Escritos de un diario olvidado

Página 1

 ¡Bienvenido a la Academia Seton!

—...—

Aun no logro entender cómo pueden decir aquella frase tan alegremente cuando un nuevo profesor se suma a este lugar tan horrible. Me tiene de los nervios esa frase de mierda. Parecen rejuvenecer de un momento a otro para dar su mejor sonrisa cuando la dicen, para luego regresar a un estado de putrefacción tan desagradable que se tiene que ver dos veces para no pensar que es una pesadilla.

Siento una completa impotencia cuando un profesor decide marcharse solo un mes después de entrar, y la mayoría solo acepta el sueldo del primer mes. Lo último no puedo negarlo, la paga dentro de aquí es excesivamente alta, aunque se puede decir lo mismo con la ganancia de estrés a diario.

Las voces de mis padres me atormentan cada noche de sueño, recorren cada centímetro de mi mente y a veces sufro de un insomnio severo. Sus últimas palabras se quedaron grabadas en mi mente incluso después de largarme de Tokio junto a mi certificado de estudios.

«¿En serio has elegido ese trabajo de profesor?, me sorprende que eso venga de alguien que odie a los animales, si hubieses elegido ser contador como yo, te habrías ahorrado problemas.»

Aunque aborrezco esto, acepto que estuve equivocado, trabajar como profesor en un sitio como este fue un comienzo totalmente desastroso. Había escuchado hace un tiempo que se abrió una academia para humanos, investigué ese mismo día sobre aquello, pero no encontré muchos datos más que el sueldo, este último era sumamente bajo.

¿Qué más puedo hacer? La sociedad en la que vivo está llena de animales por todos lados, ya me hubiese gustado vivir en un mundo de ficción donde todos sean humanos sin un simple animal a la vista, ¿dónde debería firmar? ¿acaso debo de renacer otra vez?

Las estúpidas bestias no dejan mucho trabajo para nosotros los humanos más que en labores que sí necesiten inteligencia y enseñanza. ¿Será algún tipo de lección de vida? ¿karma?, No siento que llegue a descubrirlo en un tiempo cercano.

Este sería mi tercer año consecutivo dentro, solo me faltan dos para terminar con este contrato y poder irme de este lugar para cursar un nuevo oficio, aunque antes debería de disculparme con mi padre. Supongo que es mucho esperar que este infierno acabe pronto.

Mañana empieza la ceremonia de ingreso, son las once de la noche y estoy escribiendo esto en vez de estar preparándome, «Es un método para desestresarse», eso dijo mi estúpido psicólogo.

Yo soy Jin Mazama, si estás leyendo esto es porque no leíste las advertencias del principio, prepárate para sufrir, animal de mierda.

12/03/2006 - 11:36 p.m.