Eres mi juego final

CAPÍTULO 28 Primer cumpleaños

Taylor no aguantaba la curiosidad, así que cuando Evie se quedó dormida, la acomodó despacio para que no se despertara, y bajó para descubrir lo que pasaba, sin duda, dormir, no era algo que haría hoy.

Cuando llegó a la sala vio que una camioneta de servicio de paquetería que ya se iba, Travis cerró la puerta y al cerrar la misma se encontró con su esposa parada frente a él.

—¿Qué fue eso? — ella preguntó.

—No pasa nada— rio. —Tan solo me entregaron algo importante—

—¿Qué? —

—Es una sorpresa—

—Travis, no me asustes—

—Tranquila, no es nada malo, lo verás en unos días—

Tan pronto como pasaron los días estaba siendo sábado 20 de septiembre, el cumpleaños número uno de los mellizos Kelce había llegado, era temprano, el día prometía ser una verdadera locura o una fiesta inolvidable.

—¿Quiénes son los bebés más hermosos que cumplen un año hoy? — Taylor sacó a sus hijos de la cuna, primero a Charles que no solía pararse mucho y luego a Evie, que ya estaba parada en la cuna. —¡Feliz cumpleaños bebés! — les dio besos. —Los amo—

—¡Feliz cumpleaños chicos! — Travis entró y fue directo a abrazarlos.

Taylor ya estaba llorando.

—Tay— Kelce vio que su esposa lloraba.

—¿Cómo pasó un año ya? — ella le preguntó.

—Lo sé— él le limpió las lágrimas, la besó y luego a sus hijos.

—Espero que hoy todo este bien, no tengo experiencia en absoluto sobre lo que es estar en una fiesta infantil, no tengo familia cercana que sea menor de edad, específicamente niños—

—He tomado un poco de experiencia con las hijas de Jason, pero nunca se sabe que es lo que puede pasar con un montón de infantes por todos lados— rio.

Ella sabía que podía ser una locura gigante, estuvieron semanas antes debatiendo que es lo que debían hacer para celebrar el primer cumpleaños de sus hijos, la verdad es que Taylor en los últimos años le encantaba celebrar su cumpleaños en grande con sus amigos más cercanos, por lo que no era ajena a organizar una fiesta, pero con niños como principales asistentes le daba nervios, no quería parecer una mamá loca de esas que se la pasa vigilando que nadie se lastime, esperaba poder conservar la cordura.

Era temprano, así que después de arreglarse todos, bajarían a la primera planta para ya estar ahí, solo las personas más cercanas a la pareja estarían presentes, sobre todo quienes tenían hijos.

—¡Ahí están los cumpleañeros! — Andrea se acercó para abrazarlos, la verdad es que ella había tenido la fortuna de verlos todos los días en la gira, que se le hizo una eternidad el no frecuentarlos en este pequeño descanso del tour, creía que era hora de darles privacidad y tiempo a la familia Kelce para que convivan con sus nietos.

Los pequeños se emocionaron al ver a sus abuelos, Scott cargó a Charles y Andrea a Evie, los recordaban bastante bien.

—¡Feliz cumpleaños! — Scott dijo contento.

—Hoy voy a competir con Jason para ser el tío favorito, ¿Ya está aquí? — Austin miraba para todos lados.

—Austin, por favor— Sydney lo regañó.