Hook's Little Adventures

Chapter II

La puerta de la casa de Feliks fue tocada al mediodia de ese martes, el italiano fue a abrir e inmediatamente se quedó en silencio.
—Stack, decile a Hook que baje...—

5 minutos después, Hook llegaba de la mano de Stack a la sala, donde una persona con traje de astronauta esperaba.
La persona se quitó el casco, revelando cabello rubio y ojos rojos brillantes igual que los de la pequeña, quien se heló en su lugar.
—Hola Hanna— Saludó esa persona.
—Hook, es Hook.— Stack corrigió sin soltar la mano de la menor.
—Ah. Hola Hook.—
—Que hace Cherry aquí...— Hook miró a Feliks.
—No lo se, no ha hablado...—
—Vine a buscarte Hook, nos vamos a casa.— eso solo causó que la pequeña sostenga con más fuerza la mano de stack, quien se ponía alerta.
—Yo ya estoy en casa.—
—No, no hook. Está no es tu casa. "Hook" tampoco es tu nombre.—
—Si! SI LO ES!— la menor parecía algo asustada. —¿VERDAD FELIKS? ¿STACK?—
—Oh, pff, hook, claro que es tu casa.— Feliks afirmó tranquilo
—¿De quien chingados sino, Pulga?— Stack se rió un poco, viendo cómo el agarre de la menor parecía aflojar.
Esa discusión entre la menor y la joven albina continuó unos momentos más, hasta que la pequeña corrió a refugiarse en su cuarto.

—Cherry,— Feliks señaló la puerta.
—Feliks, es mí hermana.—
—Ella no va a ir ni a la esquina con vos.—
Finalmente la mujer dejó la casa, así la pareja se encaminó al cuarto de la menor... El cual estaba vacío.

Hook había huido, llevaba en su mochila su computadora, sus cuadernos, cosas de su gato y unas galletas, además de sus infaltables explosivos y los peluches que "Papá Noel" le había regalado. Su gato iba en su hombro mientras ella corría lo suficientemente lejos para alejarse de esa casa.

Terminando perdida en medio de una gran ciudad, la cual estaba llena, ya que empezaba a caer la noche.
No recordaba muy bien el camino a casa, así que caminaba despacio cuando escuchó la voz de cherry y empezó a correr, la mujer la seguía, no podía perderla y la desesperación la empezaba a consumir.
A su vez había empezado a llover, así que poco a poco las calles de vaciaban y su cabeza solo podía pensar que si algo le pasaba, nadie estaría para ayudarla.
Correr distraída no era algo bueno, ya que pronto resbaló y cayó. El gato se puso frente a ella, hisseandole a Cherry.
—¡HEY! ¡PUTA DE BLANCO!— una voz resonó en la lluvia, era una dama de un aspecto medio descuidado, mujer de oficio callejero. —¡MAS TE VALE ALEJARTE DE HOOK!— amenazó.
Hook, entre el leve llanto y la lluvia pudo distinguir a la mujer, era una dama con quién había amigado cuando Feliks los llevó a cenar hace algunos meses.
La dama y cherry discutieron, lo cual culminó en la albina yendose y la dama cargando a hook.
—¿Qué haces por acá? Está lloviendo... ¿Donde está tu hermano?—
—Yo... Yo— Hook hipeaba suavemente, siendo incapaz de explicarlo.
—Está bien, espera. Vamos a llevarte a casa, sabes dónde vives?— la dama había empezado a caminar hacia una especie de hotel donde sus compañeras estaban, explico la situación y se aseguraron de abrigar a Hook antes de tomar camino hacia Avalor.

Los científicos iban algo desesperados por la calle, buscando a la menor cuando la vieron con dos damas.
—¡HOOK!— Feliks la llamó, sintiendo que un peso se le caía de los hombros.
—¡SACK! ¡FELIKS!— La menor extendió sus brazos hacia ellos, así cuando estuvieron cerca, fue cargada exitosamente.
—Huh, que haces acá? ¿Por qué...?— Stack sonaba levemente aliviado mientras revisaba a la menor.
—Una mujer de blanco la seguía, la encontré a unas cuantas calles de acá.— La dama explicó
—Ya veo, muchas gracias de verdad.— Feliks acomodó a la peque y le sonrió a la dama, quien se despidió de la menor y se fue con su compañera

—Hook, no importa quien venga o trate de llevarte, no vuelvas a huir de casa porque casa es el UNICO lugar donde ni de chiste te van a tocar.— Feliks le explicaba mientras hacía el camino de vuelta a casa.
—Perdon..—
—Mm, está lloviendo... Yo digo que terminemos la noche viendo películas.— Stack sugirió para cambiar el animo
—eSOO!— nuevamente la peque se reía, estaba segura.