Presente y Futuro (Wenclair)

Capítulo 14

Enid

Me siento ansiosa, mentiría si dijera que no tengo miedo o no siento temor por lo que pueda pasar hoy, no es gratificante saber que hoy verás a la persona que está dispuesta a lastimar a tu mujer con tal de conseguir sus objetivos.

- Deberías vestirte - dijo Merlina detrás mío, ahí fue cuando me dí cuenta que aún estaba con la toalla amarrada en mi cintura sin algo que me tapara el abdomen.

- Lo haré, pero cuidado con la baba - digo mientras me giro dejándola con un rostro de confusión, avanzo hasta mi lado de la habitación y sin más dejo caer la toalla en el piso, obviamente ya tenía puesto el boxer así que Merlina no vería de más.

Al terminar de vestirme me giro y veo como ella gira su mirada así otra parte.

- ¿Qué pasó, Addams? ¿Te gustó lo que viste? - digo con una sonrisa pícara mientras veo como su rostro se vuelve totalmente rojo.

- Nuestros padres ya están llegando - dijo mientras caminaba hacia la puerta - puedes quedarte con mi familia, así no tendrás que soportar a tu madre.

- No voy a arruinar tu reunión familiar, Mer, pero ¿Te puedo pedir un favor? - digo mientras me acerco a ella.

- ¿Cuál? - dice ella

- ¿Me podrías dejar que te presente ante mi familia?

- Tu familia ya me conoce, Sinclair.

- Como mi omega - veo como su expresión cambia ligeramente a una de sorpresa.

- ¿Por qué?

- Mi familia busca casarme con una horrible omega, necesito que mis hijos salgan bonitos e inteligentes y estén en un hogar lleno de amor, eso es algo que sólo tú podrás darme - digo mientras me acerco a besarla.

- ¡¿Tú qué?! - grita mi madre furiosa parándose de la mesa, siento la mirada de todos a mi alrededor, ella está armando un escándalo.

- Mi Omega, madre - repito nuevamente - Merlina Addams es mi omega, te guste o no.

- Eso no lo decides tú - dice furiosa - ¿No fue suficiente lo que le hice cómo para demostrarte lo que puedo hacerle si es que seguía con esa estúpida idea? - sus ojos se empiezan a volver amarillos lo que es una alerta de que su alfa interior está apunto de explotar y controlar su cuerpo.

- Es mi vida y yo decido con quién voy a pasar el resto de ella, madre - digo mientras siento como la adrenalina y la ira empieza a recorrer todo mi cuerpo, está vez no dejaré que suceda lo mismo de hace dos años, si me toca realizar mi rebelión ahora mismo lo haré, por mi familia: Merlina y mi hijo el cual aún está en el cielo espero a volver a ser engendro por nosotros.

- No creas que por ser alfa puedes desobedecerme.

- Aún no se ha hecho de ritual de sumisión, madre, así que no tengo por qué obedecerte - al ser alfa tengo el poder de destronar a la matriarca de mi manada, en mi caso, es mi madre.

- ¡Eso lo veremos! - dice mientras se transforma, escucho los gritos de los demás alumnos y de sus padres, miro a mi alrededor y veo como algunos de ellos les tapan los oídos a sus hijos más pequeños y como mi compañeros nos miran expectantes a lo que sucederá después.

- Esto es una rebelión, madre. Si yo gano, automáticamente seré la matriarca de la manada.

- Hija... - escucho decir a mi padre, sin embargo no lo dejo hablar. La decisión está tomada.

- Te amo - le digo a mi omega para después darle un beso, me importa una mierda lo que pueda pensar el resto, Merlina es mía y estoy dispuesta a luchar contra mi propia madre por ella.

Aparto a Merlina de mí y empiezo a dejar a mi lobo salir, para lo que no saben, yo soy una licántropa que logró su transformación en una luna llena, así que eso me da la ventaja de poder tener un mayor control de mi lobo interior y poderlo sacar cuando me plazca, lamentablemente mi madre también lo es, pero si pude pelear contra un hype en mi primera transformación puedo con todo y contra todos.

- Grññ - gruñe antes de tirarme contra el suelo en un abrir y cerrar de ojos, pero no me dejo y con algo de fuerza logro cambiar de posiciones.

Ella me agarra el cuello para intercambiar posiciones y estamparme contra un árbol donde mi cabeza golpea fuertemente y hace que pierda la conciencia por un rato.

La abrir los ojos y no sentir ningún golpee, pensé que había perdido, pero ví como estaba en una habitación muy familiar para mí.

- Cara mía ¿Ya despertaste? - veo como Merlina entra en la habitación, se ve más grande, espera... Recuperé mi cuerpo.

- ¡Si! ¡Si! - digo mientras me paro de la cama y empiezo a soltar lágrimas - pensé que eso iba a ser eterno - digo son felicidad sin embargo veo como estoy desnuda. Vaya creó que Enid no pierde el tiempo.

Espera ¡Enid!...

Veo mi muñeca y como la marca de corazón roto ya no estaba en ella, hemos vuelto, hemos perdido la conexión que teníamos y yo estaba en medio de una pelea con mi madre, pero como soy genial, obviamente sé que le voy a ganar.

- ¿Te pasa algo? - dice mi esposa acercándose a mí.

- No, sólo tuve un sueño algo... extraño - digo mientras la cojo entre mis brazos y la alzo haciéndole dar vueltas por el aire.

- Amore mío - dice mientras me besa.

- Quiero hijos - digo mientras la recuesto sobre la cama - Tres como mínimo.

- E-Enid - dije que apenas regresará iba a llenar su coño de tanto semen que dejaría tres hijos dentro de ella y yo siempre cumplo lo que digo.

La otra Enid ha de estar bien, a mí déjenme ser feliz, soporté 2 semanas sin tener sexo, eso es mucho para mí.