SCP-3084: Siete Extraños en un Festín.

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Recomendación musical para acompañar el capítulo:

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La comprensión tras la intrínseca mente de D.I.M.V, oculta tras los velos defensivos, chocó con otras y se repelió con las menos ambiciosas y menos codiciosas, aquel vistazo se había inmortalizado frente a sus ojos e inyectado en sus mentes.

Al principio, la noción de ese motor motivador, D.I.M.V, apareció como una nebulosa y juzgable, sin embargo, lograron discernir con mayor nitidez su inexorable destino.

¿Era el Arte verdaderamente anómalo?

¿Cómo podía ser posible?

¿Era el Artista o la destreza de sus manos para explorar lo material, ese motor capaz de desencadenar plagas de locura?

¿Habían grupos o individuos anómalos ahora a los cuales estar alerta?

Ante ese diluvio de interrogantes, SCP-ES-372 era un enigma moral, una espada en la yugular de las enrojecidas y sudorosas gargantas de cada humano y demonio en el Sabato, como una partida de dados en el aire, llamados por el destino, esa anomalía era sobrecogedora, un tremendo peso y responsabilidad.

Cuando sus cuerdas vocales se paralizaron levemente por el peso de esa espada, fue entonces cuando se percataron de la razón por la que el SCP-ES-372 fue concebido, la nobleza envuelta en desgarradoras e insanas locuras, sumir al mundo en su propia belleza, un peligro tan mortífero que convertía al arte en un seductor dulce que resonaba en sus oídos, acariciando sus tímpanos.

A medida que profundizaban en la investigación y estudio del SCP-ES-372 y D.I.M.V, comprendian que no podían simplemente pasar por alto su impacto en la realidad. Debían tomar una decisión, una elección que podría transformar el destino de la realidad para siempre.

De un lado, se encontraban los peligros y amenazas que ese arte anómalo representaba, la eventualidad de que sus efectos se expandieran y desataran caos y devastación. Por otro lado, se erguía la belleza, la creatividad y la inspiración que el arte podía insuflar en las almas de los mortales.

Al fin, sus mentes condujeron a un mismo sendero de comprensión compartida y era que D.I.M.V debía contenerse lo más pronto posible y escudriñar detenidamente el SCP-ES-372, buscando desentrañar su verdadera esencia y descubrir un método para encauzar sus efectos.

No podían tolerar que ese arte anómalo se convirtiera en un poder desbocado, mas tampoco podían sencillamente arrasar con algo tan formidable y singular.

De esta manera, con el SCP-ES-372 ya visto y analizado en una nueva cruzada anómala, un cometido destinado a comprender el arte y la anomalía como una nueva perspectiva, una nueva y llamativa perspectiva desde la FundaciónS.C.P, hallar una senda de convivencia pacífica entre la hermosura y el peligro.

Sabían que, era un reto colosal, pero estaban dispuestos a afrontarlo con bravura y resolución.

Por otro lado, nunca hubo un rechazo entre la marea de desprecio y aversión, la fascinación por la anomalía, aquella creación, instrumento de locuras silenciadas. Si esas miradas pudieran convertirse en actos, habrían aniquilado a D.I.M.V por su insanía, incapaces de comprender la necesidad de llevar a cabo la anomalía para luego destruirla, como un artista frustrado en un buen día.

Con el sudor perlado en sus frentes, sus manos temblorosas a punto de quebrarse, labios resecos y miradas vacías. Suspiros que se desvanecían junto a lágrimas que fluían y que se reflejaban en la misma pantalla, para luego ser absorbidos por la misma ira que los había llevado a ese punto.

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