Parte 4

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Parte 4

No había hablado con Thor luego de la última conversación por Whats App, hasta que, una semana después, atormentado por la angustia, le envié un mensaje con la excusa de que tenía una gorra suya que olvidó en mi casa, le pregunté qué debía hacer con ella, si se la debía dar. No recibió el mensaje de inmediato, obviamente seguía con el antiguo celular en mal estado, y lo conozco tan bien como para saber que poco le importa si el celular prende o no.

Pude haber actuado un poco estúpido al mandarle por Messenger un mensaje a su hermano preguntando por él. No tengo gran relación y no lo he visto más que un puñado de veces, pero igualmente le he preguntado por Thor.

Thor está bien, no lo he visto en unos días, pero sé que está bien, comenzando un emprendimiento en el que está depositando todo su tiempo. Si quieres, le digo que se comunique contigo.

Gracias, pero no. Yo solo quería saber cómo se encontraba ya que al parecer no tiene celular. Por favor, te pido que no le comentes esto y disculpa las molestias.

No es molestia, no le diré. Pregunta siempre que quieras. Los que lo conocemos bien, sabemos que odia los celulares.

Al día siguiente, me llegó un mensaje de Thor a WhatsApp.

En estos días estoy y estaré muy ocupado como para verter. Solo es una gorra, sin mucha importancia.

¿La tiro?

Haz lo que creas mejor. Puedes regalarla también.

Te la puedo alcanzar hasta tu casa si quieres.

No hagas ese viaje, como dije es algo sin importancia, es solo material. Tírala si te estorba.

Me la quedaré, puedo usarla.

Si quieres.

Quiero—
no contestó, por lo que envié otro mensaje—. ¿Cómo estás tú? ¿Has tomado las decisiones?

Se desconectó y ya no contestó más. Estaba dolido en ese momento y continúo dolido en este. Su manera tan fría y desconsiderada de contestar me ha herido. Siempre ha sido directo y cortante, pero nunca a este extremo. De eso ha trascurrido otra semana.

Cualquiera con sentido común y conociendo la historia, sabe que la gorra solo era una excusa, que mi intención era verlo, no soy idiota y él tampoco, lo supo y no quiso verme, lo entiendo y me duele.

No sé cómo seguir a partir de aquí y lo extraño cada noche al finalizar el día. Cada mañana al despertar. Estos días he pensado que mi última carta a jugar es ir a su casa mañana, pero este día está terminando y la idea está muriendo. Me estoy rindiendo y no quiero soltarlo, pero creo que debo hacerlo. Me ha mostrado que no le intereso, me ha dicho directamente que no quería continuar con la relación, yo sigo rodeándolo, buscándolo como un molesto y pegajoso ex, o lo que sea que hayamos sido, no quiero dar esa imagen, no quiero sentirme esa clase de persona.

Tengo que soltarlo, por más que duela, sacarlo de mi cabeza y no preguntarme por él, no rodear a sus conocidos más cercanos. Si pude olvidar a muchas mujeres en años anteriores, podre olvidarlo a él, solo debo actuar de la misma manera que actué al olvidarlas, de la misma manera que Thor actúa.

Ocupare mi tiempo, hasta que salga de mi cabeza y pueda ver a otras personas.Lo intente, di todo de mi, hasta mi paciencia. No funcionó, no era para mí. No es la última persona.

¿Me molesta? Claro que sí, me frustra y me enoja haberme equivocado tanto y hasta el punto de enamorarme para tener que olvidarlo. Odio que todo salga mal en mi vida en cuanto al amor. Odio no tener una pareja, una compañera, o en este caso, un compañero. Pero así es la vida, así es la mía y debo seguir adelante.

En unas semanas se que conoceré a alguien más y podre probar otra relación. Seguro que iré más lento, con más precauciones en cuanto a mi corazón y puede que no funcione, pero eso no me debe desanimar.

La idea de ir a casa de Thor, queda descartada. No puedo seguir nadando contra la corriente, cuando él va rápidamente sobre ella.

De noche, regreso a casa, sin mucho ánimo de cocinar o comprar algo para cenar, sin hambre, solo sueño, mucho sueño de toda la semana. Horas de sueño que perdí y se fueron acumulando en mis hombros pesando más y más.

Escucho mi celular sonar con la llegada de un WhatsApp, lo ignoro para ir primero por una cerveza. He dejado el celular, así como las llaves y billetera, en la mesa frente al sofá, regreso con la cerveza, después de beber un largo sorbo y suspirar de placer al sentir el alcohol en mi sistema, decido ver quién demonios me molesta.

No sabes cuánto te extraño.

Era Thor, sorprendiéndome con palabras tan simples, pero tan poco común en el. ¿Qué pretende? No es así, no envía este tipo de cosas, mucho menos manda un mensaje primero de la nada. Simple y directo, solo lo importante y sin rodeos, en el fondo.. es muy Thor el mensaje.

Aun dice "escribiendo", conociendo el poco uso que le da al celular, debe estar esperando a mi contestación, porque no escribiría tanto tiempo.

Me extrañas, porque es tu decisión no verme—decidí en un microsegundo, que si él es frio yo lo seré más.

Soy un idiota.

Pensé que no tenías celular.

Logré que funcione.

Felicitaciones.

Loki, en verdad te extraño.

¿Y qué esperas que diga? No fue mi decisión, fue tuya y nada puedo hacer.

¿No me extrañas?


Thor, no estoy para esto, estoy cansado y lo diré claramente. No seguiré buscando a alguien que no me quiere o me hiere, lo aposté todo por lo que esperaba que lleguemos a tener y lo perdí. Ahora quiero encontrar a alguien que quiera algo serio y apueste primero por mí.

No me sorprendió el "grabando audio", ya me extrañaba que no lo haga. Pasan los segundos y espero tranquilo, se que Thor no entiende lo que es un audio y en ocasiones excede el minuto.

—Loki, en verdad trate de usar esta cosa y enviar mensajes como una persona normal. Pero no puedo y ya me canse, yo sabía que por mensaje las cosas no se entienden como uno quiere. Estoy camino a tu casa para que podamos hablar.

¿Quién demonios te dijo que vengas? No lo hagas. Estoy cansado y voy a dormir.

No lo quiero en casa, lo que menos necesito es verlo, porque puedo echarme a llorar y no quiero su presencia frente a mí, si viene y lloro sé que no podremos tener una amistad en un futuro. Nos equivocamos con lo de tener una relación y perdí mucho, pero quería la esperanza de una amistad al menos.

Otro audio, odio los audios, más los suyos.

— Ya estoy yendo. Y si no recuerdo mal, mañana no trabajas, asíque tenemos tiempo de hablar. No quiero dejar las cosas así.

Yo si quiero dejarlas así—continúo enviando mensajes.

— Haber, ¿qué parte de "No sabes cuánto te extraño" no entendiste? Porque creo que lo escribí bien y se lee bien. Pero por si acaso te lo diré. No sabes cuánto te extraño.

— ¿Y qué quieres que haga con eso? Me extrañas porque tú decidiste desaparecer y hacerme a un lado, no fue mi elección, ahora te aguantas... ¿Por qué debo verte cuando tú quieres verme y no cuando yo quiero verte? Eso es realmente injusto—decidí enviarle un audio, sonaba tan enojado como me siento.

— Porque soy un idiota, ¿sí? Lo entendí, me comí todos estos días las ganas de verte ¡Loki, no sabes por el infierno que estoy pasando al contenerme!

Sigo sin entender. En serio, no vengas ya me voy a dormir—volví a los mensajes.

Sin ánimos de terminar la cerveza, me cambie a una ropa cómoda para dormir, antes de dejar el celular bajo la almohada, leo el último mensaje, que me extraña sea escrito y no audio.

Dijiste que me ibas a esperar, que ibas a tener paciencia conmigo. Lo prometiste. En más de una ocasión.

Me rio de la ironía.

Y lo hice, no te atrevas a decir que no lo hice. Porque fui paciente aun cuando me dejaste a un lado sin una buena explicación... ¿qué mas esperabas que hiciera? ¿Qué te espere cuando me negaste siquiera verte? Dije que iba a ser paciente, no estúpido. Buenas noches, Thor.

No me dejes así, hace frio fuera.

¿Qué demonios?

Estoy fuera del edificio y veo la luz de tu habitación prendida, ¿puedo subir?

Odio que seas así de impulsivo, debería dejarte afuera y dormir tranquilo. Ni siquiera quiero hablarte.

¿Entonces si puedo subir y dormir contigo? Puedo esperar a la mañana para hablar, realmente también tengo sueño.

¡Eres odioso!

¿Eso es un sí? Porque estoy subiendo.


Dejé el celular y fui a abrirle la puerta, lo que menos esperaba es que me abrazara y susurrara a mi oído aquello que me había escrito.

— No sabes cuánto te extraño—entonces entiendo que para él todos sus sentimientos se reducen a esas palabras, que pone todo lo que siente en ellas y creedemostrarlo diciéndolas.

Pero no sabe, no tiene idea de que se exactamente cómo se siente, porque me siento igual. Lo he extrañado hasta el punto del dolor, sentirlo entre mis brazos y abrazándome es como agua fresca en medio del desierto, un desierto en el que estuve por más de tres semanas.

Su abrazo no es sobre mis hombros, ni por debajo de mis axilas, me abraza rodeándome ambos brazos, pero cuando respondo su abrazo rodeando su torso, envió automáticamente sus brazos alrededor de mi cuello, entonces se pega mas a mi aferrándose a mi cuello, siento su barba de dos días rozar mi mejilla.

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