El ángel de la muerte [hazbin hotel]

......

Desde los acontecimientos anteriores, han pasado alrededor de 5 meses aproximadamente. Unos largos y tortuosos meses para Castiel. Pero, a pesar de todo, las actividades del mayordomo nunca terminaron, y todo se convirtió en una rutina.

Otro día empezaba para los residentes del hotel Hazbin, y Castiel no era la excepción. Desde muy temprano, realizaba sus quehaceres con ayuda de la pequeña Niffty, quien no paraba de limpiar las ventanas.

El canino, bajo al lobby para preparar el desayuno de todos. Pero unos susurros llamaron su atención, volteo al lugar donde provenían y se percato de que su querida princesa, se encontraba despierta con un montón de papeles pegados a la pared y una pizarra, mientras murmuraba cosas inaudibles

Castiel: ¿Charlie? ¿Querida, que haces aquí? Aún no amanece, para que ya estés despierta -Se acercó a la rubia-

Charlie: -Volteo con una expresión desquiciada- ¡Castiel! Jajaja -sujeto un documento- Estoy averiguando la razón del por qué mis actividades no funcionan cuando el exterminio está a unos meses de empezar jajaja y no dormí en toda la noche por conseguir una respuesta que me ayude a detener al pendejo de Adam en su intento de adelantar el exterminio jajaja -Hablo sin pausa-

Castiel: Charlie -fue ignorado-

Charlie: Sigo sin entender que hice mal o cual fue el horror que cometí. Tal vez, debería duplicar las actividades o cambiarlas ¡Si, puede funcionar eso!

Castiel: Charlie -Nuevamente fue ignorado-

Charlie: Tal vez, el problema es que no están lo suficientemente motivados -sujeto sus cabellos- ¡Eso es! Necesitan más motivación para que las actividades funcionen sin ningún problema y podamos tener un gran avance para que todos seamos feli..

Castiel: -Sostuvo a la rubia de los hombros- C̷H̷A̷R̷L̷I̷E̷ -la solto, al ver que ya tenía la atención que requería- Linda, deberías relajarte -Coloco una mano, en la boca ajena para evitar que hablara- Se que estamos en una situación algo complicada, pero si no piensas correctamente, nada se resolverá ¿Me entiendes? -la fémina asíntio- Buena chica. Ahora, relájate e intenta pensar con la cabeza fría -quito la mano y se percató de las ojeras- Deberías descansar, aunque sea un poco -Acaricio la parte baja, de los grandes ojos de la rubia-

Charlie; No, no puedo. Aún debo ver la manera de demostrar que mi hotel funciona -mostró una sonrisa forzada, acompañado de un tic nervioso-

Castiel: -Solto un suspiro- Está bien, iré por un café para que te despejes completamente

El peli-plata, fue directamente a la cocina para que unos minutos después, regresará al lugar donde se encontraba Charlie, y entregarle un trozo de pastel, acompañado de un café cargado sin azúcar.

Castiel: Come y bebe todo el café -dejo los alimentos en una mesita- Necesitas energía  -Señalo las cosas- Cuando regrese, quiero ver ese plato y taza vacia, ¿Entendido? -la rubia asíntio- Muy bien

El oji-celeste, se retiró del lugar, dejando a la rubia sola para seguir con sus deberes.

Las horas transcurrieron con normalidad y la mayoría de los habitantes del hotel, ya se hallaban despiertos. A excepción de Vaggie, quien aún seguía descansando.

Cómo ya era costumbre, Castiel subió directamente a la habitación de la pareja, tocó la puerta y con cuidado se adentro.

En completo silencio, recogío las cortinas, dejando que la luz del alba despertara a la peli-blanca.

Vaggie: -Bostezo y volteo al lugar donde debería estar su pareja- ¿Charlie?

Castiel: Ya se encuentra abajo. -Informo, mientras recoge la ropa sucia-