12 O'clock: A través del tiempo

14. Al carajo

Cristal

Lo miro diciendo con la mirada que mejor me tome tome mis medidas y asi evitar líos

-Sabes que eso no es lo que en realidad quieres - insinúa mi subconciente - callate - digo para mi misma.

Mis pensamientos son interrumpidos por unas manos que me toman y me cargan que fascinación por cargarme - te encanta - otra vez mi consciencia hace acto de presencia.

-Pero que haces - le digo al rubio, no responde se limita a llevarme hasta el escritorio, me sienta en el, se posiciona delante de mi

-Ya te lo dije sólo tomaré tus medidas - dice con una sonrisa en sus labios y me empieza a tomar las medidas el muy maldito no desaprovecha nada para manosear mi cuerpo

-Idiota - lo insulto en mi mente

Cuando termina de tomar las medidas me baja del escritorio.

-Si ya terminaste me puedo ir - digo un poco nerviosa pero trato de ocultarlo, es estúpido que me sienta así

-No, aún no quiero que te vayas

Lo miro directamente a los ojos ya que estaba evitando su mirada se le habían oscurecido sus ojos.

Axel va acortando la distancia que nos separa, va acercandose peligrosamente a mi boca en un rápido movimiento toma mis labios pero no con rudeza o intensidad sino con delicadeza es un beso lento lleno de pasión, le correspondo el beso, posiciono mis manos en su cabello rubio jalandolo un poco, el pone sus manos en mi nuca jalandome mas hacia el, nuestras lenguas se juntan.

Nos separamos para poder buscar oxígeno

Lleva una de sus manos hasta mi rostro y con su dedo acaricia mis labios hinchados.

El de ojos azules me toma por la cintura con su mano pegándome aún más a su cuerpo contuve la respiración al sentir como escondia rostro en mi cuello.

Me abraza más fuerte rodeandome con sus dos fuertes brazos.

Estaba inmóvil ante su repentina acción.

Al carajo

Lo rodeó con mi brazos aunque su gran cuerpo no me permite cerrar el abrazo

Pasamos algunos segundos así

-Que mierda estas haciendo conmigo Cristal - dice aún con su rostro descansando en mi cuello.

Me mantengo en silencio no sabía que decir sólo lo sigo abrazando con fuerza

Queriendo que este momento fuera para siempre no se como, ni en que momento pero me eh enamorado de ellos no se porque demonios los quiero a los dos y ellos a mi, una simple desconocida en este mundo y para ellos pero si se que no quiero que esto acabe por más loco que suene

Separa su rostro de mi cuello y no me atrevo a dirigirle la mirada

-Mirame - demandó

Como si no tuviera conciencia de mi mis actos, mis ojos buscaron rápidamente los del

Sonríe, sabe el poder que tiene en mi

Cuando tenía intenciones de besarme de nuevo alguien nos interrumpió

-Majestad - llaman al otro lado de la puerta

Cuando volví a buscar su mirada, se podía notar que estaba cabreandose

-Que quieres - dijo en un tono amenazante lleno de autoridad

-Hay pr-problemas Majestad - dijo con palabras entrecortadas

Vuelve su atención hacia mi claramente enojado por la interrupción me besa con un poco de rudeza, me muerde el labio inferior y separa nuestras bocas.

-Tengo que irme - dice en un susurro sobre mis labios

-No quiero que te vayas - mi boca hablo por si sola, dios que me está pasando

Sonríe ante esas palabras

-Pequeña sabes que me quiero quedar para darte como nunca encima de este escritorio - dice aún con su sonrisa en los labios

-Pero, Majestad es urgente

Ahora soy yo la que toma la iniciativa y toma sus labios en un corto beso se sorprendió un poco pero lo oculto cuando me separó del se marcha de la oficina

Me quedo completamente sola en aquella habitación.

Volvi a mi habitación después de aquella escena me fui de allí tiempo después de Axel, no paraba de pensar en todo aquello, su abrazo, su cara en mi cuello, su aliento, sacudi mi cabeza para librarme de esos pensamientos me levanté de la cama y busque un libro nuevo, después de todo se lo único que podía hacer en aquella situación, me metí bajo las sábanas y con la luz de la luna que se colaba por la ventana me puse a leer, - de verdad que no me entiendo un dia los quiero, sus miradas, sus caricias, sus besos y al otro intento alejarme de eso, dios puede ser que si me mantenga así me ignoren o no, puede que me maten por estupida, pero que idioteces pienso, ya quede atrapada en esto y no podre librarme - no se que tiempo pasó desde que comenze el libro pero salí de la cama estirandome en el proceso, llegue hasta el balcón, mirando hacia el cielo deduje que eran las 1 o 2 de la madrugada no tenia que mirar el reloj para saberlo, observando el oscuro paisaje del jardín algo llamo mi atención, desde la sombras, una silueta, su silueta, no lo había visto en algunas horas, y no sabía que necesitaba tanto su presencia hasta que vi su silueta en el oscuro jardín mirándome fijamente, antes de poder pensar ya mis piernas se movían hasta el lugar donde estaba el, mi pelinegro, no sabía lo que me ocurría con aquellos dos reyes, al llegar hasta el jardín busque con la mirada su figura en el lugar donde anteriormente lo había visto pero al llegar no se encontraba, miro hacia mi alrededor en busca de aquel hombre de distinta mirada pero no lo veía, me adentros al pequeño bosque donde había visto su gran silueta, de repente siento unas manos en mi cintura, voy a gritar cuando siento otra en mi boca, cubriendola, me pega hasta un árbol que había cerca de allí, me encontraba asustada cuando la luz de la luna iluminó su rostro me relaje, era él, Belial, lo miro señalando que quiete su mano de mi boca, el lo hace, tomo una gran bocanda de aire.

-Pero que demonios haces Belial, casi me matas del susto - dije en un susurro un poco mas calmada.

-No eh echo nada, tu eres la que me vio y vino hasta aquí recuerdas - dijo cruzando sus manos sobre su fornido pecho, dios, concéntrate Cristal

Miro hacia otro lado

-Bueno quería tomar un poco de aire y salir de mi habitación así que vine para caminar un rato - me escuse

-Si castaña, lo que tu digas - dijo con una pequeña risa para pegarce un poco más a mi cuerpo

Ruedo los ojos por lo que acaba de decir

-Bueno ya caminé lo suficiente creo que es hora volver a mi habitación - dije tratando de escapar de su cuerpo

-No creas que te irás Cristal, no sabes cuanto te deseo ahora mismo, los celos de que Axel te puede tener cuando quiera y, yo no pueda - dice en un susurro ronco

Posiciona su mano en mi cintura y me pega a el, sus labios impactando contra los míos.