SIPNOSIS
Cuando llegue a Sparks un pueblo ubicado en irlanda creí que podría quedarme, comencé a tener amigos, la gente a mi alrededor me conocía, eran amables, también me enamore por primera vez, algo que no entendía muy bien porque no tuve quien m...
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CAPITULO 42
NARRADOR OMSNICIENTE
El aire golpea sus mejillas, helándole la cara, han recorrido horas de viaje en carretera, tardando mas de lo habitual, su mano se desliza al vientre abultado donde yace la vida de un ser que nunca pensó fuera capaz de engendrar, no saben el sexo del bebe, pero lo esperan con ansias, es su tercer hijo, lo cual iba a ser demasiado especial, pero el misil cayo en su hogar, arrebatándoles una espera ansiada.
Se bajan en medio de la carretera toma a sus pequeños hijos uno en cada mano, mientras sus tres esposos esconden el auto, revisándolo por todos los ángulos, Alemania era su casa, sus suegros tuvieron que quedarse, se negaron a irse, por lo que la única manera que encontraron fue que los miembros mas antiguos de la bratva estuvieran con ellos, en un arreglo bastante raro.
Negándose a ceder, pero tampoco queriendo exponer a sus hijos, nueras y nietos, pero la principal motivación era ser el frente principal, funcionar como una opción retrasando la llegada de sus enemigos a sus familias, no fue fácil alejarse, especialmente para Emma, había logrado obtener una familia después de todo, no estaba en sus planes, pero un regalo tan precioso como ese, era imposible no tomarlo.
-hey daddy! - llama a su esposo Isaac molestándolo con el nombre, sin embargo, este obedece murmurando- vamos te encanta ese nombre
-cuando pides mas de lo que puedes soportar, claro que me encanta-le da un golpe en la nariz-no en medio de la nada con psicópatas siguiéndonos.
-por favor ustedes tres terminan deshidratados por mis increíbles técnicas-sonríe con suficiencia provocándolo, los tres se ríen haciéndola fruncir el ceño-esas risas no me agradan, se las quitare a golpes.
-mamá es muy mala mentirosa-theron su segundo hijo se une para molestarla-mis papis son fuertes.
Sofí cubre su risa con su mano, girándose para que su madre no la vea, ellos dos no entienden de lo que hablan, pero hacer que su madre haga pucheros como el que tiene en ese momento es una alegría en sus vidas, no cambiarían a la mujer que es su madre, adoran como puede ser tan abierta con sus emociones, sienten que no hay secretos entre ellos, en su familia.
Se aman intensamente los unos a los otros, confiando ciegamente, en un amor que aun cuando crezcan siempre regresaran por los mimos de sus padres, adoran estar en casa, regresar de la escuela y que sean los cuatro quienes los esperan en el pórtico, con sonrisas y preguntas, interesándose en su vida.
Una rama se rompe alertando a los demás, los pequeños se presionan contra las caderas de su madre, los tres hombres grandes de esta familia los rodean alzando las armas que sacan de la cintura, entregándole una a su mujer, no permitirán que nadie llegue a ellos, pero de fallar, se aseguraran de que puedan estar en un lugar seguro.
El silenciador no logra apagar el ruido de los disparos contra las siluetas que revelan su presencia, hombres y mujeres con las miradas perdidas, los amenazan, su vida, la integridad de continuar, pero a pasado tiempo desde que lograron doblegarlos, han estado entrenando con legión.
