Caricias Nocturnas

Cap. 3 : Lo siento

Ayer antes de ir a la misión junto a Natsu, ya que Happy estaba enfermo, tuve la mayor decepción de mi vida, nunca creí que su corazón escondiera todas esas cosas que me dijo, me sentí abatida, pero no lo demostré, antes sus palabras debía ser fuerte, no quería que me viera Natsu con la penumbra del desconcierto y dolor que se dibuja en mi rostro, actué lo más normal que pude, luego de que la misión terminara, volví a mi casa y me encontré con Natsu en mi cama, y con todo lo acontecido olvide ese episodio. Pero ahora volvía como un látigo golpeándome la cara.

-¿Lucy? Necesito hablar contigo, por favor ábreme

Natsu se detuvo en seco cerca de la puerta al escuchar su voz, Levy volvió a insistir

-Lucy, sí no me quieres abrir lo entiendo perfectamente, sólo escúchame- Continuo:

-Lamento mucho todo lo que dije, fue infantil desahogarme contigo, nunca debí decir tan horribles cosas, lamento todo lo que te dije, nuca debí decir eso. Eres mi mejor amiga la única que me entiende, eres importante para mí, sé que la jodí.

Lucy no eres tonta, ni inútil y mucho menos una puta.

Eres todo lo contrario a lo que dije, era rabia que sentía en esos momentos la que dijo esas cosas, no tendría que haberme descargado contigo. Por favor abre la puerta, necesito decirte todo esto mirándote a los ojos.

Natsu queda mirando a la rubia apoyada en la pared, puede vislumbrar el dolor en su rostro quiere dejarla sola para que ella y la otra chica puedan arreglar sus diferencias, y vuelvan a ser amigas, retrocede hasta ella, le besa la frente despidiéndose, las delgadas manos de la rubia sujetan las suyas, no quiere estar sola, sus ojos suplican su presencia y ella lo necesita.

Toques en la puerta, Levy insiste, quiere hablar con Lucy disculparse como es debido, el corazón de la chica al otro lado se está destrozando por la demora de ésta. "Lucy abre, te lo pido abre la puerta no quiero estar así contigo, como quisiera retroceder el tiempo y que la rabia que me consumía nunca te haya afectado, nunca quise lastimarte, la puerta la puerta".

Con los ojos llenos de lágrimas Levy contempla como la puerta se abre, los fuerte brazos de Natsu son los que primero observa en este instante, Lucy se haya sentada en el sillón mirando por la ventana, no puede mirarla, no quiere mirarla.

No puedo verla a la cara, no quiero llorar pero mis lágrimas me traicionan y comienzan a salir raudas por mis lagrimales, escucho el abrir de la puerta, sé que ella me mira, lo puedo sentir, pero no la mirare, no tengo la suficiente fuerza para hacerle frente después de cómo me trato, ni siquiera debí de haberla recibido.

Lucy, comienza a hablar la muchacha:

-Lamento haberte dicho todo eso, no era yo misma en ese instante, nunca debí desquitarme contigo, fui infantil y muy estúpida. Eres mi amiga, mi mejor amiga. Por favor mírame, necesito que me mires, Lucy... por favor...mírame...quiero que escuches todo lo que paso ese día y el por qué me desquite contigo.

Girando la cabeza para observar a Levy, Lucy llorando la mira. Ambos corazones de desquebrajan, aun así, con la mirada erguida, le dice que continúe.

-Ese día, me encontré con Ganjeel en el bar del gremio, estábamos solos, por alguna razón él estaba solo. Comencé a ponerme nerviosa, tú sabes mis sentimientos por él, tú más que nadie los comprende. Para que no se diera cuenta de cómo me sentía, me introduje en los libros que estaba leyendo, podía sentir mi cara ardiente, pude sentir que me miraba, volví mis ojos hacia él, fue en ese instante cuando lo más lindo que me pudo haber pasado, ocurrió, coloco su mano sobre mi cabeza y me beso, me sentí como en el cielo, pero...segundos después...me tira como un objeto... sus ojos eran fríos y duros, ese beso no significo nada, me toma del brazo y susurra algo que no logre entender muy bien, pero me quede con la idea general de lo que escuche, "creí que si te besaba sería estupendo, pero no lo fue enana". Me levante con los ojos llenos de lágrimas y salí corriendo, no deje que siguiera lastimándome; sentía tanta rabia, pena e impotencia, que creí que mi corazón se iba a romper, fue en ese instante cuando nuestros caminos se cruzaron, y... yo tan tontamente volqué toda las amargas emociones de mi pecho en ti. Luego... cuando quise disculparme te habías ido a la misión con Natsu y ya no pude redimirme.