoo"

"Tú puedes hacerlo"

"Solo te pararas en frente de él y le dirás lo que sientes, justo como LuHan te dijo"

"Estoy jodido"

Eran lo todo lo que pensaba -y se repetía- Do KyungSoo, chico de instituto con 17 años, piel blanca y ojos demasiado grandes para la población coreana promedio con unas altas calificaciones envidiables y justamente la causa de muchas burlas, entre otras cosas mas.

El cual se encuentra parado en una esquina de la gran escuela, casi desmayándose por lo nervios de declararse a su primer amor: Kim JongIn.

Alto, de piel bronceada, con sonrisa de comercial de pasta de dientes, amable y carismático son algunas de las muchas palabras que según KyungSoo quedaban cortas por el gran hombre que era JongIn.

"No es bueno para ti, bebe es un patán total con chicas y chicos" Le repetía LuHan por enésima vez en el día

"Entonces, ¿Por qué me estas ayudando a conquistarlo? Si dices que no es bueno para mi" Refutaba KyungSoo mientras se dirigía a sus clases de Química con una gran pila de papeles en sus brazos, lo que según el es su "Tarea" de todo el día

"Cada vez que pasa o con solo su mención tus ojos brillan como cualquier chica quinceañera enamorada y no estas lejos de ser eso, es por eso que te ayudo, me gusta que sonrías así" Dijo LuHan a la vez que le quitaba la mitad de los papeles, dándole una de las sonrisas más brillantes que pueda existir en el mundo

"Pero te advertiré, si te daño un solo cabello de tu cabecita o una pequeña parte de tu cuerpo, ten por asegurado que no tendrá a su mini JongIn" La cara seria del chino hizo que pasara una corriente eléctrica por todo el cuerpo de Do, era como la mirada de tu madre al no contestar sus llamadas, aterradora

" Y-y ¿Por qué estás tan seguro que me dirá que sí?, quizás solo se burle, se vaya y mi corazón quedara destrozado en mil pedazos y me dirás tu típico *Te lo dije*, mientras me consuelas, a la vez que comemos helado de chocolate "Murmuraba KyungSoo en un tono triste

"No será tan estúpido como para rechazarte, eres una persona maravillosa y no digas que no, Mi bebe Soo" El timbre no dejo que KyungSoo contradijera lo que había dicho el chino así que solo paso junto con él al aula, a sus respectivos asientos

El toque de la campana para la hora de receso, el corazón de Do latía a mil por minuto, a dos metros se encontraba el laboratorio justamente donde estaba saliendo Kim JongIn y su grupo de amigos