Emociones en Baño María [Fanfiction EXO- ChanSoo/KaiSoo]

13. Sándwich de ensalada de atún y huevo

Sándwich de ensalada de atún y huevo

Ingredientes:

1 lata de 170 g (6 oz) de atún

3 huevos duros picados y pelados

1 taza de apio picado

1 cucharada de mayonesa regular o light

sal y pimienta al gusto

4 rebanadas de pan de molde

Preparación:

     Escúchame bien, si necesitas que te explique a detalle cómo armar un sándwich, espero que te largues ahora mismo de mi cocina. ¡Solo pon todo en medio del pan, santo cielo! Me estoy divorciando, no tengo tiempo para esto. Incluso pospuse la escritura de mi libro de cocina esos meses.

     Hablé con Jongin la semana en la que estuve en casa de mis padres, fue a través mensajes de texto. Le pedí que no me hiciera bromas sobre cualquier tipo de propuesta personal, subrayé que no me dijera ese tipo de cosas incluso si no eran bromas. Mi sous chef era, ciertamente un hombre maravilloso, pero no estaba en un momento adecuado para involucrarme con nadie. Pensé que, si se tratara de un hombre fácil, alguien que solo buscara divertirse, me hubiera deslizado hacia él sin contemplaciones, pero Jongin no era alguien que pudiera tomarse a la ligera. Sabía que pasó por mucho los últimos años y yo no estaba dispuesto a convertirme a mí mismo en otro de los hombres que se aprovecharon de él. Si me involucraba con Jongin teniendo tanta pena por Chanyeol, ¿no estaría usándolo para apaciguar mi dolor? A partir de la conversación que tuvimos cesaron las visitas al bar irlandés y las bromas de gimnasio. Todavía nos tratábamos con respeto en nuestros espacios en común, pero nada demasiado cercano. Noté que algunos musculosos empezaron a vernos con curiosidad, pensando que de seguro nos habíamos separado. Sintiendo pena por mí y a la vez comentándose a sí mismos «era obvio que esto iba a pasar, más bien habían durado mucho».

     Llamé a Minseok la noche en que decidí salir de casa de mis padres y le pedí que me dejara dormir ahí, para mi sorpresa, él me recibió hecho un mar de llanto. Después del préstamo bancario y de comprar y amueblar la casa de sus sueños, su novia lo había abandonado. Así que nos alcanzó la madrugada bebiendo licor y quejándonos de nuestra suerte.

     —Al menos tú tienes a Jongin, chef —arrastró las palabras a casusa de la borrachera—, he visto cómo te mira.

     —Y tú tienes a Wendy, Minseok. También he visto cómo te mira.

     Ambos nos observamos en silencio y luego bebimos más nuestro despecho.

     Él me propuso que viviéramos juntos. Cobrarme un pequeño alquiler por la habitación le ayudaría a pagar los préstamos bancarios y también nuestras soledades se llevarían bien. A mí me sonó como un plan excelente. Después de las primeras semanas aprendí que Minseok era un poco desordenado en todos los espacios de casa a excepción de la cocina, lo cual me iba muy bien porque yo no estaba precisamente en plan de irme estricto a las labores hogareñas. Ambos estábamos atravesando nuestra depresión viendo películas tristes, bebiendo licor después del trabajo y encerrándonos a llorar a oscuras en nuestras habitaciones la mayor parte del tiempo mientras la sala acumulaba mugre. Éramos dos hombres de cocina viviendo en esa casa y la refrigeradora estaba siempre vacía.