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emma gonzález — 23 años, españa.
juan caruso — 24 años, argentina.
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"no me ha llamado", pensé antes de ver el celular por ultima vez antes de empezar a desayunar, al tener una relación a distancia, yo y juani frecuentamos a llamarnos de mañana para desearnos los buenos días y contarnos todo, pero ya eran las 9:45 am y no habia rastro de él siempre suele llamarme antes de las diez porque a esa hora yo suelo tener varias sesiones de fotos. no me aguanté y lo llamé, no iba a esperar todo el día a que el me llamara, iba a iniciar la conversación con él una vez en mi vida.
- ¡hola cariño, ¿todo en orden? - hablé animada, ignorando el hecho de que hace unos segundos estaba frustrada de que no me hubiera llamado. - ¿cariño? - volvi a repetir al no obtener respuesta de su parte.
- hola nena, ¿cómo estás? - contestó con voz débil. ya algo andaba mal y lo sabía.
- no, eso debería preguntartelo yo a tí, ¿cómo estás? - corregí.
- bien, bien, no te preocupes. - habló. aunque se notaba que estaba mintiendo, su voz estaba tan débil y baja que se notaba a kilómetros.
- no estás bien, juan. - dije seria y firme. - ¿qué te sucede? primero no me llamas y ahora me mientes. - solté abrumada, lo unico que recibí por respuesta de él fue un sollozo. - vamos cariño, dime que te sucede. no lo entiendo siempre me cuentas todo, ¿y ahora? - pregunté tratando de sacarle respuestas. - solo, no nada. no vale la pena, es algo tan tonto que me da verguenza decírtelo. - confesó y soltó una pequeña risita que me hizo sonreir levemente. - vamos dime, puedes confiar en mí. - le dije transmitiéndole confianza con mis palabras. - en madrid te digo. - dijo y cortó.
habían pasado horas desde que hable con juani, a esta hora él debería estar aterrizando en madrid, no fuí a recibirlo porque sabía que iban a estar esperándolo millones de fans, simplemente me quedé en mi apartamento esperándolo.
- hola amore, how are you? - me preguntó divertido entrando al apartamento que compartíamos juntos en españa.
- bien, ¿tú? - pregunté acordándome del tema que no habíamos terminado de hablar hoy de mañana.
- hoy de mañana mal, ahora bien. - respondió sentándose a mi lado en el sillon, dejando las maletas en la entrada.
- cuentame, ¿que te pasaba hoy de mañana? - cuestione mirándolo. él solo me dedico una sonrisa fingida.
- me sentia re mal, te juro, corte re inseguro. los comentarios de la gente en twitter me los estaba tomando re enserio, aparte habían un par que me hicieron cuestionarme nuestra relación. - confesó mirándome, yo lo mire sorprendida, pero no dije nada, deje que el continuara. - o sea, no vamos a terminar, pero los comentarios me hicieron preguntarme si posta te merezco o no, ¿que pensás? - finalizó mirándome, atento a las palabras que salieran de mi boca, que para su mala o buena suerte no salieron, lo unico que mi mente hizo fue abrazarlo con todas mis fuerzas, fue lo unico que me salio hacer. - amor, ay no no sé que decirte. - confesé separándome de él, mientras que mis palabras nos hacían reir un poco a los dos, y yo a la vez estaba llorando por lo que había dicho mi novio. - tú eres mas que suficiente para mí, tu eres mi world. no sé que decirte, pero nunca mas digas o pienses eso. - dije abrazándolo mas fuerte que la vez anterior. — igual amor ya no es "twitter". — dije separándome. — es "x". — terminé. — alta paja decirle "x" emma, no compliques please, arruinaste el momento romántico y triste. — confesó haciéndonos reír.