Lunas Acarameladas (Yaoi-KaiLen)[En edición y por terminar]

Capítulo 8 .- Primer Round.(1/2)

Haber, no soy de comentar al inicio de la historia. Pero esto es importante, porque necesito que tomen en cuenta cada detalle de la historia, pues puede llegar a ser un poco confusa.
Aquí se encuentran Kaito y Len en los baños, donde se narra como nuestro shota se liberó de aquella intensa situación...
¡disfruten! o(^^o) (o^^)o
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.:POV: LEN:.
La calidez que en ese momento me emitía aquel abrazo comenzó a darme un extraño sentimiento. Tenía miedo, pero algo me daba la seguridad de que no era por Kaito...
Sus brazos me sostenían, nuestra respiración era lenta y se acompasaba con nuestros latidos fulminantes cubiertos por una fina capa de lágrimas que sobresaltaban nuestras pupilas.
El ambiente de ese momento era tan agradable, que incluso mi propio cuerpo se agitaba incesantemente tras cada segundo de autoritario contacto visual. De pronto, el timbre tan agonizante resonó seguido de presenciar unos bullicios fuera de los sanitarios, donde los jóvenes se descontrolaron tras el horrible estruendo de la campana, la cual anunciaba el inicio del receso.

- N-nos pueden ver...- advertí, mientras rebuscaba mi propia dignidad fuera de control, y mi corazón confundido cubierto de sentimientos inestables retumbando por la simple presencia de aquel hombre. ¡No podía estar enamorado de él!, no... realmente no debía...

-No me importa, tú eres mío y eso es algo inefable. Ningún otro ser en la tierra podrá evitar mi objetivo...- su mirada seguía sin brillo, era momento de temer lo peor por cada inusual palabra fuera de contexto, solo sentía que mi mente divagaba y nuestros cuerpos se emitían calor mediante un lazo eminente entre sus grandes brazos aferrados a mí. Me estremecí, debido un cosquilleo furtivo emanado de sus dedos, los cuales me circunferenciaron la espalda por cada efímera lágrima que decoraban sus mejillas. Entonces, sentí mis mejillas arder, con los movimientos que influenciaba en desesperación.

-Debo estar contigo. Es necesario que firmes un contrato de sangre conmigo para ser Tú esclavo... - susurró a mi oído ,carraspeante, y mi duda creció poco después de haber escuchado esas palabras subliminales que distinguían lejanamente intenciones ufanas.

-¿E-esclavo...?- me resigné a indagar, con nervios extremos. Este se fijó en mi pecho, y trazó las líneas exactas que se dibujaban en cada pétalo de aquella rosa fulminante. Sus ojos también recorrían cada curva azul que tenía el pequeño retoño de rosa, y yo solamente sentía una fuerte congelación por cada roce que tenían sus dedos sobre mi blanco pecho.

-¿Sabes lo qué es esto, Len?. - negué seguido de su extraña pregunta que había liberado segundos después de su eminente divagación en mi pecho, este suspiró en un notorio alivio y me observó constantemente con una mirada moderada de aparente "inocencia ". Para mi propio pensamiento eso era algo extraño, e incluso el ver aquella flor ya me parecía muy paranormal, pero la teoría de creer que Kaito era responsable de aquel acto surrealista impregnado en mi piel sobre la exacta ubicación de mi corazón era suficiente como para acertar en la respuesta correcta de la incógnita.

-Len... ¿Tú creés en la existencia de demonios, seres mitológicos y ángeles?.- ¿Por qué me estaba haciendo ese tipo de preguntas?. En realidad, yo nunca había considerado el indagar en las cosas ficticias, y por religión, jamás me convencí al cien por ciento de la existencia de ángeles o demonios; así que para sincerarme, volví a negar . Kaito pareció sorprenderse con mi respuesta, y se quedó inerte mientras razonaba a cada segundo mi vaga contestación, sin saber mis verdaderas ideologías de ese tema inesperado.

-Entonces... ¿Yo qué soy para tí?. - me estremecí tras aquella extraña pregunta, sin tener la seguridad de acertar al blanco en la respuesta que él buscaba. Pero en realidad, yo era el único que se preguntaba intesamente eso mismo.

-N-no lo sé.. - bajé mi cabeza, evadiendo su fulminante mirada, y lo separé con todas mis fuerzas de mi pecho. Él podía ser infinidades de cosas: un mutante, un monstruo, mi peor pesadilla, un maldito pervertido que estaba acosándome, e incluso... un demonio. ¿Pero, realmente había una prueba verdadera de mis ideas?. -Creo que eres... ¿interesante?. -

-Ya veo... eso quiere decir que no me tienes miedo, ¿verdad?.- aquello había llegado a mi ser como una lluvia de incoherencias, ¿Qué estaba tratando de decirme?...

Kaito rió por lo bajo, y se alejó por completo de mi cuerpo. Aproveché el momento para acomodar mi uniforme correctamente, y sin esperar mucho, sentí como sus labios se impregnaron velozmente en los míos poco después de haberme puesto de pié. Eso sí fue inesperado, y trágicamente algo en mí ocasionó que mi cuerpo no reaccionara, hasta poco después de ver como Kaito salía de aquel estrecho lugar seguido oír la puerta principal del baño azotándose contra el marco.

-¿Por qué huyes...?. - susurré, mientras me dirigía a mi salón, intentando recapacitar a la realidad que me hacía pensar en mis estupideces...
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(Regresando a escena del capítulo anterior, sigue narrando Len )

¿¡¡Qué mier** estaba sucediendo!!?.
¿¡Esto qué mis propios ojos estaban presenciado, era real!?...
En ese mismo instante mi cuerpo quedó impávido tras ver como el maldito bastardo de Gakupo se estaba follando al mismisímo maestro Hiyama Kiyoteru. Y para colmar el momento, ¡ el profesor se estaba dejando ser violado!. ¿¡Por qué!?...

Minutos atrás, solamente me dirigía hacia mi salón. Pero para mi desgracia, el aula de profesores se hallaba tres salones antes que el mío, por lo cual, imaginé que nadie se encontraba adentro del salón, tras ver como la puerta estaba ligeramente abierta... así que, amablemente, iba a cerrarla, pero... me percaté de la presencia de dos cuerpos tendidos en el suelo, y para mi maldita "buena suerte"... eran Gakupo y Hiyama-sensei.

Tomé aire, intentando no actuar impulsivamente, y evité mirar directamente hacia aquellos ojos violetas que se dirigían con disgusto por mi presencia, ¿Era normal el tener unas enormes ganas de matarlo, después de haber creído qué él era alguien importante para mí?.

-¡Vaya, Gakupo!. - enfatizé con hipocresía. - ¡espero seas feliz!. - y poco después sonreí, para salir corriendo seguido de mi efímera presencia en esa habitación...

Seguramente, me había visto pésimo...
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ⓝⓞⓣⓐ: Sí, sí, ya sé... ¡maténme!.. * alza sus brazos mientras llora incesantemente *. ¡waaa, T-T no pude poner por conpleto lo que quería que supieran de la trama! , pero no es mi culpa... ¡es culpa de mis malditas tareas que me sobre agobian durante los fines de semana!
¡uhg!, ¡dios, ya quiero mis benditas vacaciones!..
Es más, el 17 de julio salgo de clases, así que voy a tratar de publicar más seguido o al menos a poner más de 1000 palabras por cada capítulo (lo cual son lo mínimo de palabras que me obligo a escribir ) , pero... estoy leyendo muy seguido mi diccionario y la verdad, siento que estoy mejorando ¿ustedes no sienten lo mismo?, jeje.

¡Ah por cierto Yoko - chan!, creo que haré una historia de Lencesto... pues lo he estado pensando y la verdad terminé inspirándome en una trama entera de esa kawaii pareja •﹏•.
Te invito a leerla, pero eso sí, comenzaré la historia hasta lograr hacer la mitad de esta. ≧﹏≦

Bueno eso es todo hasta aquí, así que...

¡¡Good bye!! ●▽● (≧▽≦)/
By: Hikari -aiko