Las cartas que no entregué

Tres fantasmas

Para: Ellas

Adoro la música de Harry Styles, sus canciones me acompañaron en una época gris de mi vida, al escucharlas se sentían como un abrazo, como un mensaje lleno de esperanza que me decía que todo estaría bien. Ya sabes, "we'll be alrigth".

Aunque hubo una canción que siempre me ha parecido realmente triste: "Two Ghosts"; una canción que muestra cómo dos personas que se amaban, poco a poco comienzan a hacerse totalmente ajenas. Recuerdo que usé el concepto para describir una situación presentada en uno de mis libros, incluso me sentí de esa manera cuando el chico que yo quería que se quedara conmigo se alejó poco a poco, y hoy somos dos fantasmas.

Pero sabes,  nunca pensé que la canción dolería más para describir una amistad que se ha desmoronado.

Ella sigue teniendo el cabello castaño, exactamente igual que como cuando nos conocimos, sus ojos siguen siendo aquellos que miré por primera vez y me parecieron hermosos, hermosos son sus ojos color café, con pestañas largas adornandolos y un fino delineado; su perfume es el mismo, ese perfume tan dulce que llega a ser escandaloso y que cada que podía la molestaba con eso, sus labios siguen siendo gruesos y siempre pintados con colores terra que hacen resaltar su tez blanca.
Sigue escuchando a sus bandas favoritas y su cantante favorita todavía es Ariana Grande, ella sigue coleccionando Kuromis porque nunca son demasiadas. 

Mi otra amiga también sigue teniendo su cabello rizado negro, algo alborotado pero precioso, sus grandes ojos siguen siendo los mismos, sus pestañas largas y hermosas, sus lunares están exactamente en los mismos lugares, sigue usando tonos cafés para vestirse, sigue escuchando a Taylor Swift y diciendo que tiene una canción para todo (lo cual es verdad), ella sigue siendo la más alta del grupo.
Anillos siguen adornando sus manos y todavía usa el mismo perfume.

Yo, yo sigo teniendo mi cabello largo, negro y extremadamente lacio, sigo usando mis lentes, sigo vistiendome con el color verde, todavía me tardo un montón en terminar mis apuntes porque soy la chica de los plumones, aún me paso mil horas leyendo, escribiendo, tocando el ukelele y escribiendo sobre cualquier cosa, sigo usando exactamente el mismo suéter.
Mi estatura no ha cambiando en lo absoluto, al igual que no ha cambiado mi amor por la música de Harry Styles.

Las tres nos vemos igual, pero no somos quienes solíamos ser...
Las risas se han apagado, poco a poco nos hemos alejado, las miradas dejaron de expresar y el tiempo que pasábamos juntas se ha esfumado.
Somos tres fantasmas tratando de recordar cómo era su amistad.
Tal vez ahora tengamos intereses diferentes y por eso cada una se ha enfocado en aquello que cree más conveniente, pero debo decir que duele...

Duele que ya no compartimos más momentos, duele ver a una de ellas con aquella persona que me hizo volar y que cuando menos lo esperé me dejó caer.
Duele que ya no prefiera nuestra compañía, duele sentirme ajena a ella, no  poder tener esa confianza de contarle todo aquello que me lastima.

Pero todo inicio tiene un final y es por ello que tal vez nos duela mucho, o por lo menos a mí sí que me duele, pero ahora nos hemos convertido en tres personas extrañas, en tres fantasmas...

Sinceramente:
Claris