POV Chiara
Ruslana abrió la puerta del cuarto de Chiara para encontrarse con una cama vacía. La chica estaba confundida, caminó dentro de la habitación y no había rastro de su amiga.
–Keeks? – dijo Ruslana con preocupación.
Tras unos segundos mencionando el nombre de su amiga, decidió ir a la habitación de Martin para notificarle lo que estaba sucediendo. Ruslana golpeó la puerta dos veces.
–Adelante. – dijo Martin quien tenía a Chiara dormida entre sus brazos.
–Ah, vale. Aquí está. – dijo Ruslana aliviada. – Fui a la habitación de Chiara y estaba vacía, tremendo susto que me dieron.
Chiara abría los ojos de a poco, viendo a sus amigos a su lado.
–Veo que no fui invitada a la pijamada. – Ruslana se recostó al otro lado de Chiara.
–Qué va, no fue planeado. – Martin dijo tomando su celular
–Sorry, Rus. I just had a bad night. –
Los chicos se quedaron unos minutos tonteando en la habitación de Martin. El chico no quería tocar el tema frente a Ruslana, pero estaba un poco preocupado.
–¿Deberíamos salir a desayunar? –
–No me apetece salir. – Martin mencionó mientras se cubría con una cobija. Ambas amigas procedieron a saltar en la cama y molestarlo.
–Let's go, va a ser divertido. –
Ruslana bajó de la cama y empezó a caminar al marco de la puerta, donde se detuvo unos segundos.
–Yo sé que la Keeks te va a convencer, así que iré alistándome. –
Ruslana dejó la habitación, Martin y Chiara estaban por fin solos. Martin se sentó en la cama y golpeó dos veces el lugar a su lado, como pidiéndole a Chiara que lo acompañara.
–¿Por qué viniste a dormir ayer? digo, que sepas que no me molesta, yo te amo con el alma. Solo... me preocupé un poco. ¿Quieres hablar de ello? – dijo Martin mientras tomaba la mano de Chiara. –
–Es bobo. –
–Si te duele no es bobo. –
–Yo... le mandé mensaje a Violeta y ella no contestó, lo peor es que vi un tweet sobre que su ex estaba en su departamento. Siento que todo fue un juego o una broma. – Chiara dijo, sus ojos entristecidos tenían su brillo apagado. – Y entiendo que no debería ponerme triste porque no nos conocemos de nada, y ni siquiera debí ilusionarme de primera, pero se sintió lindo saber que alguien gustaba de mí, y terminó siendo todo un juego. –
Martin tomó a su amiga entre brazos y besó su cabeza repetidamente. Era horrible ver a su amiga triste, creía que ella solo merecía lo mejor. Era la persona más linda del mundo, al menos ante sus ojos.
–Lo siento, Keeks. Si todo pasó de esta manera, tal vez era lo mejor que no se dieran las cosas desde el inicio. –
Ruslana volvió a la habitación, quedándose nuevamente en el marco de la puerta.
–¿Nos vamos? –
Martin y Chiara rompieron su abrazo, levantándose de la cama para arreglarse.
POV Violeta
Violeta y Paul se despertaron tras unos ruidos y muchos pasos. Salieron de la habitación para encontrar a Denna reacomodando el armario del cuarto de Violeta para hacerse un espacio.
–Buenos días, amor. – Denna corrió a darle un beso en la mejilla a Violeta y colgarse de su cuello. – Hice espacio para mis cosas en tu armario, tomé un poco más de la mitad.
Violeta estaba paralizada, no sabía cómo deshacerse de la chica sin realmente dañar sus sentimientos. No quería ser violenta. Paul estaba a su lado con cara de incrédulo.
–Es que esto no puede ser verdad, tía. – dijo Paul.
–Esto no te incumbe, tú vives aquí gracias a Violeta. – dijo Denna soltando a Violeta y acercándose a Paul.
–Basta ambos. Solo... solo por favor, toma tus cosas y vete. No puedes quedarte más aquí. –
El celular de Paul sonó, el chico atendió la llamada y caminó hacia su habitación. Denna y Violeta estaban solas en la habitación.
–¿Me echarás? – dijo Denna.
–Claro. Necesito que te vayas. Este es mi hogar. No eres bienvenida, no tienes el derecho de volver, así como si nada después de lo que hiciste. Me fallaste. – los ojos de Violeta comenzaban a verse cristalinos conforme decía estas palabras – Yo no quería volver a verte. –
Denna se acercó a Violeta para intentar abrazarla, pero ella se negó. Violeta salió de la habitación para ir a donde estaba Paul. Violeta llegó con lágrimas corriendo por su rostro, a lo que Paul colgó rápidamente su llamada.
–Amore, ¿Qué pasa? – Paul dijo mientras acariciaba el cabello de la chica.
–Yo ya no quiero verla. – Violeta lloraba, cuando por fin tuvo la distancia adecuada con Paul, escondió su cara en su pecho. A la chica no le gustaba que la vieran llorar, pero con Paul era diferente, era su mejor amigo. Paul sostuvo a la chica por unos minutos.
–Odio tocar el tema justo en momentos como este, pero... la llamada que tuve era Rod, tu manager. Me habló sobre que está en todos los sitios de noticias que te estás volviendo a ver con Denna. Dijo que no le cogías el teléfono así que lo iba a hablar conmigo. No quieren que sigas saliendo con Denna, o que seas vista con ella; ni con ella ni con nadie. Tratan de evitar que te ganes una reputación de rompecorazones, ya sabes, fue Denna y luego Salma, y ahora otra vez Denna.
–Pero yo nunca estuve con Salma. – dijo Violeta un poco confundida.
–Bueno, pero su equipo se encargó de darlo a entender en muchas de sus entrevistas. –
–Es estúpido. Eso jamás pasó. Aparte, tengo derecho a salir con quien yo quiera. –
–Totalmente de acuerdo, pero viene la gira y no quieren malos entendidos ni chismes. Todo se tiene que tratar sobre la gira y solo eso. –
Paul y Violeta se tomaron un tiempo para calmarse. La chica de verdad necesitaba tiempo para procesar todo lo que le había dicho y todo lo que estaba sintiendo al volver a ver a Denna. Violeta decidió tomar su celular. El mensaje seguía ahí sin ser contestado, a lo que Violeta se sintió muy mal. Odiaba contestar tarde, odiaba que la gente pudiera pensar que lo hacía para verse más interesante. Violeta abrió aquel chat.
Violeta
Holaa. Supongo que eres Chiara. Digo, no voy por
la vida dando mi número a la gente, jajaj.
¿Cómo estás?
No te vi en el after party.
Violeta cerró aquel chat y bloqueó su celular para después ponerlo sobre la mesa de noche.
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Han sido días pesadísimos, perdón por la ausencia.
¿Uno más?
