Una bala

Capítulo 1: Desconcierto

Allí estaba, en la sala del hospital, intento recordar en que momento las cosas se torcieron tanto, pensando cual fue el punto de no retorno, recordando y dándome cuenta de que era obvio que acabaría así sin embargo nunca quise ver... Las paredes blancas del hospital las cuales cuando trabajaban eran agradables para mí, se ha convertido en razón de desesperación para mí, el silencio que siempre amaba ahora se convertía en una tortura,  un constante sobre pensar ¿Y si me hubiera dado cuenta antes? ¿Y si no llegaba a tiempo? ¿Si hubiera hecho ese turno extra podrí a verle frenado?

Suspire cansado de dar vueltas sin sentido para mí y fui a los primero de mis recuerdos, o más bien en el primero que me empecé a ser consciente de que algo no iba bien.

Era una mañana como otra cualquiera, estaba con mi novio en la cama, el tan lindo como siempre, su cabello azabache, su pequeña cicatriz debajo de su ojo y su piel tan blanca como la niebe. Todo iba bien, lo mimaba mientras el descansaba apaciblemente entre mis brazos. Tenía tanto miedo de despertarlo, se veía tan en paz...

Al poco rato se despertó me sonrió y me beso como de costumbre

-Buenos días Torao -Me sonrió como de costumbre y luego río al ver mi cara de bobo

-Buenos días Luffy, ¿Que hablamos de los besos mañaneros?

-Que después de lavarme los dientes, pero no me puedo resistir ¿Has visto tu carita? -Luffy me lleno la cara de besitos y solo reí tiernamente, lo amaba y lo amo demasiado, su sonrisa, su forma de despertar, sus ojos, todo de él me parece perfecto- Law, te amo

-Yo te amo más -Sonreí de felicidad, llevamos dos años así, teníamos nuestras discusiones pero nada fuera de lo normal

Le di un beso en la frente y nos fuimos a duchar juntos, nos vestimos y desayunamos juntos, me lave los dientes y fui a trabajar, no sin antes darle y abrazo y desearle un buen día. Aunque justo cuando lo abracé me comentó por primera vez algo que no me esperaba.

-¿Vendrás al stand Up de hoy?

-Claro cielo -le di un pico y acaricie su linda mejilla la cual hacia contraste con mi piel morena- si hoy no pasa nada iré, intentaré no perderme a mi comediante favorito en nuestro bar con temática de piratas favorito.

Bese su frente, el río con ternura y lego de soltarme un "eso espero", me dirigí ya si que si al trabajo.

Llegué al hospital tranquilamente y allí vi al joven chico en prácticas, erar raro, nos dijo que lo llamáramos Chopper, no tendrá más de 18 años pero ya tiene más conocimiento médico que yo a su edad. Normalmente está muy centrado y despierto, pero ese día lo notaba errante, más bien distraído

-Buenos días doctor Trafalgar

-Buenos días Chopper ¿Porque no me llamás por mi nombre?

-No lo se se, simplemente me salió así

Río nervioso y empezó a contarme los pacientes que tendría que tratar ese día y poco más.

Atendí algunos pacientes y en la hora del descanso me fui con Kid a comprar un ramo de flores, nos sentamos tambien en un bar y le deje las llaves a un chaval que aparcaba los coches

Kid es un tío majo, algo molesto aveces pero buena gente, tiene el pelo rojo y mide dos metros pero bueno, me agrada mucho, es un buen amigo

-Entonces como llevas lo de la propuesta de matrimonio

Suspire eb respuesta y le di un sorbo al café que me pedí mientras le miraba

-No se cómo hacerlo, ¿Y si me rechaza?

-Tio, lleváis como tres años en pareja, el enano comediante te ama

-¿Pero tanto para aceptar ser mi esposo?

-Si

-P-pero -me corto dando un golpe en la mesa

-Law no, que nos conocemos, no sobre pienses más, solo cuando termine el Show se lo propones

-Eso suena tan soso y no es nada currado, creo que sea memorable y bonito aunque también íntimo

-¿Porque no le preparas una cena romántica? Se lo pides después del postre

-no suena mal -le sonreí me acabe el café y le invite a este

Cuando salimos empezamos a buscar al muchacho y bueno , vimos como mi coche se iba sin nosotros*

- ¿Ese no es tu coche?

- Si

-Pues ya no

-Que va seguro que volverá

Efectivamente me robaron las llaves del coche. Lo denuncie a la policía y le avisé a Luffy que puede que no llegará, pero que moverían cielo y tierra para llegar.

Ciertamente ese día seme hizo eterno pensaba que por lo menos volvería a casa pronto, pero una cirugía de urgencia se interpuso en mi camino, no pude avisar a Luffy, tambien me perdí su show en la noche. Termine la operación y llegue a casa a las 2 de la mañana.

Cuando llegue a casa todo se escuchaba en silencio, noté que la cena estaba en lo alto de la mesa ya fría, mire con ternura ya que, apesar de que seguramente esté malo ya que no sabe cocinar, se acordó de mí y se preocupo. Me lo comí sin rechistar y dejé las cosas en la cocina, me entró ganas de mis tortitas de arroz de postres y cuando fui a cogerlas me di cuenta que el paquete estaba vacío, no eso, más cosas como cajas de galletas, mini sándwichs y cosas de despensa estaban acabadas, cosa que me extrañó ya que hacia menos de dos semanas que las había comprado, me encogí de hombros y no le di importancia, me arrepiento de eso.

Luego fui al baño y vi que la báscula estaba fuera de su caja, cosa que tambiéne extraño y volví a guardarla. Realmente me siento tan invencible ahora mismo.

Cuando llegue Luffy estaba durmiendo le di un beso en la frente, me puse el pijama y simplemente me fui a dormir a su lado.

Volví en mi, salí de ese recuerdo y sentí como alguien se hacercaba, una muchacha pelo naranja junto a una pelinegra, las mejores amigas de él, Nami y Robin. Cuando las me puse de pie las abracé empezando a llorar como un niño chico.