Charles seguía en su cuna, durmiendo plácidamente, al menos en un par de horas despertaría, o tres, si tenía suerte, pero ¿Dónde estaba Evie?, el preocupado padre necesitaba saber, así que se fue a asomar al cuarto de su madre, a lo mejor se había despertado llorando y se la llevó para no perturbar el sueño de Charlie.
Fue al cuarto donde se queda Donna y lentamente abrió la puerta, mirando en la oscuridad, Evie no estaba ahí, obviamente debía estar con su padre, cerró despacio y se dirigió a la habitación donde Ed se queda, haciendo el mismo procedimiento, se asomó y tampoco estaba ahí.
A partir de este momento, rogaba por encontrarla antes de que Taylor se diera cuenta, conocía a su esposa y el como suele a veces ser un "poco" dramática en estas cosas, aunque si era una situación preocupante, siendo plena madrugada no sabían si se salió de la cuna y bajó las escaleras, porque dejaron la protección de estas abiertas.
—Evie Kelce, vas a ser peor que yo— se dijo a si mismo pensando en su propia infancia, buscaría en toda la planta de arriba primero, antes de decirle a Taylor lo que estaba pasando.
La mansión contaba con seis habitaciones de huéspedes donde ella eligió la de hasta el final para explorar, la pequeña se habría despertado hace algunos minutos, pero por vez primera no lloró o gritó como acostumbraba, al haberse dormido tan temprano, para ella ya era hora de levantarse, así que como no tenía hambre no se vio en la necesidad de llorar tampoco, ella se levantó y con la habilidad que ya poseía se salió de la cuna, como estaba oscuro ella no supo donde quedaba la pieza de sus papás, pero eso no le impidió ver lo demás, gateando se fue al único cuarto que tenía la puerta abierta y entró, la puerta del baño también estaba abierta, así que se metió, no se veía mucho, por la hora, pero veía lo suficiente para tocar todo lo que encontraba a su paso.
Evie no tenía miedo la mayor parte de las veces, la gaveta donde guardaban las cosas de higiene personal la exploró con curiosidad, tirando las botellas de jabón que por suerte no podía abrir, pero lo que si pudo tocar con entusiasmo era el papel higiénico, sacó todos los rollos apilados, la tapa del excusado se miraba abierta, así que creyó que podía ser el mejor lugar para meter los rollos, metió todos, uno por uno, siendo al menos cinco de estos, no sin antes despedazarlos.
Terminando esa ardua tarea, jaló el rollo de papel que estaba colocado al lado de la taza de baño, tiraba divertida, hasta llegar al final de este, cuando llegó al final del tubo de cartón, tomó la tira del desastre que ella hizo y lo abrazó, se podía sentir suave y eso le gustaba, por fortuna las puertas de la ducha se hallaban cerradas y no entraría a esa zona algo peligrosa, si jugaba con la coladera se podría lastimar.
Ya no sabía que más hacer, así que se puso de pie jalando y tocando todo lo que veía que se podía mover, en su tarea de explorar el baño, se topó con la palanca para tirar del excusado, y emocionada la jaló varias veces, porque hacía un sonido gracioso y miraba que salía agua, o al menos casi salía algo por todo el papel que tenía dentro, lo que iba a provocar en esos momentos era una locura, el baño tapado sería un disparate.
Ella estaba aplaudiendo al ver como todo trataba de irse, pero era inútil, de tan tapado que estaba el agua comenzó a estancarse y tratar de buscar salida.
La rubia al salir del baño, se dio cuenta de que su esposo estaba tardando demasiado, Evie no lloraba o Charles, porque en el monitor de los bebés no había sonido alguno, aunque creía que Travis lo apagó mientras para no molestarla a ella, igual se iba a asegurar de que todo se encontrara bien, no podría dormir tranquila sin ver que sus hijos no lloraron, salió de su habitación y fue directo a la de sus bebés, entrando se percató de que su hija no estaba en la cuna, Charlie dormía bastante tranquilo, tocó su cabecita dándole un beso y se fue de ahí para ver donde se encontraban su esposo e hija, caminando hacia el pasillo pudo ver que él salía de una de las habitaciones de huéspedes.
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Eres mi juego final
Fiksi PenggemarTaylor y Travis, después de un año de relación, se han convertido en padres de sus mellizos Evie y Charles, encontrándose con nuevos retos ante una paternidad bastante sorpresiva pero muy deseada, ¿Qué es lo que le depara a la famosa cantante y el j...