¡Final alternativo! gracias por las mil lecturas, me alegro de que les haya gustado mi adaptación.
[...]
—¡Ger, esperá! –se apresuró a decir, haciendo que el aludido se volteara inmediatamente hacia él. No podía explicarse el maldito sabor amargo que lo invadía en estos momentos, o tal vez si podía, pero no quería.
El menor volvió unos pasos hacia atrás hasta quedar
frente a Santiago nuevamente.—¿Qué?
—¿Vas a venir el próximo sábado?
Germán se sorprendió por la pregunta. Había estado
yendo a la tienda todos y cada uno de los sábados durante los últimos tres meses.—Sí, voy a venir.
Santiago negó ligeramente con su cabeza. Lucía preocupado y Germán no podía entender el por qué.
—Prometemelo –el menor frunció el ceño —por favor, necesito que me prometas que vas a venir.
Germán trataba de deducir que es lo que estaba
afligiendo tanto a Santiago así tan de repente, pero al no poder siquiera imaginarlo, se limitó a tratar de
calmarlo, que regresara a la normalidad. Al Santiago feliz sin preocupaciones.—Te prometo que voy a volver el próximo sábado, Santi –dijo en su tono más dulce y sincero.
El mayor suspiró y pareció aliviarse. Pero en sus
hermosos ojos celestes aún permanecía lo que parecía ser temor.-Gracias –dijo tratando de dar su mejor sonrisa.
Germán por su parte le dedicó su más hermosa sonrisa angelical al punto en que sus hoyuelos se marcaron notablemente.
Santiago lo vió alejarse. Justo antes de salir por esa puerta, él se volteó dedicándole una última pequeña sonrisa dibujada en su cara aniñada. Se sentía bien, pero no podía alejar esa maldita presión en el pecho.Los siete días siguientes fueron eternos para Santiago.
Cada minuto, no podía sacar a Germán de su mente.
Todas las cosas que habían ocurrido.
Debía estar preparado para lo que sea que fuese a ocurrir.
Acomodó su uniforme azul marino, colocó el gorro color negro que Germán le había obsequiado sobre sus rubios rulitos, y se dirigió al centro comercial.-Llegaste temprano –dijo el encargado con las llaves
en sus manos, comenzando a abrir el local para la jornada del día.-Sí, me desperté temprano y no pude volver a dormir –dijo con una risita.
En realidad apenas si había podido conciliar el sueño
durante la noche.
La jornada laboral empezó. Santiago trataba de mantener su cabeza ocupada en cualquier otra cosa, la ansiedad lo estaba carcomiendo por dentro.Para su suerte sólo tuvo que soportar un par de largas horas antes de ver esa silueta atravesar la puerta de entrada al lugar. Suspiró de alivio, porque después de todo, Germán cumplió su promesa y se presentó, pero él seguía paranoicamente nervioso.
Germán camino hacia él como si nada. Santiago lo observaba expectante.
Cuando estuvieron frente a frente se quedaron en silencio mirándose fijamente. El menor no comprendía el por qué Santiago no lo saludó efusivamente y comentando alegremente lo primero que se le venía a la cabeza como acostumbraba. Decidió ser él quien rompiera el silencio, antes de que éste se tornara más incómodo.–¿Hola?–dijo algo tímido.
Santiago escuchó su voz y se dió cuenta de que se había quedado congelado. Sacudió ligeramente su cabeza y dedicó una bonita sonrisa.
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el chico de los CD's - santutu x unicornio
ФанфикGermán padece una enfermedad la cual le dificulta demasiado socializar... hasta que conoce a Santiago, un joven de ojos azules que trabaja en una tienda de música. -- « © El chico de los CDs by HeHasBlueEyes Todos los créditos correspondientes a la...