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Semanas después

—Bueno, ya basta de estupideces. Ahora si, ¿lo vas a llamar o no?

—No, yo creo que esta muy ocupado como para responder.

—No seas estúpido Jungkook, hace rato estabas que me jodias con que querías escuchar su voz y no sé que cosas más. Solo invitalo a salir, ni que vaya a hacer tan malo.

Todo bien, pero ¿y si lo rechazaba?
No, a Jungkook nunca lo rechazarían y menos un alfa.

Tomó todo el su valor, y marcó. El celular sonó tres veces, y si sonaba una vez más el omega mismo cortaría la llamada.

Sin embargo, antes de darse cuenta, Taehyung, a quien se había atrevido a llamar ya había contestado la llamada.

—Buenas tardes.

Que voz. No sonaba tosco sino, más bien tranquila con un leve toque de seducción. Moría.

—¿Así le respondes a todos?

—¿Jungkook? Wow, que agradable llamada, pensé que iría a morir sino recibía una llamada o uno de tus mensajes. Dime, ¿qué es lo que necesitas?

—Nada, yo quería invitarte a salir... si puedes.

—Claro que puedo. ¿Qué día?

—Este viernes en la noche... ¿estas libre?

—Aparentemente, tengo mi agenda desocupada.

—¿Dónde nos vemos?

—No lo sé, tú me estás invitando a salir.

Que oso. Ni más. Hasta ahí.

—VIERNES EN LA NOCHE EN EL CINE, BYE-

Y corto. Bien, todo había salido según lo planeado. Pero había olvidado un pequeñito, detalle. Era mínimo el marco de error.

—¿Qué tan difícil fue mi buen amigon?

—Cállate, por el amor a Dios, solo cállate.

Termino por restregar la cara y undiendose en la almohada. Realmente había pasado pena con lo último.

...

—¡Ya! ¡Gobiernate imbécil!

—¿Cómo quieres que me calme? ¡Me salía una voz toda rara! ¿Lo peor de todo? ¡Me atragante con mi saliva al escucharlo!

—Ay, ni se dio cuenta.

—Cállate, Nam.

—¿Y sabes que es lo peor?

—Ya basta.

—Y dices ser mi mejor amigo.

Si, tanto Taehyung como Jungkook eran buenos haciendo drama.

Pero, ¿como no hacer drama? Si hace tres días atrás que estos dos se habían encontrado por mera casualidad y como era de esperar terminaron en un baño teniendo una sesión de besos excesivamente calientes, raro. Porque para empezar, desde que Taehyung le había dado su número al rubio, este nisiquiera se había disgnado en llamar o enviar algún mensaje.

Lo bueno de todo esto, es que la atracción entre estos dos era notable, ¿no es cierto?

Por algo podían empezar.

Taxi » 𝘁𝗮𝗲𝗸𝗼𝗼𝗸 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora