—Muy bien alumnos, pasen sus exámenes al frente.
Pase mi examen al chico de enfrente y así con los que llegaban, mi primera mala nota en la vida. El profesor recogió los exámenes y se sorprendió.
—¿saben? Voy a calificarlos en voz alta y diré su dueño, ¡sean responsables! ¡No pertenecen a la clase F! ¿O si pertenecen? —nos regañó, pero eso no lo entiende nadie por dios—. ¡Kurumada! En blanco, ¡cero! ¡Tobillama! Lo mismo ¡cero!
Y así fue diciendo con todo el mundo hasta que era mi turno.
—¡Irie! En blanco ¿no te da vergüenza? ¡Has manchado el apellido de tu hermano! ¡Cero!
Todos los de la clase estaban pasando y ninguno se ha salvado. Ahora sólo queda escuchar la calificación de la última, Ana Rivers.
—señorita Rivers, bien hecho, se sacó un diez.
Sonó el timbre y todos nos levantamos para ir a la siguiente clase. Esta es mi oportunidad para pedirle que me explique. La alcance y le toque el hombro, ella volteo y se sacó el palillo.
—es tu problema si no viniste Irie, pero como me cae mal el profesor te ayudaré.
—¿como supiste? —le pregunte atónito.
—te vi buscándome en el descanso.
—¿y no avisaste donde estabas?
—no me hubieras oído.
—¿pero tu si me viste?
—estaba en la azotea.
—¿en la azotea? ¿Porque allí?
—porque es el único lugar en el que puedo pensar sin el ruido de la gente —dijo empezando a caminar hacia su casillero.
—pero ¿como sabias que te buscaba a ti?
Se paro en un casillero que queda al lado del mío. Lo abrió y sacó un cuaderno.
—porque te escuche hablar con shun.
—¿y no me dijiste nada?
—quería ver que tan bien observas a tu alrededor, como dicen, pero por lo visto no lo haces.
—bien, ¿ya terminaste de jugar conmigo?
—si, después de español cuadramos a que hora te explico lo de matemáticas —dijo y entró al salón de español.
—vale, gracias —le dije y luego me fui a sentar en el puesto de siempre.
La clase de lengua se paso normal y fácil con un examen sorpresa al final como todas las clases. El timbre sonó avisando que que tocaba ir a almorzar.
Ana se para al lado mío y me mira expectante.
—si quieres lo hacemos hoy después de clases —le dije.
—vale, te esperaré en a la salida y vamos a tu casa —me dijo.
—pero yo no te he invitado a mi casa —le dije.
—eso lo se, pero no nos podemos quedar aquí y afuera no te podrás concentrar.
—¿porque asumes todo? Pudo ser en tu casa.
Vi como se tensó repentinamente y me miró fulminante.
—yo soy la maestra y se hará lo que yo diga, no vamos a ir a mi casa ¿te quedó claro? —dijo sería y un poco molesta. Yo asentí en respuesta, la chica daba miedo así.
El almuerzo se paso un poco extraño, no paraba de mirar a su mesa, esto es extraño. La veía riendo con los gemelos de la clase C. Su almuerzo era un burrito y de vez en cuando se rotaban el almuerzo. Me gustaría que mi mesa fuera esa, se ve que se divierten no como en esta. Aquí no se habla, sólo se come para no quedar como un nerd solitario. Como el almuerzo de mi mamá y me paro para ir al patio a descansar. Me pregunto ¿porque estaría mirando a su mesa tan atentamente? Supongo que me gusta ver como se divierten, pero es como otra cosa. Hoy cuando Ana se valla de mi casa después de enseñarme el tema le voy a preguntar a mi hermano para saber la respuesta a la pregunta anterior.
Al final del día estaba poniendo los cuadernos y libros de las tareas en mi maleta. Cerré la puerta del casillero y me di cuenta de que ella me estaba esperando.
—perdona la tardanza.
—no hay problema.
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you're awesome! (Yuuki fanfic)
FanfictionAna y Yuuki son compañeros de clase. El es el primer estudiante de la clase A. Ella es la última estudiante de la clase A. Los dos se conocen y de vez en cuando hablan, pero todo tomara un rumbo diferente Cuando Yuuki se pierde una clase de matemáti...