Luprem Universe (En Proceso)

Capítulo XV: No perfecto

—¡NÉBULOOOOOO!

Los gritos de Alpheron eran intensamente fuertes tanto que resonaba en las paredes de energía de un agujero negro. Desesperado rondaba por todo sitio, temeroso de que le haya sucedido algo a su Deoro prodigio.

—¿¡PUEDES CALLARTE UN RATO?! ¡Trato de memorizar los nombres de mis Deoros!

—¡Surgnus esto es serio! Si no lo encuentro no se que voy a hacer... ¡Al menos yo me preocupo por la salud de mis Deoros! —cruzó los brazos.

Surgnus soltó la lamina de roca brillante donde tenía toda la lista de nombres de sus Deoros y se dirigió frente a frente a Alpheron.

—¡¡Solo te preocupas por uno!! ¡NI SIQUIERA TE SABES EL NOMBRE DE LOS TUYOS!

—¿¡Y TÚ SÍ?!

—¿¡Sabes qué?! ¡Vete ahora! ¡Sigue buscando a tu consentido, desgraciado!

*Gasp*

—¿Desgraciado yo? ¿¡Quieres que te haga recordar lo que nos hiciste a todos acaso?!

El Astra anillado sostuvo de los hombros a su contraparte, furioso por el comentario que hizo Surgnus.

—Sabes que tenemos un contrato... Si quieres romperlo, romperé mi promesa también. ¡No puedo creer que actúes tan inmaduro por un Deoro!

Alpheron no tuvo nada más que decir, mas que un simple "gracias". Su núcleo dolido brillaba fuerte, a excepción de heridas en el pasado. El núcleo de Surgnus estaba igual, pero aún más lastimado que su compañero de vida. Sentía que algún día el Astra con el que compartió todas sus alegrías algún día lo traicionara por errores terribles que recordaba.

—Un día de estos voy a explotar...

Surgnus volvió a tomar su tabla que contenía la lista en orden de los Deoros que quedaban después de la guerra del retorno de Cerian.

—Ok... Respira Surgnus, todo va a salir bien.

*Inhalar*

*Exhalar*

Surgnus observaba cada línea, aún frustrado por la pérdida de sus Deoros pasados. Ahora tenía que aprenderse los nuevos nombres después de la ceremonia reciente.

"¿Por qué no eligieron a Alpheron como todos los demás?"

Ordenados del mas corto al mas largo. Del más fácil al más difícil de aprender. Leía uno por uno.

Luego... Miró los escasos anillos que tenía, dándose cuenta de que... Siempre los tendría en su memoria.

"Siempre los tendré conmigo"

Surgnus cerraba los ojos, memorizandose los nombres de los Deoros que tenía, pero... Su núcleo parpadeaba por la inquietud y angustia que sentía en el interior.

—¡Agh!

No podía olvidar el hecho de que Aurum haya perdonado Astras y Deoros presentes. Pero... ¿Cómo entraron?

—Si ellos pudieron entrar... Ay no...

Se sentía aterrado, miraba las estrellas de los alrededores y parpadeaban rápidamente, al mismo tiempo que su núcleo parpadeaba y... Palpitaba. No podía respirar bien, y no se trataba ahora de la edad. Miraba las zonas oscuras, viendo caras donde no las hay.