Capítulo 12: Sembrando intriga - El nacimiento de una nueva amistad

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Una morena miraba con sarcasmo a una pelinegra que había entrado al camarote que ambos compartían.

Que poquito se conocen el chico lindo y tú, dos puntos, dos miserables puntos, yo de ti, detengo mis planes de boda con él, ya que así este lindo, un chico que no recuerda fechas tan importantes y solo es capaz de ser sincero al admitir que lo primero que vio en ti fue tu físico, significa que solo él ve en ti tus notorios atributos, no ve tu interior, y una relación solo basada en la atracción física, pues está condenada al fracaso, decía Helles, mientras llevaba una botella a sus labios.

No todos somos tan buenos para recordar eventos, por más importantes que ellos sean, además el recordar fechas es algo memorístico, lo más importante es la sinceridad en una persona y Gokú es muy sincero, por ello, dijo lo que dijo, yo no le veo lo malo a su respuesta, pues él no es el único que al conocerme se fijó primero en mi apariencia, y no es que lo haya hecho por pervertido, lo que sucede es que aquel día yo llevaba un vestido...., respondía Milk.

No lo justifiques, ello es lo peor que puedes hacer, él es como la mayoría de hombres, ven a una chica mostrando sus atributos y allí van como idiotas tras de ella, contesto la morena, dejando la botella sobre una pequeña mesa.

Gokú no es ningún idiota,..., expreso la pelinegra.

Tal vez no sea un idiota, pero es hombre, se deja llevar por las hormonas, respondió la morena.

No, Gokú, no es así, él me ama y yo lo amo, nuestro amor va más allá de una atracción física...., decía Milk con la mayor calma posible.

Mira queridita, te diré algo, a manera de consejo, de ti dependerá si lo tomas o lo dejas, pronunció Helles con firmeza, haciendo una pausa para agregar: No confíes plenamente en él, después de todo es hombre y...

Lo dices por experiencia propia, expreso la pelinegra, haciendo que la morena camine hacia ella.

¿Qué has dicho niña estúpida?, dijo Helles con rabia.

Que en vez de estar fijándote en las relaciones de los demás cuida tu relación, contesto Milk, haciendo una pausa para agregar: El que tengas 10 puntos no es sinónimo de que tu relación sea mejor que la mía.

Chiquilla insolente, como te atreves a hablarme así, dijo Helles.

No creo haberte respondido mal, solo digo lo pienso, la coincidencia de respuestas no habla sobre la verdad de un corazón, añadió la pelinegra tomando un sombrero de su armario para luego salir del lugar.

Ahss, como la detesto, expreso la morena.

Mientras tanto:

Un sonriente calvo cambiaba de expresión tras escuchar lo que un joven de mirada sombría le decía.

Yo que tú tengo mucho cuidado con él, allí con su carita de niño bueno, podría ser un problema para ti, ya oíste lo que dijo públicamente, quiere mucho a Dieciocho, después de Milk, es ella la segunda mujer que más quiere en este mundo, decía Jiren.

Bueno es lógico, es su amiga, como una hermana para él, respondía Krilín con la mayor calma que pudo.

Una hermana con la que tuvo un romance, agrego Jiren en tono intrigoso.

Ello fue algo que ambos aceptaron tener por mutuo acuerdo...., decía el calvo.

De igual manera yo estaría vigilante, él es muy apuesto, tu chica bastante linda, ambos tienen química y tuvieron algo...., añadía el otro joven.

No, algo entre los dos, no puede volver a darse, respondió con la mayor seguridad posible Krilín, al tiempo que un joven cabello de flama y el joven objeto de plática llegaban al lugar donde estaba el calvo.

Voy con Raditz, parece que esta medio triste, porque no pudo conseguir los diez puntos, decía Jiren.

¿De que hablaban?, expreso Vegueta, mientras el otro joven se alejaba.

Gokú, ¿a ti nunca te interesaría mi Dieciocho?, ¿verdad?, pronunció el calvo.

¿Qué?, dijo confundido el apuesto joven.

Olvida lo que dije, soy un estúpido...., respondió Krilín.

Ya empezaron con sus intrigas, dijo Vegueta.

¿Intrigas?, pronunció Gokú.

Sí, óiganme bien par de tontos, no se dejen envolver por las intrigas y mentiras que empezaran a formarse para hacernos discutir,....

En tanto:

Una pelinegra llegaba al lugar donde estaban reunidas un grupo de chicas, excepto una que estaba alejada del grupo platicando por celular.

¿Qué ha pasado?, decía Milk, al ver a una joven de mirada entristecida.

Discutió con su prometido y quiere abandonar el programa, dijo Macarita con la mayor calma que pudo.

¿Y por qué discutieron?, respondió Milk.

No lo quiere decir, pero creo que fue por el reto, dijo Bulma en voz baja.

Recuerda que ella no respondió la pregunta del público, agrego Dieciocho.

Déjenme sola, decía Sora, mientras se cubría su rostro con sus manos.

Tal vez sea mejor que se vaya, así quedamos menos, expreso Brianne, en voz baja.

¡Cómo puede decir esas cosas! contesto Milk, en voz baja.

Déjenme sola, volvió a decir Sora.

Chicas, dijo la pelinegra indicándoles con la mirada a las demás chicas que se marcharan.

¿Por qué no te vas tú también?, expreso la modelo, al notar que la pelinegra seguía junto a ella.

Huyendo de los problemas no se arreglan las cosas, sino al contrario se complican más, te lo digo por experiencia propia......

En otro de los ambientes del crucero, tres chicos observaban a otro que estaba bebiendo de una botella.

Creo que ya lleva tres, decía preocupado el calvo.

Ve a hablar con él, no puede seguir bebiendo así, agregaba un joven cabello de flama, mirando al apuesto joven de cabello alborotado.

¿Qué vaya a hablar con él?, decía Gokú.

Si amigo, eres el líder, respondió Vegueta.

Sí, tienes razón, contesto el joven de cabello alborotado, antes de partir hacia el lugar donde estaba el futbolista.

Que te parece Satoshi, el líder quiere demostrar su liderazgo, dijo con mofa Jiren, que estaba junto a Zamas y Raditz.

El rubio no le respondió nada, solo sonrió con ironía.

Allí te dio tu respuesta, expreso Zamas sonriendo, junto a Raditz, al tiempo que el joven de cabello alborotado llegaba junto al futbolista.

Que sea la última botella de licor que bebes, recuerda que hay cámaras, además como deportista eres un ejemplo a seguir por....

¿Has venido a sermonearme o me estás dando una orden?, porque sea cual sea tu motivo, no me agrada tu presencia, dijo con molestia Touya.

Los problemas no se arreglan con licor, mejor platiquemos, expreso Gokú.

Crees que quiero platicar con un niño como tú, no me hagas reír, contesto el futbolista, antes de marcharse del lugar.

Mientras tanto:

Gracias por tus palabras, y discúlpame por cómo me estuve comportando contigo, dijo Sora.

Ello ya está olvidado, respondió Milk, haciendo una pausa para agregar: ¿Qué piensas hacer?

No renunciaré, no lo haré, y en cuanto vuelva a ver a Touya, le diré que lo amo solo a él, y que se lo demostrare con cada acción mía a partir de ahora, decía Sora.

No esperes a verlo, llámalo, pronuncio la pelinegra.

Sí, tienes razón, lo llamaré, contesto la otra joven.

LA BODA SOÑADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora