Capítulo 1

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Pff - escuché un estruendo, caminaré rápido. En cuanto llego al final de la calle veo a un niño que parece que se ha caido.

- ¿Oye estas bien? - pregunté.

- Si gracias señor - murmura levantándose.

Esta cogiando seguro se ha hecho daño.

- Si señor estoy bien, me tengo que ir, tengo prisa.

Lo detengo por el hombro.

- No me digas señor no soy viejo, además no pareces estar bien, te sangra la rodilla niño - respondo señalando su rodilla.

- No soy un niño, le digo que tengo prisa - se suelta de mi agarre bruscamente.

- ¿Tienes prisa porque huyes de tu padre? - La pregunta parece sorprenderlo.

- ¿Usted como sabe eso?

- Escucha bien niño no te preoucupes por tu padre, ves esa maceta - Le señalo con mi dedo índice y el asiente. - Pues él se tropezará y caerá escalera abajo, no te preocupes por él , solo se romperá el tobillo, tardará unas semanas en recuperarse.

El niño me mira sorprendido.

- ¿Oiga usted esta loco? - pregunta en forma de broma.

- Tal vez.

Se vuelve a oir un ruido dentro de la casa y se abre la puerta principal. Aparece un señor, corre tan rápido que se tropieza con la maceta y cae escalera abajo justo como dije.

- ¡Aaa! - Grita el hombre con un gesto de dolor - Oliver no te atrevas a irte mira lo que me a pasado por tu culpa, como te atreves a desobedecer a tu padre. Te daré una lección.

- Padre lo siento - ruega el niño.

El hombre hace un gesto por levantarse pero no lo logra.

- Padre lo siento porfavor no me pegues - le pide el niño.

- Se ha desmallado niño aprovecha y vete - intervengo.

- ¿Oiga como supo lo que le pasaría acaso es un brujo o adivino?

No puedo evitar reirme ante su comentario. Veo la hora en mi reloj. Es tarde me tengo que ir pronto.

- Escucha niño te diré algo - parece escucharme atento - Es tarde debes irte a la escuela para el examen - me escucha atentamente - Como te he dicho antes a tu padre no le pasará nada y si te vas no va a pegarte más. La respuesta de la pregunta tres del examen que tienes que marcar es siete. Yo se que ese examen es muy importante para ti niño.

- Que no me llamo niño - me interumpe

- Bueno si tomas la decisión de intentarlo serás un adulto.

- Si gracias señor - me sonríe - le prometo que aprobaré y me convertiré en profesor .

- Claro deberías hacerlo, a por cierto se me olvidaba toma esto no has comido desde ayer

Le doy un sándwich y sé que se sigue sorprendiendo.

- Gracias pero si no lo llamo señor y no es un brujo, ni adivino. ¿Qué es? ¿Cómo ha sabido todo eso ? ¿Acaso es un dios? - me pregunta con curiosidad , y pienso "𝑠𝑖 𝑒𝑙 𝑠𝑢𝑝𝑖𝑒𝑟𝑎".

- Solo soy alguien que te quizo ayudar, eso es todo.

- Un gusto me llamo Oliver, gracias por todo me tengo que ir - dice despidiéndose con la mano antes de irse corriendo.

- Para mi también es un gusto ¡No te olvides que la respuesta del examen es siete! - Le dije gritando aunque no se si me escuchó.

Observo al señor y veo que esta apunto de recuperar la consciencia asi que me voy ya que al igual que el niño, tengo prisa. Me subo en mi auto. Llego a mi casa rápido y veo que la vaca esta en el sillón.

El abismo de su almaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora