Walking With A Ghost (#3 de la serie "Walking With A Ghost")

Hogar

NA: No sé si considerarlo como contenido sensible, pero por si acaso aviso de que hay descripciones de violencia y una referencia al suicidio (no de manera explícita, se habla de una cicatriz, nada más).

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SIMON "GHOST" RILEY - FO 141
HOGAR
NORTE DE LA ÓBLAST DE SUMY, UCRANIA
9 DE NOVIEMBRE DE 2022, 02:15

Se detuvo y respiró hondo, llenándose los pulmones del olor a pino. Pero del de verdad , no del que ponen en los ambientadores de coche. Aunque no salía demasiado a hacer senderismo, a Ghost le gustaba la naturaleza y disfrutaba de ella cada vez que una misión los llevaba lejos de la civilización. Caminar entre los árboles, pisar las hojas, el silencio...

Sí, sobre todo el silencio.

La falta de estímulos sonoros era un motivo de peso para que, estando en mitad de un bosque ucraniano, se sintiese cómodo. Odiaba el ruido, lo irritaba, por eso siempre llevaba los auriculares puestos; conectados al mp3 cuando estaba de descanso o a la radio si estaba en una misión. Sin embargo, en aquellos momentos, Ghost se los había quitado y los llevaba colgados del cuello, dejando descansar los oídos. No los necesitaba, su compañera iba unos pasos por delante de él y, por precaución, estaban desconectados de la red.

Charly se detuvo y se llevó una mano a la cintura, echando la espalda hacia atrás. Ghost aceleró un poco el paso y se detuvo a su lado.

—¿Todo bien? –le preguntó en voz baja.

Ella lo miró y sonrió.

—Las cuestas me pasan factura –respondió–. Se me cargan las lumbares una barbaridad.

Simon asintió sin decir nada y echó un vistazo a su alrededor, comprobando que todo estaba en orden. Distinguió una manada de venados, varios metros más allá, y se relajó un poco al ver que estaban tranquilos. Se volvió hacia Charly cuando escuchó movimiento y ella levantó el pulgar de una mano, colocándose las gafas de visión nocturna y reanudando la marcha. Ghost la siguió en silencio. Estaban cerca de su destino, una vieja mina abandonada donde la CIA creía que estaría su objetivo.

König.

Apretó la culata del fusil sin darse cuenta y se obligó a respirar hondo. Antes de salir, Price les había dado toda la información que necesitaban para la misión. Laswell, mediante videoconferencia, comentó que creían que estaba trabajando para Makarov, suministrando armas de todo tipo. A Ghost no le sorprendió. El contrabando era una de las cosas que mejor se le daba. También les advirtió que no se enfrentaran directamente con ellos, que su único objetivo era averiguar hacia dónde enviaban las armas. Price hizo hincapié en esto último, mirándole, y Simon tuvo que asentir a regañadientes. Saber que podría tenerlo al alcance de la mano y no poder cortarle el cuello lo estaba matando por dentro.

—Así que... tú y Soap, ¿no?

Ghost la miró y se colocó los auriculares, aumentando la amplitud de su zancada para poner espacio entre ellos. Charly era una mujer fuerte, inteligente y divertida; una buena soldado que había empezado a hablar más con él a raíz de su amistad con Soap. Y sospechaba que aquella era la razón por la cual había cambiado su actitud. En realidad, a pesar de mantener la distancia con todo el mundo, Simon se llevaba bien con sus compañeros de la 141 y, a su manera, se preocupaba por ellos.

Bueno, hasta cierto punto.

—No huyas, cobarde –dijo ella a través de la radio, riéndose entre dientes–. Sigues conectado a la radio.