Hyunlix | One Shots (Lixjin)

Hello stalker

Autora: Sandra M.P.
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"Me gustas."

Todavía recordaba la primera nota que llegó, tuvo que leerla un par de veces y mirar a su alrededor esperando encontrar la cámara oculta, o lo que era más probable, a su grupo de amigos escondidos en algún lugar para saltarle encima y reírse de él.

Pero no.

Y las notas no dejaban de llegar, todos los días había una en su taquilla, sin excepción.

Mentiría si dijera que no buscó a la persona responsable de éstas, pero fue completamente en vano. Un día, incluso, se pasó todo el tiempo de recreo vigilando su taquilla desde lejos, para ver quién se acercaba a dejar aquellas notas. Nadie se acercó, nadie dejó nada, y aun así, más tarde, cuando abrió la taquilla, ahí estaba: otra nota.

"Llevo un tiempo dándole vueltas a esto, y puede que pienses que te estoy tomando el pelo, pero realmente me gustas mucho. Igual estás intentando descubrir quién soy, pero prefiero que no lo sepas... No por el momento. Soy una persona tímida, y puede que no te guste quién soy, así que por el momento me mantendré en el anonimato.
HH."

Suspiró cuando lo único que hizo fue perder todo el tiempo del recreo en vano para no conseguir absolutamente nada. Podía dejar la nota en cualquier momento, bastaba con que pidiera permiso para ir un momento al baño, y entonces ya tendría vía libre para dejarla. Se maldecía por no haberlo pensado en aquel momento, pero supongo que no perdía nada por intentarlo. Bueno, solo la merienda.

Intentó buscar a gente con el nombre y apellido que empezara por "H", puestos a que firmaba con "HH", pero había un par en su clase, había hablado con ellas y ninguna parecía ser la autora de dichas notas. Bien pensado, tampoco creía que aunque encontrara a la responsable fuera a decírselo, así que sí, se rendía.

"Me gusta mucho el jersey que llevas hoy, es mi favorito. Me dan ganas de abrazarte cuando lo llevas, espero poder hacerlo algún día.
HH."

—¿Qué dice hoy tu enamorada? —una fuerte palmada en el hombro le hizo gruñir, quejándose por el golpe.

—Que le gusta mi jersey. —dijo, omitiendo lo demás y arrugando la nota para luego guardarla en su bolsillo y tirarla más tarde. El chico de pelo morado rió.

—A mí también me gusta tu jersey, Bokkie. —le guiñó un ojo, haciendo que el rubio rodara los ojos.

—¿Y tu novio, no viene hoy? —preguntó mientras cerraba la taquilla.

—Han no es mi novio.

Lo mismo de cada día. Y Felix no sabía realmente por qué aquellos dos no empezaban una relación cuando se notaba a la legua que se gustaban. Muchas veces intentó hacerles la encerrona, pero fue en vano. Le sacó la lengua y apoyó la espalda en la taquilla, cansado.

Llevaba recibiendo aquellas notas hará aproximadamente un mes, y algunas de ellas le resultaban demasiado intensas y personales. La de hoy había sido algo un poco más normal, pero aun así el hecho de recibirlas hacía que le costara conciliar el sueño últimamente. Cree recordar que la nota más extraña y alarmante que recibió fue la semana pasada, cuando empezaron sus pesadillas.

"No podía dejar de mirarte en gimnasia hoy, esos pantalones te quedaban demasiado bien, y las gotas de sudor resbalando por tu frente... Las lamería si pudiera.
HH."

Cuando leyó aquella nota se puso rojo escarlata, y justo lo hizo junto a su amigo Jisung que estaba intentando mirar por encima de su hombro para leer el contenido del boletín del día, afortunadamente, el rubio fue más rápido y la rompió en mil pedazos y la arrugó con rabia antes de que su amigo pudiera siquiera omitir palabra, atónito. Normalmente leían las notas juntos y Han lo codeaba diciéndole que su admiradora secreta era una romántica. Esa nota fue de todo menos romántica.