Ella me pertenece (Luke Hemmings fanfic) [Detenida temporalmente]

Capítulo 25 -Pequeño Luke-

Luke me mira durante unos segundos sin dejar de morderse el labio.

-Me pone nerviosa- digo inconscientemente notando como me ruborizo cada vez más.

Él frunce el ceño y antes de que pueda decir nada agarro su muñeca y salgo de la casa a toda prisa.-Vámonos antes de que sea la hora de cenar.

Ambos corremos sin ninguna razón por la calle y únicamente nos paramos al llegar a un cruce donde no dejan de circular los coches.

-¿Has pensado ya donde quieres comer?- pregunta Luke como si estuviera cansado de correr respirando rápidamente.

-En realidad, ni siquiera sé a dónde se supone que nos dirigimos- digo y tras unos segundos de silencio soltamos una leve carcajada.

-Sé de un buen sitio pero está algo lejos- sentencia ya con su respiración habitual.

-¿Tú no habías traído el coche?- pregunto y al instante me mira como si hubiera dicho alguna locura.

-Pero está en tu casa.

-Pero podemos correr hasta allí, tampoco nos hemos alejado tanto.

-¿Vamos a volver allí sólo por...- empieza a quejarse pero antes de que acabe agarro de nuevo su muñeca y corro arrastrándolo en dirección contraria.

A los pocos minutos estamos otra vez delante de mi casa y puedo oír como Luke jadea frenándose en seco delante del coche.

-Oh por Dios no ha sido para tanto.

-Si me vuelves a hacer algo así tendrás que quedarte sin comer porque yo no pienso repetirlo.- se queja y yo bufo aunque en el fondo me hace gracia todo esto. -Y ahora sube al coche antes de que me arrepienta.- ordena mientras recupera la respiración y yo no puedo evitar reírme una vez dentro.

Luke enciende la radio incluso antes de encender el motor del coche y en escasos segundos ya nos situamos en la carretera mientras Luke conduce y yo mantengo mi mirada fija en la ventana.

Eso hasta que de repente escucho como canta en tono bajo la canción que está sonando y giro mi cabeza hacia él disimuladamente.

Canta en casi un susurro pero el simple sonido de su voz hace que mantenga toda mi atención en lo que hace. Es increíble.

-¿Qué?- pregunta en una risa y se ruboriza al darse cuenta de que lo estaba mirando.

-Sigue cantando- sonrío.

-Ni siquiera lo estaba haciendo bien- dice con una tímida sonrisa en la cara que le hace parecer un niño pequeño adorable.

-Lo hacías bien.

-Mentira.

-Verdad.

-No empecemos- ríe levemente y deja de mirarme para fijarse en la carretera.

-Como quieras- digo, aunque en realidad pienso volver a sacar el tema en otro momento.

Tras varios minutos llegamos al supuesto lugar y nos bajamos del coche.

Levanto mi mirada hacia el cielo y diviso a lo lejos unas nubes demasiado negras que me preocupan.

-¿Vamos o no?- Luke me observa casi riendo y yo asiento sacándole importancia al tema.

Entramos en el recinto y voy examinando todo lo que veo a mi alrededor. Es un restaurante muy bien decorado y no hay demasiada gente por lo que todo está muy tranquilo. No es demasiado moderno y tampoco es muy antiguo, es un espacio realmente acogedor.

Camino tras Luke el cual elige una mesa apartada. Se sienta en la silla del lado derecho y yo lo imito sentándome en el lado izquierdo.

-¿Te gusta?- pregunta mirándome y yo asiento mientras continúo mirando todo.

Una camarera de unos sesenta o cincuenta años se acerca a nosotros y instantáneamente sonríe a Luke.

-¡Cuanto tiempo pequeño Luke!- dice la señora y él le sonríe aunque sé perfectamente que ese "pequeño" no le ha agradado del todo porque se ruboriza.

-¿Qué tal ha estado señora Montgomery?- pregunta Luke amablemente y yo me dedico a mirar a ambos.

-Muy bien, el restaurante ha ido creciendo mucho pero te echamos mucho de menos por aquí- dice ella y yo sonrío al oír eso sin razón alguna aunque estoy completamente excluida de esta conversación. -Ya veo que a ti te ha ido muy bien- dice ella y al momento me mira.

Retiro lo de estar excluida.

-Ella no...- empieza a decir Luke tímidamente pero la camarera le interrumpe.

-¿Cuál es tu nombre?- me pregunta cual abuelita de cuento y yo sonrío ampliamente antes de contestar.

-Soy Nicky, encantada- digo y ella sonríe volviendo la vista a Luke.

-Que novia tan encantadora tienes pequeño Luke- suelta y es ahí cuando entiendo su actitud y me llevo una mano a la frente notando como mis mejillas empiezan a arder.

-No es mi...- reitera él nuevamente y una vez más, se ve interrumpido por la misma persona.

-¿Qué os pongo?- pregunta agarrando su pequeña libreta y su lápiz.

Después de que Luke le pida para los dos algo que suena como "dajnlrte" con la mano aún en la frente y sus mejillas muy colaradas, ella nos sonríe por última vez y se marcha.

Me hace gracia ver la cara que tiene él en este momento, la manera en la que sonríe a la vez que se muerde la lengua y sus ojos están achinados.

-¿La conoces?- río intentando apartar un poco lo que acaba de ocurrir.

-Es como mi abuela. Yo venía aquí de pequeño todos los días y ella siempre me invitaba a todo.- dice volviendo su mirada hacia mi.

-Parece simpática- suelto una pequeña carcajada y él se une enseguida. -¿Por qué siempre pasa lo mismo?- me cuestiono recordando lo de mi madre.

-Será que estamos haciendo bien nuestro trabajo- responde aún riendo pero yo frunzo el ceño sin entender a lo que se refiere hasta que me acuerdo de nuestro "plan". Casi olvidaba eso.

-Supongo- sonrío aunque en mi interior no lo hago.

La camarera de antes, la señora Montgomery si mal no recuerdo, vuelve a nuestra mesa con dos platos enormes de lo que parece ser pollo y un montón de guarnición que huele bastante bien.

-Muchas gracias- decimos Luke y yo al unisono y ella nos sonríe y se va no sin antes guiñarnos un ojo.

-Ignora eso último- ríe él y yo asiento uniéndome a su risa.

***

Poso el tenedor sobre la mesa dando por finalizada mi comida y observo como Luke continúa con la suya.

Sonrío al verlo y él me mira unos segundos para después negar con la cabeza y seguir con lo que hacía.

El silencio que invade el local se ve interrumpido de repente por una cascada de agua que empieza a caer sobre el tejado. Frunzo el ceño y me levanto para caminar hasta la ventana que hay no muy lejos de nosotros.

Como me lo esperaba, está lloviendo.