Taxi » 𝘁𝗮𝗲𝗸𝗼𝗼𝗸

4

El lobo de Taehyung nunca espero nada de la vida, sin embargo, esta vez tenía la mera esperanza de volver a verse con Jungkook. Aunque la posibilidad era realmente baja.

Sus ganas de volver a verlo eran realmente palpables. Bueno, eran más las ganas por parte de su lobo, él personalmente no. La arrimada fue buena, pero hasta ahí. No más.

Y ese dilema le estaba jodiendo toda la mañana, su lobo se empezaba a comportar berrinchudo. Era insoportable. Creanle.

—¿Qué te costaba poner algo bonito en la nota?

—Claro, debía haber escrito "oh, fue realmente gratificante y divertido el haber cojido contigo, tienes un culo espectacular".

—Grosero.

—Es qué tú también no ayudas, te enamoras de un culo.

—No es de cualquiera, es más, fue el mejor.

—Ya Cállate. Si tienes suerte, nos llamara.

—Por supuesto que nos va a llamar con una nota diciendo: "Fue genial, lamento no despertar contigo. Te invito un café cuando puedas. Llámame" Hay que recalcar que no escribiste el número.

—Bueno, el lado positivo es que no hay nada que pueda hacer. Ni modo, aparte, entiéndeme un poco, era mi bully...

Su lobo bufa ofendido.

—Ya lobito, cálmate, tú eres yo, y yo soy tú, ¿Comemos helado hasta tarde esta noche?

—Lo tomo, pero me ofende muchísimo. Que sepas que aún ando resentido.

No era de extrañar la buena relación que llevaban él y su lobo. Siempre y en todo lugar ambos se tomaban en cuenta. Y aunque su lobo estaba molesto, era su humano y no le iba a dar la espalda.

Era de mañana por lo que no iba a trabajar de taxista sino, en el Café un trabajo bastante bueno que le dejaba dinero extra para cualquier 'lujo'

...

—Ay no puede ser. Se te cumplió amigo mío, sino nos odia gracias a mí, tienes una gran oportunidad con él.

—Ay no sé, me puse super shy.

Taehyung pasó su mano por todo su rostro y entró sin responder a su lobo, era un poco cómica la situación de su lobo.

—Yo te quería ayudar pero ni modo amigo, ya no se pudo.

...

Y así es como terminamos acá.

—Carajo, eres tú.

—Esto es bueno, ¿cómo estás?

—De maravilla.

—¿Podrías ser un poco más amable?

—Me pides ser más amable cuando tú, literalmente hablando me dejaste tirado en un hotel.

—Yo... lo siento por eso, realmente estaba muy nervioso, sé que eso no justifica mis actos y que fui bastante desconsiderado. Me disculpo por eso, quizás, cuando tengas tiempo... yo podría, quizás invitarte un café.

—¿Y así solucionas todo, invitando a las personas con las que te acuestas a tomar un café?

—Sí —Y así, podemos ver como un Jungkook realmente ofendido da un golpe no tan suave al pecho del alfa— o sea, quiero decir no. No. Es decir, que gran golpe. Guau.

—Tengo más por si gustas.

—A ver, vamos a relajarnos.

No tenía nada que hacer Jungkook ahí. Entonces, sino fuera porque el alfa le había tomado de la mano antes de salir y lo acorralo contra una de las paredes del baño el hubiera salido del lugar.

—Eschame. Eras mi bully de adolescente, ¿qué querías que haga? Me sentí mal después, y estaba realmente nervioso, el fin no justifica los medios, pero tampoco me juzgues solo porque sí. Perdona si te ofendí, ¿bien? Pero tú pediste sexo, y eso es lo que te di. —La distancia que los rodeaba se iba a cortando más y más cada vez— además, ¿qué hubiera pasado si habrá sido solo un desconocido? Gracias al cielo somos desconocidos, no tan desconocidos. Deberías ser agradecido, porque si hubiera sido alguien más, te habrías quedado por ahí tirado.

Sin nada que decir, y desde el punto de vista de Taehyung, tenía razón. Es decir, no tenía nada con qué defender. Y eso había dañado su orgullo. Realmente se sentía mal.

—Solo cállate ¿quieres? —le respondió con los ojos llorosos.

—Así me dice mi mami cuando se queda sin argumentos, nada más que ella no llora, me tira unas pantuflas.

Aquella confesión hizo reír un poco al omega. Quien terminó por agachar la cabeza.

—Lo siento —murmuró bastante bajo.

—¿Qué dijiste? No logré escuchar —mintió.

—Dije que lo siento, ¿Ok? Nunca me había disculpado y menos con un alfa. Me disculpo por hoy y por lo de la secundaria. Realmente lo siento, sé que el daño está hecho, pero me arrepiento. En verdad, en ese tiempo era bastante inmaduro y tenía los mis aires hasta las nubes. No es justificable el daño que te hice y todos los insultos que te dije solo porque sí, pero estoy arrepentido.

—Te había escuchado a la primera. Pero quera saber si había escuchado lo correcto.

—Tú... —lo iba insultar, realmente lo iba hacer pero alguien entró demasiado rápido al baño que antes de poder hacer algo en defesa propia, sus labios se habían unido.

Sus labios encajaban tan bien, que el beso se había vuelto tan sutil y bochornoso. El ambiente estaba cambiando y eso no era del todo correcto.

—Bien. Tú y yo, nos detenemos aquí, porque no quiero crearle problemas a mi jefe. Aún quiere este empleo.

—Sí, yo... lo siento. Me dejé llevar. —responde nervioso.

—Nos dejamos llevar un poco —contradice, riendo, haciendo bastante obvio su timidez.

—Tú... es decir, ¿nos podemos volver a encontrar? —duda, sin embargo, aún cuando el miedo al rechazo estaba presente, Jungkook no es capaz de apartar la mirada de Taehyung— Está bien sino quieres, yo entiend-

—No, si quiero. —busca en su delantal una servilleta de papel y con el esfero negro que llevaba en la oreja, anota rápido su número— esta vez si puedes llamarme cuando desees, estoy a tu disposición.

Con eso, el primero en salir es Jungkook, no sin antes darle un pequeño beso en la mejilla al alfa, acción que lo dejo en las nubes, y como se dice vulgarmente: "Saltando en una pata".

...

—Waos, amigo, calma tus hormonas, hasta acá el olor a sexo.

—Guarda silencio por favor, estoy bastante nervioso y ansioso. Llévame a casa, por favor.

—Bueno, en camino a casa de tu papi es bastante largo y llene el tanque esta mañana. Así que, podemos hablar libremente.

—Ah, esta bien.