𝑻𝒉𝒆 𝑳𝒊𝒈𝒉𝒕 𝑩𝒆𝒉𝒊𝒏𝒅 𝒀𝒐𝒖𝒓 𝑬𝒚𝒆𝒔 - 𝑺𝒂𝒕𝒐𝒓𝒖 𝑮𝒐𝒋𝒐 𝒙 𝑻𝒖

☨𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟑☨

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Los días fluían sin prisa, como un río constante arrastrando consigo las semanas, mientras la relación entre ___ y Satoru apenas comenzaba a echar raíces. Pese al muro de grosería e indiferencia que la chica levantaba, obstaculizando su entrada a su mundo, Satoru perseveraba en su deseo de formar parte de su vida. Consciente de las sombras que la envolvían y de los desafíos que se le presentaban, él estaba determinado a permanecer a su lado hasta que ___ finalmente lo aceptara como un amigo.

Entre las situaciones que el albino conocía bien, se destacaba el hecho de que ___ tenía un padre notablemente ausente, al que se refería como 'Dalton' en lugar de 'Padre'. Su hermana, Jules, no era precisamente el modelo de apoyo fraternal; más bien, optaba por ignorar a la peliazul o dirigirse a ella con desdén en cada encuentro que tenían. Además, ___ parecía carecer de una figura materna, al menos según las observaciones del fantasma, quien, al esperarla por las mañanas para ir a la escuela, siempre veía a los mismos tres integrantes de esa familia salir y entrar de la casa. Este último aspecto era el que más intrigaba a Satoru, llevándolo a tejer varias conjeturas con la esperanza de entender la razón detrás de la ausencia de la madre y si eso había contribuido a la actitud asocial actual de ___.

Consideraba la posibilidad de que la mujer hubiera abandonado a la familia cuando sus hijas aun eran pequeñas, que se hubiera divorciado de Dalton o que incluso hubiera fallecido recientemente. A pesar de su curiosidad por desentrañar la verdad, el peliblanco decidía no indagar sobre el tema. Reconocía que ___ probablemente nunca compartiría esa información debido a la falta de confianza entre ellos, y era consciente de que se trataba de un asunto delicado en el que debía mostrar respeto y evitar entrometerse.

Satoru estaba plenamente consciente del flagrante acoso escolar que ___ padecía a manos de sus compañeras, Uro y Remi, las mismas que la habían agredido recientemente en el gimnasio. Y aunque el espíritu siempre la alentaba a que se defendiera, ella prefería ignorarlo, considerándolo un asunto trivial que no merecía su preocupación, dado que desafortunadamente estaba acostumbrada a recibir ese tipo de trato. No obstante, al ver que ___ no estaba dispuesta a enfrentar el acoso que estaba sufriendo, el albino decidió tomar cartas en el asunto. No se iba a quedar de brazos cruzados viendo cómo su amiga era maltratada por esas dos.

Poniendo así en marcha su plan en hacer destacar a la chica en clase. Su objetivo era claro: Demostrarles a sus acosadores de cuanto era ella capaz, al mismo tiempo, que la ayudaba a verse a sí misma como una mujer segura, valiosa y digna de respeto. Su plan era meticuloso. Cada día, se dedicaba a repasar con ella los temas de cada asignatura, asegurándose de que entendiera todo correctamente. Ya fuera durante el receso o de regreso a casa, no importaba el momento, él estaba ahí para ayudarla. Y aunque era evidente el fastidio de la peliazul por estudiar, este no se detenía, pues estaba más que decidido en hacerla brillar. Ya que, gracias a sus esfuerzos conjuntos, los profesores comenzaron a elogiar más seguido las ideas que ___ aportaba en clase, donde Satoru la alentaba a participar, incluso cuando ella no quería hacerlo. Además de sorprender a los evaluadores con sus altas notas en los exámenes.