El Militar del Portón 2-Toboa

•4•

¿Por qué yo no?

La hermosa adolescente de pelos rubios estaba sentada frente a su espejo. Arreglándose.

Se ponía su labial de brillos, para ser sinceros. Ella no necesitaba maquillaje.

Pero de vez en cuando lo utilizaba.

No era que hiba a salir, se maquillaba por aburrimiento.

Su celular comenzó a vibrar, miro y era su amigo que ya conocemos.

-Hola Daniel, qué pasa?

-Hola.. oye, voy para una fiesta, Jan me dijo que si quiero puedo traerte. Por qué va a ir su amigo que quiere contigo.

-Ja, bromeas. No tengo nada que ponerme..

-Te vez bien con cualquier cosa..

-Ugh, bien, ya voy para tu casa ¿A que hora es?

-Si puedes ven a las nueve, por qué empieza a las diez.

-Bien.. ya voy.

Lavinia colgó, mientras seguía poniendo una capa fina de labial.

[...]

Daniel se sentía nervioso, probablemente sea su primera vez tomando cerveza. Por qué si es una fiesta obviamente habrá ese tipo de bebidas.

Pero más nervioso se sentía era por qué iría con Jan.

¿Y si Jan se chumaba quien lo cuidara a él? No, es que el si se sabe cuidar solo pero ya tenía planeado emborracharse el también.

Ugh, de todas formas al día siguiente era sábado. Sus padres regresarían el martes.

Daniel miro el reloj, eran las nueve y quince. Rápidamente pudo escuchar que alguien tocaba la puerta.

Fue a abrir, era Lavinia. Se veía realmente hermosa, traía un vestido rosa pastel con detalles blancos, su pelo recogido en una coleta alta. Y el maquillaje le hacía relucir una cara espectacular.

-No qué no tenías que ponerte?

-Pues no, a mí no me gusta mucho salir.

-A mi tampoco.. pero todo por el.

Los dos se quedaron callados por aquella respuesta del azabache.

-Y..-Entre cerro los ojos Lavinia.- Si me vas a dejar pasar o me voy a la verga?

-Ah, si pasa. Pronto vendrá Jan a llevarnos.

Lavinia entro con seguridad, llegando a la habitación de Daniel.

La chica se sentó en la cama y saco su celular, mientras Daniel se sentó al lado de ella. Parecía estar triste.

Lavinia veía Instagram, luego miro de nuevo a Daniel.

-Oye, que te pasa? Te veo triste.

-No es nada, nada.

-Seguro? Chico, de una vez te digo que eres mucho para el.

Daniel rio, y se acostó en su cama.

-Sí, lo sé.-Mentira

-Y el amigo de Jan es guapo?