Eros -Borrador

- Capitulo 28 -

Martes, 5:00 AM

 Ray

—Firma.—

Acaba de despertarse y necesito que firme mientras sus neuronas no han reaccionado del todo, extiendo el contrato y el boligrafo hasta ella y los recibe con los ojos medio cerrados, es el desastre mas hermoso que he visto en la vida, el pelo hecho una maraña cubriendole la cara, los ojos rojos y la pijama apretada, si existe un Dios debe estar premiandome por algo o preparandome para un castigo terrible. 

—Love, firma.— repito y coloco su mano en la linea de firma una vez, dos veces, tres veces y dibuja su firma con los ojos cerrados. 

Ni siquiera sabe lo que esta firmando, cae nuevamente en la almohada y me maldigo por tener que despertarla otra vez, despues de lo de anoche con Alex, no puedo permitirle perder un solo dia, tiene que ser capaz de defenderse. 

—Love, es tarde, arriba.— Digo quitandole la sabana. 

 —No, no quiero.—Tira de mi y ojala pudiera quedarme aqui. 

—¿Quieres que te ayude a despertar?— Beso su cuello, su pecho, su boca y siento como me endurezco, muevo mis manos hasta su cintura, su abdomen, busco el camino hasta su sexo y muevo los dedos suavemente mientras gime aun entre sueños, un dedo, dos dedos, la siento humedecerse en mis manos,  necesito probarla.

Me separo de su cuerpo y sabe delicioso, es una diosa, es un maldito tesoro, es un maldito rayo de sol, gime para mi con cada lenguetazo y siento sus manos en mi cabeza, se esta soltando, esta tomando el control de su propio placer, soy yo el que jadea como un desesperado con su mano en mi cabeza, saber que esta comoda, que sabe lo que quiere que haga me prende como no tiene idea, sus gemidos son tan deliciosos como el nectar que me baña la boca, lamo, chupo, trago como un desquiciado, la manera en la que separa las piernas y sujeta mi cabeza guiandome, restregando mi boca contra su sexo... Si continua gimiendo voy a venirme solo con su voz, explota en mi boca y lo recibo con gusto, quiero mas, quiero saborear cada centimetro de su cuerpo. 

—Esto es mio,—Digo tocandola.— nadie lo toca, nadie lo prueba, es mio love, es solo mio.— Me entierro en ella como un animal y esta tan humeda que siento como me deslizo en su interior sin esfuerzo, sin resistencia, me aprieta el miembro dentro de ella y la manera en la que se arquea amenaza con volverme loco, maldicion.

Estoy perdido en esta mujer, embisto contra ella, me entierro en ella, no puedo contenerme, no puedo restringirme, no puedo ni con mi alma, estoy muerto, no tengo alma, no tengo autonomia, te pertenezco Ruth, te pertenezco en cuerpo y alma, grita en mi oido, grita para mi, grita por mi... Que no pare, esta pidiendome que no pare ignorando que no podria parar aunque quisiera, siento sus uñas enterradas en mis hombros, no quiero salir de aqui nunca, sus dientes se entierran en mis hombros y es todo lo que necesito para explotar dentro de ella como un maldito animal y la siento contraerse y apretarse debajo de mi mientras explota conmigo. 

—Mia.— No es negociable, no es una pregunta, esta mujer me pertenece.

 —Tuya.— Sus palabras me envian al cielo y al infierno mil veces y vuelvo a aferrarme a su boca como un hombre perdido. 

Dos horas, estamos dos horas tarde y el telefono no deja de vibrar, la veo vestirse con calma mientras abotono mi saco.

 —¿Que firme Ray?— Pregunta colocandose los zapatos. 

—¿No lo leiste, love? Eso esta mal.— Digo.

—Claro que no lei, estaba dormida.— No parece preocupada. 

Chasqueo la lengua varias veces y permanezco en silencio colocandome el reloj.

 —Dime que firme...— 

—Solo el contrato de venta, love, el departamento es legalmente tuyo.— Digo acercandome para besarle la frente.

—Con acuerdo de pago, espero...—La veo tomar el contrato y no puedo evitar sonreir ante su cara, ya firmo, ya no hay vuelta atras.

 "Mediante este acto las partes se comprometen de mutuo acuerdo al pago continuo y voluntario de veinte (20) orgasmos, que seran debitados en plazos de maximo 30 días, de acuerdo a la voluntad del comprador. Se prevee como posible y aceptable que se exceda la cantidad negociada sin afectar la validez del acuerdo." 

Le en voz alta, su cara es un maldito poema mientras revisas las condiciones.

—¿Ray que es esto?— Levanta el documento frente a mi.

—Un contrato.— tengo que contenerme para ocultar la sonrisa.

 —No te hagas el imbecil, — me dice— teníamos un acuerdo, pagarte 20,000 pesos mensualmente, esto no habla de dinero.— 

La traigo hasta mi para quedar con ella sobre las piernas.— Yo nunca dije que me pagarias con dinero.—

—Ray...—

—Love, este departamento costo menos de lo que gano en un dia con una sola venta, en un solo local, ademas es una falta de respeto que me quieras pagar un regalo.—

 —¿Y me cobraras con sexo? como una chapiadora... ¿Que sigue? ¿Un carro y una lipo 360?—Se que esta siendo sarcastica pero no me gusta el tono.

 —No voy a pelear contigo,—respondo.— chapeame, pelame, dejame sin un maldito peso y lo recuperare todo en dos dias. Ademas, estoy respetando tu deseo; no te lo estoy regalando, me vas a pagar, en cuatro, de rodillas, debajo de mi, cabalgandome, te voy a coger tan duro, tanta veces que vas a rogar por otra deuda conmigo.—

Reacciona a mis palabras apretando las piernas y se que si no me voy ahora no saldre de aqui, no ire a la oficina,  ella no ira a entrenar y perdere el dia entre sus piernas.

 —Vamonos que Antonio te va a matar.— Digo besandole el cuello.

 —No quiero ir, me quiero quedar aqui contigo, quedate conmigo, dile que me mori, que me fui, que me rompiste y no puedo caminar, lo que quieras, necesito un descanso Ray, estoy destruida, me duele todo el cuerpo, quedate a dormir conmigo, solo quedate mi amor.—

No puedo negarme si me lo pide asi, no puedo negarme si me llama mi amor, podria pedirme que me quede en el infierno y si lo pide asi ayudare a calentarlo.—¿Como me llamaste?—

 —Mi amor, bebe, mi negro, mi cielo, Daddy, mi vida, mi rey, tu dime como quieres que te llame Ray y lo gritare cada segundo del dia.— 

Mierda... Esta mujer me va a matar, que me llame como le de la gana siempre y cuanod me reclame como suyo.

 —Nos quedamos,— digo cuando me empuja de vuelta a la cama— aguantare una paliza por ti, aguantare su sermon.—