Parte 8-Intento fallido...

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(advertencia: sangre y maltrato)

[Calles de Brooklyn/ Tierra 42]

Miles despertó ante el sol de la mañana golpeando su rostro.

El chico estornudo. El frió le sentó muy mal y ahora probablemente estaba resfriado.

El spider-man empezó a dar vueltas por la ciudad buscando algo para beber o comer.

Después de unos minutos. Miles se sentó a descansar en un callejón, tomo una canasta vieja y deteriorada, la dejo frente de él e intento dormir ya que ahora no hacía tanto frío.

Logro dormir, después de unas horas, el despertó, miro la canasta y noto que tenía unos $20.

Miles lloró de felicidad porque tenía algo de dinero para comer, miro al cielo agradeció a quien sea que le dejo el dinero.

Se puso de pie y fue a comprar algo de comida.

Después de unos minutos, llegó a una tienda, compro un jugo de naranja pequeños y unas papitas en bolsa.

Miles de sentó a comer. Al terminar se veía menos hambriento pero aún tenía hambre.

El chico decidió continuar caminando por la ciudad. Buscando algo más para comer.

En otra parte, Morales buscaba a Miles por cielo y tierra. Dando vueltas por la ciudad. Empezó a preguntarle a gente por la calle si había visto al chico.

Nadie le dio información que le sirva a Morales. Este estaba MUY molesto, intentando encontrar al Spider-Man. Quería encontrar a Miles AHORA, lo quería en su poder, quería torturarlo, darle un castigo para hacerlo sufrir en serio.

-Pobre de ti cuando te encuentre, Miles...
Farfulló Morales en voz baja.

Después de unas horas, una mujer le respondió a Morales una respuesta satisfactoria en cuanto escuchó la descripción de la apariencia del chico "oh, si, lo vi en un callejon cerca del parque al lado de la carretera, estaba con ropa sucia y rota, pense que era un vagabundo y le di unos $20." Dijo la chica.

-Gracias...

Respondió Morales y se dirigió al callejón para tener una mejor idea de donde estaba Miles.


Mientras tanto el chico, deambulaba por las calles hasta que llegó el anochecer, una brisa helada se levantó... El chico se sentó en un banco donde no llegaba tanto el viento de la noche.

El Spider-Man se quedó medio dormido y... Sintió una mano tocando su hombro.

-Aqui te metiste, maldita puta.

Era Morales y le dio una cachetada a Miles.

-¡¿Como mierda te atreves a escapar de mi?!

Gritó el Merodeador y volvió a golpear a Miles.

-¡Detente!
El chico entro en pánico.

-Te voy a dar una lección. Ahora, vamos a nuestra "casa".

Morales tomó a Miles del cabello y lo tiro al suelo ¿Que no hay nadie en la calle?¿Nadie que vea lo que Morales le hace?¿No hay nadie que lo ayude? Era la madrugada, no había nadie en el parque.

-Ahora...¡Muévete inútil!

Gritó Morales y le dio una patada al chico. Este se puso de pie. El Merodeador lo agarro del cabello y lo jalo bruscamente durante todo el trayecto.

Aunque Miles se resistía, Morales le daba un golpe en las costillas y lo seguía jalando del cabello hasta donde estaba el Spider-Man secuestrado, el chico intentaba resistirse pero estaba muy debil.

Una vez llegaron al lugar. El Merodeador le dio una paliza al chico. La golpiza continuo por unos minutos. Morales ya se había desquitar bastante pero aún quería seguir golpeando a su rehén. El Merodeador le dio unas patadas en la cara a Miles y se sentó en una silla a tomar aire.
El chico tenía la nariz rota y estaba muy golpeado, estaba sangrando en el suelo.

-Mierda... Me cansé de golpearte...

Morales suspiro.

-Y tú pareces estar cansado de que te  golpeen...

El Merodeador puso los ojos en blanco mientras miraba a Miles sangrar.

-Como sea. Apenas empieza tu castigo, así que deja de llorar.

Morales agarro al chico de las mejillas y le limpio la sangre de la cara con su mano.

-E-eres... u-u-un... m-m-monstruo...
Tartamudeo Miles. Mientras miraba a Morales con resentimiento y miedo.

-Y tú un niño tartamudo. Y cuida tus palabras conmigo... Te iba a amarrar al saco de boxeo, pero... Ahora, irás a tu jaula.

-¿J-jaula?

-Si, jaula.

El Merodeador se dirigió a un lugar con una manta blanca. Quitó la manta y mostró una pequeña jaula de cristal.

-Ven aquí.

Morales tomó a Miles del cuello y lo jalo hasta la jaula. El chico no quiso entrar porque la jaula tenía unas cuantas filas de pequeños pinchos.

-¡Metete ahí!

Gritó Morales y le dio una patada al Spider-man metiéndolo en la jaula. La cerró con candado.

-Estaras allí hasta que yo quiera y estarás allí como castigo, no intente moverte, esos pinchos van a lastimarte más de lo que ya estás. Asegúrate de no morir.

Morales se dio media vuelta y se fue.

Miles suspiro tristemente, pensó que era libre y ahora, volvería al infierno del que quiso huir.


Hola!!
No tengo nada que decir, F por Miles 😢
Gracias por leer hasta aquí<3
Bye

Déjame ir!(Milescest)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora