CAPITULO 7

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CAPITULO 7
EL TRATO
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SERENITY
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—No, no, no. Esto no está bien…

De un solo golpe borré más de mil palabras para el nuevo capítulo de mi historia. Aún me seguía costando demasiado escribir escenas sexuales, las pocas veces que lo he escrito es gracias a que llega la inspiración o que los videos pornos sirven de algo para detallar todo.

—Tengo que iniciar de nuevo —murmuré—. O simplemente saltar esas escenas y meter más relleno al capítulo

Aquello último no me estaba gustando.
Resulta que encontré una página web que permite a que subas tus historias, muchos lectores juveniles se encuentran ahí. Vi la oportunidad hace unos días y decidí publicar mi historia, gracias al cielo que mi historia se convirtió en algo popular, al menos con estos días la historia cuenta con 5mil lecturas. Es un pequeño avance pero a mis pequeños lectores les está gustando la química de mis protagonistas.
Muy bien, sabia que me había equivocado de carrera. Debí estudiar literatura.

—¿Y si dejo el sexo y coloco algo de drama? —Bebí de mi café—. A veces el drama puede funcionar, enloquece a los lectores y eso me gusta.

Malos entendidos.
Eso siempre es fundamental para empezar el drama en una novela.
Falta de comunicación, celos, posesión y secretos. Es algo que nunca falta para sembrar el caos en una historia, así al final todo se logra superar con la magia del amor y del libreto, aunque a veces es mucho mejor jugar con la mente de los lectores y dejar que el caos sea permanente.

Y es así que mi mente empieza a moverse con rapidez ideando los escenarios perfectos para los acontecimientos. Bueno fuera que mi mente sea más activa cuando de las escenas del sexo se trata.
Si tan solo tuviera la experiencia en el sexo, o al menos tener un novio, me haría las cosas más sencillas.

—Salir con alguien… —me detuve pensando.

Realmente no suelo tener muchos amigos, ni tampoco suelo convivir con personas.
Salir con un hombre suele ser a veces complicado, añadir que tengo que hacer contacto con ese hombre, tener citas, conocernos, saber si hay química o atracción. Salir con un hombre es tener requisitos exigentes y cansados.
Mi mala perspectiva me deja en claro el porque sigo soltera y sola.
Sólo tengo experiencia sexual al masturbarme con vibradores.

—¿Y si tengo una cita con Fiore? Es un buen amigo, y al parecer está interesado en mi.

No era mala idea.
Fiore es mi vecino, se mudó hace dos años y es atractivo. Se con perfección que su interés se volvió más intenso cuando terminó su última relación. Podría experimentar con él pero, no lo sabía con certeza.
No logro conectar con él.
Es lindo, sexy, apuesto pero solo le gusta hablar de su trabajo y su gran esfuerzo que ha hecho. A veces es cansado escuchar a los hombres solo hablar de si mismos y escuchar que menosprecian a las mujeres solo por ser consideradas personas débiles.
No sería la primera vez que Fiore me echa en cara que ser psicóloga no era lo mío porque no me ve como alguien que puede afrontar los problemas.
Así que con eso descarto por completo el querer salir con Fiore.

Pero si lo pienso… Solo hay una persona que ha despertado esos deseos sexuales. Alguien que con solo tener su más mínimo contacto me hace sentir cosquillas en mi entrepierna.
Sé lo que ese cretino hace cada vez que me ve. Su intento de provocarme con palabras en doble sentido, o su acercamiento intencional, o su ridículo apodo. ¿Quién le dijo que puede ponerme un apodo?

Diamante Black.
El Idiota albino que siempre tengo que ver en la cafetería. No importa si llego en la mañana o en la tarde, ese hombre siempre está ahí.
A veces durante las tardes se queda sentado en mi rincón observándome. No dice nada, solo observa, molesta y se va. Eso interrumpe por completo mi concentración en escribir. Al menos hoy por fortuna no ha hecho acto de aparición.
Son cerca de las ocho de la noche, la cafetería está a nada de cerrar, he estado aquí desde las seis de la tarde pero Black no llegó.

Imperfecto Amor	[PAUSADA TEMPORALMENTE] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora