Su simple sonrisa lo era todo, una luz del Sol de verano en medio de la obscuridad, de todo el alrededor, la gente, la aglomeración, solo a él lo observaba, solo él se llevaba mi atención, solo él brillaba, su hermoso cabello negro que brillaba igual que su sonrisa, sus ojos eran como dos jades brillantes con un par de protectores que protegían sus hermosos ojos.
Era alto,guapo, inteligente,me trataba hermoso, atlético, carismático y siempre sonriente, esa sonrisa era la luz cálida que entraba a mi corazón cada vez que lo veía.
El entró justo en un verano, donde él se confundia con el Sol y terminó en un invierno donde el frío entró hasta mi corazón, calandolo y congelando, haciéndolo tan frágil hasta el punto de que con un solo, simple y ligero viento del pasado puede llegar a quebrarse, al punto de terminar como él, solo que en primavera, cuando los recuerdos de ese amor se hayan desecho como el hielo en esa época.
Así empezó todo...
